OMC/Algodón
* Ignoran EU y Unión Europea propuesta sobre algodón
- Países pobres asfixiados por subsidios algodoneros
Cancún, Méx. 12 Sep (CIMAC) .- Estados Unidos y la Unión
Europea (UE), ignoran una propuesta presentada por cuatro
países africanos que demandan el fin de los subsidios a
la producción de algodón, lo que impulsa a la baja los
precios internacionales del producto y afecta a los
países pobres. La iniciativa fue presentada por los
ministros de Comercio de Benín, Burkina Faso, Chad y
Malí, de la zona algodonera de Africa occidental en la
Quinta Conferencia Ministerial de la Organización Mundial
de Comercio (OMC), que sesiona en este centro turístico
desde el miércoles pasado. Representantes de los 146
países de la Organización Mundial del Comercio (OMC)
comenzaron a discutir la llamada "iniciativa algodonera",
según un reporte de la agencia internacional IPS. La
propuesta pide que los productores de países en
desarrollo reciban una compensación financiera por las
pérdidas que les ocasionan los subsidios del mundo
industrializado.
Las organizaciones no gubernamentales Oxfam International
y ActionAid, informaron que tanto Estados Unidos como la
UE reaccionaron con indiferencia al pedido, lo que
provocó la indignación de los organismos civiles.
ARGUMENTOS ABSURDOS
Gawain Kripke, de Oxfam International, indicó que "las
dos superpotencias gastan miles de millones de dólares en
subsidios e inundan el mercado internacional con algodón
barato, y tienen el descaro de afirmar que la caída de
los precios se debe a que las personas usan menos
camisetas", señaló.
Estados Unidos y la UE "actúan como si el sufrimiento de
millones de cultivadores de algodón en Africa fuera culpa
de todos menos de ellos", añadió.
La conferencia de la OMC comenzó apenas dos días después
de que organizaciones no gubernamentales celebraran el
Día Mundial del Algodón, paradójicamente respaldado por
la UE.
Según Kripke, los cuatro países africanos dieron a la OMC
la primera oportunidad en Cancún para demostrar que la
Agenda de Doha para el Desarrollo, acordada hace dos años
por la anterior conferencia ministerial en la capital de
Qatar, es un compromiso serio.
Oxfam divulgó el miércoles pasado un documento en el que
acusa a la UE de " dar marcha atrás" en los acuerdos de
Doha, en los que los países ricos se comprometieron a
reducir en forma gradual sus subsidios agrícolas.
La UE "intenta dar marcha atrás a sus compromisos para
eliminar los subsidios a la exportación, al tiempo que
fuerza un acuerdo sobre los temas de Singapur" referidos
a inversiones, competencia, facilitación del comercio y
transparencia en las compras gubernamentales, señaló la
organización civil. Por su parte, el agricultor Ibrahim
Coulibaly, de la Asociación de Productores de Algodón de
Malí, señaló que "en Cancún hay una clara oportunidad
para que los ministros cambien de actitud".
"Si no actúan, amenazarán la credibilidad de todo el
sistema mundial de comercio", advirtió.
Los precios del algodón cayeron más de 60 por ciento
desde 1995. Mientras, los subsidios de Estados Unidos a
sus 25 mil cultivadores algodoneros llegaron a tres mil
900 millones de dólares en 2001, según datos de Oxfam.
AMENAZADA LA CREDIBILIDAD DE LA OMC
"La propuesta de los países de Africa occidental es una
prueba de fuego para el éxito de la conferencia de
Cancún. A menos que Estados Unidos y la UE comiencen a
asumir su responsabilidad por sus destructivas políticas
comerciales, la credibilidad del sistema comercial
mundial estará amenazada" , alertó Kripke.
Los comisarios europeos Pascal Lamy, de Comercio, y Franz
Fischler, de Agricultura, dijeron comprender las
preocupaciones de los países africanos sobre los bajos
precios internacionales del algodón.
Pero la organización internacional Action Aid acusó a la
UE de poner obstáculos al desarrollo del Sur y "burlarse
de Cancún".
"La UE sigue diciendo que quiere que ésta sea una ronda
de negociaciones en favor del desarrollo. Pero, a pesar
de este fino lenguaje, sigue atacando a los países del
Sur en cada área de las conversaciones", dijo el
activista Adriano Campolina Soares, de la delegación de
ActionAid en Cancún.
Campolina Soares señaló que, según documentos a los que
tuvo acceso esa organización, la UE tiene preparada su
propia agenda "contra el desarrollo" para la reunión de
Cancún.
"La UE quiere comerse su pastel y tener sus manos en
nuestro pastel al mismo tiempo", señaló el activista, y
citó como ejemplo la respuesta del bloque europeo a la
propuesta marco del llamado Grupo de los 20 países en
desarrollo, en la que reclaman el fin de los subsidios
agrícolas.
Fischler dijo que los países en desarrollo "están
pidiendo la luna" y advirtió que había "falsas
expectativas" sobre la reunión de Cancún, según el
periódico mexicano El Economista.
"Yo sé que las negociaciones económicas no están exentas
de retórica, pero tampoco hay que exagerar", subrayó el
comisario europeo.
"Cuando consideramos las posturas radicales promovidas
por países como Brasil, China e India, no podemos ayudar
en nada, sino sólo pensar que estamos en órbitas por
completo diferentes. Si quieren hacer negocios, tienen
que poner los dos pies sobre la tierra", indicó.
"Si quieren continuar en su órbita, no alcanzarán la luna
ni las estrellas: se quedarán con las manos vacías",
advirtió. 2003/MES/MEL