Salvaje e indiscriminada represión a protestas cívicas
Tegucigalpa. Agencias. | julio 30, 2009
El Ejército y la Policía golpistas de Honduras reprimieron en forma brutal este jueves las manifestaciones pacíficas en Tegucigalpa, utilizando balas vivas y de goma, lanzando bombas lacrimógenas desde un helicóptero, y extendieron la operación persiguiendo a la población desarmada por varios kilómetros del centro de Tegucigalpa.
En lo que parece otra "operación tenaza" de Estados Unidos, "diálogo por un lado y palo por otro", el embajador de Estados Unidos en Honduras, Hugo Llorens llegó a dialogar con el presidente Manuel Zelaya Rosales en Managua, después que la noche del miércoles el golpista Roberto Micheletti pidió una misión para que se instale una mesa de diálogo "con todas las fuerzas" de Honduras.
Represión salvaje
El Ejército y la Policía realizaron la mañana de este jueves un operativo nacional para reprimir de manera brutal a las manifestaciones pacíficas en contra del golpe de estado presentes en todo el país.
Se ha denunciado que en la posta de El Durazno, en la salida al norte de Tegucigalpa, que la Policía y el Ejército atacaron a la manifestación pacífica utilizando bombas lacrimógenas, balas de goma y armas de fuego.
A la policía no le bastó desalojar a la manifestación pues comenzaron a seguir por más de 5 kilómetros a los manifestantes que intentaban huir del ataque. En esta acción represora se registran mujeres desmayadas, que no permitieron que fueran atendidas.
También fueron agredidos físicamente los dirigentes José Luis Baquedano, Rafael Alegría y Rassel Tomé.
Se ha informado que la mayoría de las bombas lacrimógenas fueron lanzadas desde un helicóptero de la Policía. El Ejército y la Policía también agredieron a transeúntes que desplazaban por la zona, agrediéndolos física y verbalmente, quebrando vidrios de carros y dañando mercadería.
"Ha habido una enorme represión en una de las tomas de carreteras. Hay heridos, hay golpeados, han tirado bombas lacrimógenas y tengo entendido que hay detenidos", informó vía telefónica desde el lugar el líder sindical y dirigente Frente de Resistencia contra el Golpe, Carlos H. Reyes.
Según Reyes, el desalojo se produjo poco después de que los manifestantes bloquearan la salida norte de la capital del país, en una zona conocida como El Durazno, y que dos horas después de la acción policial y militar todavía estaban siendo perseguidos por las fuerzas de seguridad.
El dirigente del movimiento contra el golpe, que además es candidato presidencial independiente para las elecciones del 29 de noviembre, aseguró que la Policía y el Ejército utilizaron tanquetas y gases lacrimógenos para expulsarlos del lugar.
Otros manifestantes explicaron a Radio Globo que los uniformados también dispararon balas de goma, lanzaron bombas de gas desde un helicóptero, impidieron la asistencia a los heridos y los persiguieron varios kilómetros.
El Ministerio de Seguridad anunció este jueves a través de un comunicado que los elementos de la Policía Nacional "tienen instrucciones específicas de velar por el fiel cumplimiento de las garantías individuales y procederán de inmediato" al "desalojo" de quienes obstaculicen "la libre circulación de personas y vehículos".
Se ha denunciado por diferentes medios de comunicación que la Policía se ha hecho presente en las diversas manifestaciones presentes en los departamentos de Comayagua, Santa Bárbara y Cortés, pero en estos momentos todavía no han comenzado ha agredir a los manifestantes.
En Santa Bárbara se arrestó al profesor Ángel Adelfo dirigente del COPENH, un organismo de los derechos humanos de Honduras, antes de llegar a la comunidad de Ceibita.
Sacerdote confirma brutalidad
El sacerdote católico Andrés Tamayo denunció que la agresión comenzó a media mañana cerca de la comunidad de El Durazno, cuando desde un helicóptero se escuchó el sonido de una sirena.
El padre Tamayo aseguró que desde la aeronave fueron lanzadas granadas lacrimógenas contra los manifestantes, cuando eran embestidos por los militares y los antimotines.
Están usando toda la brutalidad, no les importa la gente, que estaba en una actitud pacífica, afirmó a la emisora Radio Globo.
Han golpeado a tanta gente... Ellos quieren mantenerse en el poder a pura represión, aquí ya no hay ley, subrayó el religioso con indignación, luego de haber logrado refugiarse en el mercado Mayoreo, de las afueras de la urbe.
Los dictadores, los tiranos, están reprimiendo al pueblo, en un acto dictatorial cuyo propósito es perpetuarse en el poder. El pueblo no va a rendirse, vamos a seguir en esta lucha, enfatizó un dirigente popular a Radio Globo.
El dirigente de las bases del Partido Liberal, que repudian la complicidad de la cúpula con el golpe, Rásel Tomé, llamó al mundo a condenar la represión, al confirmar la existencia de muchos heridos y afectados por los gases lacrimógenos.
Hilario Espinosa, secretario general de la Confederación de Trabajadores de Honduras, repudió también la agresión de la que fueron víctimas los miembros del Frente.
No vamos a abandonar jamás la lucha de resistencia contra estos golpistas oligarcas. Eso (la represión) nos da más fuerza y valor. No les tenemos miedo, afirmó.
Juan Barahona, coordinador general del Frente Nacional, precisó que la lucha continuará este jueves y los días siguientes, hasta la derrota de los golpistas.
La organización, que agrupa a las fuerzas populares y partidos progresistas, inició este jueves un paro cívico nacional de 48 horas, apoyado por tomas de carreteras e instituciones públicas en defensa del estado de derecho,
Dirigentes populares llamaron a Radio Globo para denunciar que el ejército reprimió a una manifestación en el departamento de Olancho, en el nororiente del país, con saldo por determinar de heridos y gran cantidad de arrestos.
Endurece respuesta del pueblo
Juan Barahona, coordinador general de esa unión popular, confirmó telefónicamente a Prensa Latina haber sido arrestado y brutalmente golpeado por los militares y policías que persiguieron a la multitud.
Nos trataron salvajemente, relató Barahona, quien informó que unas 80 personas se encuentran aún en el lugar donde los mantienen encarcelados.
Barahona afirmó que se declararon presos políticos, pues fueron atacados durante una marcha pacífica en defensa del estado de derecho, roto con el golpe militar del 28 de junio pasado que derrocó al presidente Manuel Zelaya.
Informó que el dirigente sindical y candidato presidencial independiente Carlos H. Reyes recibió heridas en una oreja y una fractura en un brazo. El hecho fue confirmado por el líder campesino Rafael Alegría.
Reportes periodísticos mencionan una gran cantidad de heridos, entre ellos un joven profesor, Roger Abraham Vallejo, quien fue visto en la televisión con un impacto de bala en la cabeza, cuando era conducido a un hospital.
El canal 36 de la televisión pasó imágenes de la persecución militar y de los antimotines a los manifestantes, incluso entre las humildes chozas en los bordes de la Carretera Panamericana, en la salida norte de la capital.
Testigos llamaron a Radio Globo para denunciar actos represivos similares en varios lugares del interior del país, donde la población reclama la restitución del orden constitucional y del presidente Zelaya.
Dirigentes del Frente Nacional contra el Golpe calificaron la acción militar de brutal y ratificaron que la represión del gobierno de facto sólo enardecerá más la resistencia del pueblo a la asonada del 28 de junio pasado.