La Vía Campesina pergeña una gloriosa página de lucha en Honduras
Casi al despuntar el alba del 28 de junio, cuando al pueblo hondureño se aprestaba a depositar su respuesta de aceptación o rechazo a la instalación de una cuarta urna, sonaron en forma horripilante y grotesca las bayonetas y los fusiles del ejército nacional con boconadas estruendosas de “balas de salva o de hule”, tal es la identificación del Comisionado de los Derechos Humanos en Honduras, que dieron al traste con la frágil democracia y la cruenta separación del legítimo presidente constitucional de los hondureños y hondureñas que, a la fuerza y en contra de su voluntad es capturado y expatriado a Costa Rica.
En la aurora de este mismo momento, la bandera verde profunda de La Vía Campesina ondea de manera vibrante y viril, frente a Casa Presidencial, alertando a toda la hondureñidad a globalizar una lucha de resistencia en contra del recién golpe de Estado, a defender en las calles la democracia y la instalación de una Asamblea Nacional Constituyente, con lo cual se comienza a escribir el prefacio de una gloriosa página de lucha que retroalimenta el accionar de este espacio técnico y político para rescatar en las calles los derechos conculcados.
La participación de La Vía Campesina en la lucha de resistencia ha sido amplia, valiente y consistente, en primer lugar, se integra en la primogenitura para la inducción y constitución del Frente Nacional de Resistencia Pacífica en Contra del Golpe de Estado, que lidera todas las acciones insurreccionales del país, en tanto “nadie debe obediencia a un gobierno usurpador ni a quien asuma funciones o empleos públicos por la fuerza de las armas”, según reza el articulado de nuestra carta magna.
La Vía Campesina, a través de su líder legítimo, representativo y conspicuo del movimiento campesino hondureño, Rafael Alegría Moncada, comparte y asume una responsabilidad de dirección política en el Frente Nacional de Resistencia, que es la instancia suprema de conducción y definición de los planes de lucha y del programa de acciones, en cuyo marco se ha conceptualizado la estrategia general en términos de una intervención permanente en las calles, en forma pacífica, participativa y prolongada; asimismo, han ripostado al mediador don Oscar Arias en cuanto a su propuesta de siete puntos coincidiendo en el número uno, referente a la restitución inmediata del presidente constitucional don Manuel Zelaya Rosales.
De manera análoga, La Vía Campesina, a través de su representante más legítimo, Rafael Alegría, forma parte de la Comisión Negociadora de don Manuel Zelaya en la mediación que conduce don Oscar Arias, Premio Novel de la Paz y presidente constitucional de Costa Rica, en cuyo ámbito, nuestro líder natural, Rafael Alegría, ha expuesto conceptos brillantes en torno al restablecimiento de la democracia hondureña, el reintegro inmediato de “Mel” Zelaya y la visión del establecimiento de una Asamblea Nacional Constituyente, como una forma de avance para la democracia participativa que exigen y requieren los hondureños y hondureñas.
Asimismo, La Vía Campesina, portando su estandarte de “globalicemos la lucha” y junto a las organizaciones sociales del movimiento social hondureño, que constituyen en Frente Nacional de Resistencia Contra el Golpe de Estado, está permanentemente en las calles habiendo participado de todas las movilizaciones realizadas a la fecha, especialmente las tomas de carreteras, que golpean sustancialmente la economía capitalista, paros generales y manifestaciones formativas o educativas, que también son multitudinarias, y tienen la finalidad de informar al pueblo sobre la lucha y las intencionalidades del golpe, como también distribuir pronunciamientos, boletines y hojas volantes a los habitantes de colonias, barrios y vendedores de mercados para que actúen conscientes e informados; imprimiendo una conceptualización de lucha de clases de “Los de Abajo”, como dice el escritor mejicano Mariano Azuela, en contra de los de arriba, de los pobres versus los ricos.
En iguales términos, La Vía Campesina ha cumplido un rol de enlace en la comunicación para el movimiento campesino hondureño y toda la red de esta instancia en Centroamérica, Latinoamérica y el mundo, dando a conocer los avances de la lucha insurreccional en Honduras, especialmente sus logros en el restablecimiento de la democracia y la potenciación que paulatinamente va adquiriendo el Frente Nacional de Resistencia en Contra el Golpe de Estado.
Como si fuera poco, la solidaridad militante de La Vía Campesina Centroamericana, latinoamericana y mundial ha trascendido en diferentes formas y manifestaciones en todos los países del globo: Tomas de carreteras, aduanas, puertos, pronunciamientos y participación directa en manifestaciones hondureñas en las cuales se han distinguido nicaragüenses, salvadoreños, guatemaltecos, brasileños, venezolanos, argentinos, franceses, entre otros representantes destacados.
Por todo lo anterior, nos atrevemos a sostener que la capital mundial de La Vía Campesina se encuentra en Honduras, donde está pergeñando una página gloriosa de lucha tendiente a dignificar y honrar a los y las más pobres, que sufren en carne propia el cruento golpe de Estado.