El Gobierno de facto, Roberto Michelleti, dio un plazo de 72 horas a toda la misión diplomática de la Embajada de Venezuela para que abandone Tegucigalpa, de igual manera que Honduras lo hará con su personal en Caracas. Al mismo tiempo funcionarios y empresarios afines a los golpistas han anunciado su intensión de suspender la pertenencia de Honduras a la Alternativa Bolivariana para los pueblos de América y el Caribe (ALBA).
 
La Viceministra de Relaciones Exteriores, Marta Alvarado, justificó que esta decisión se produce "en vista de que el Gobierno de Venezuela ha hecho amenazas a nuestras fuerzas, se ha entrometido en los asuntos exclusivos de Honduras, ha irrespetado nuestra soberanía". Alvarado se refería a las declaraciones que el mandatario venezolano, Hugo Chávez, ha hecho en contra de Micheletti, a quien ha apodado "gorileti", término que ahora usa el pueblo para referirse al golpistas.
 
En varias ocasiones, el mandatario venezolano ha expresado su apoyo a la idea de que Zelaya retome el poder en Honduras y ha asegurado que a "los gorilas" del Gobierno 'de facto' les queda "poco tiempo" en el poder.
 
El Ministerio de Exteriores de Honduras envió el pasado 15 de julio una carta al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en la que exponía su preocupación por las amenazas de Chávez de enviar tropas a territorio hondureño "con el propósito de realizar una intromisión en los asuntos internos". Sin embargo está no fue admitida en el Consejo de Seguridad para su discusión.
 
En contra el ALBA se declaran funcionario de facto
Nuevamente, Marta Alvarado, aseguró hoy que la crisis política que vive Honduras, ruptura del orden constitucional, Manuel Zelaya es un reflejo de la lucha contra la "avalancha" de la Alianza Bolivariana para los Américas (ALBA) en la región. "En Honduras se está jugando un papel muy importante en el sentido de que de Honduras depende si continúa la avalancha de los países del ALBA, y también de Honduras depende que los pueblos que están sometidos por estas presiones de los países del ALBA se despierten", declaró Alvarado a la prensa.
 
Por su parte, Santiago Ruiz, presidente de la Federación Nacional de Agricultores y Ganaderos de Honduras (FENAGH pidió al gobierno que proceda de inmediato a derogar el acuerdo de la ALBA, supuestamente para evitar problemas a futuro con personas oportunistas.
 
El ALBA propone un modelo de desarrollo endógeno sustentable, solidario e incluyente que a la vez garantice la supervivencia como pueblos de América. Iniciativa a la cual Manuel Zelaya adhirió en 2008 a Honduras, impulsada por el Venezuela, Cuba, Nicaragua, Bolivia, Ecuador y varios países caribeños.
 
Alvarado reiteró que el Gobierno que preside Roberto Micheletti "está estudiando" desde hace varias semanas la retirada de Honduras del ALBA.
El Gobierno golpista ha denunciado las "amenazas" de Chávez y ha hecho de ellas uno de sus argumentos más reiterados ante la población hondureña para justificar el golpe del pasado 28 de diciembre.
 
21 de julio 2009