Queridos / as hijos e hijas de la Nación Salvadoreña, reciban un fraternal saludo de las diferentes organizaciones que hacen resistencia al Libre Comercio y que en este periodo han estado vinculadas al monitoreo de la misma, esperando que la llama de la esperanza siga más viva y encendida que nunca, en la búsqueda de mejores condiciones de vida para todos/as nosotros/as.

El TLC con Estados Unidos es un tratado que, además de ser inconsulto e inconstitucional, es un instrumento que genera las condiciones jurídicas e institucionales para profundizar la aplicación de las medidas neoliberales que van en detrimento de los sectores poblacionales más vulnerables. Ante esta situación, ya estudiada desde antes de la aprobación de este tratado, hemos realizado un constante monitoreo del mismo.

Mediante las diferentes investigaciones económicas llevadas a cabo, hemos observado que ninguno de los aspectos favorables que se justificaron en las negociaciones de los tratados y en particular, del CAFTA DR, se han materializado en la vida de las familias salvadoreñas y el entorno macroeconómico, muy por el contrario, se ha deteriorado, agudizándose el déficit de balanza comercial, beneficiando a un pequeño grupo de exportadores e importadores, así como al capital transnacional bajo la complicidad directa de los gobiernos del partido ARENA.

El CAFTA ha profundizado el encarecimiento de la canasta básica familiar, ha icrementado la dependencia productiva y la vulnerabilidad estructural del aparato productivo nacional ante la crisis internacional del capitalismo, limitando la capacidad soberana para construir políticas públicas en función de las grandes mayorías.

Los precios de los granos básicos se han incrementado de manera descontrolada, asociado a la estructura oligopólica que tiene dicho sector; sin embargo, esto no se ha traducido en mayores ingresos para los pequeños productores agrícolas. El crecimiento sustancial de las importaciones de estos productos ha provocado, que salvo el maicillo, todos los granos básicos a los que se les asignó una cuota de importación, hayan superado con creces su límite en los primeros años de CAFTA.

La implementación del CAFTA-DR en El Salvador, ha transformado jurídicamente a través de la propiedad intelectual, nuestras formas culturales de proteger los recursos naturales como la semilla, dando paso a prácticas de biopiratería, que son otras formas de robar el conocimiento y las prácticas ancestrales. En este período del CAFTA, la empresa

estadounidense Monsanto se ha apropiado de 900 puntos de distribución en la región centroamericana, al comprar la empresa de semillas Cristiani Burkard, favoreciendo al desarrollo monopolista del mercado de las semillas a nivel mundial.

Bajo el CAFTA ahora la empresa Monsanto también invierte en zonas pilotos a través del Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (CENTA) para introducir las semillas transgénicas legalmente al país, tal es el caso de Armenia, Nahuizalco, donde ya tienen los permisos ambientales del Ministerio del Ambiente para experimentar los suelos con estas semillas.

El CAFTA esta generando la vulneración a la Constitución, cuando las leyes bajo el TLC obligan desde el momento que ella queda sometida al marco jurídico de esté, obligando al país a someterse a lo que las empresas transnacionales impongan para garantizar sus inversiones, tal es el caso de las empresas transnacionales como Pacific Rin, que ha amenazado con iniciar este 9 de marzo, un proceso de arbitraje internacional según las reglas y procedimientos del CAFTA. El seguimiento de este arbitraje estaria bajo las disposiciones de la "Convention on the Settlement of Investment Disputes Between States and Nationals of Other States and under the Rules of Procedure for Arbitration Proceedings of the International Centre for Settlement of Investment Disputes ("ICSID"), es una organización afiliada del Banco Mundial, impulsor de la mineria en el mundo y sus oficinas centrales están en Washington, D.C.

El capítulo laboral del CAFTA en su totalidad, carece de enfoque de género y no hace alusión alguna acerca de la igualdad entre remuneración y contratación cuantitativa y cualitativa entre hombres y mujeres, constituyéndose además, en un retroceso de los logros laborales de tantos años de luchas de las y los trabajadores, a través de los nuevos mecanismos de flexibilidad laboral que se están aplicando en el país. Este tratado al contrario, posibilita el marco legal para el avance de los procesos de privatización de los servicios básicos y el incremento de los precios indiscriminado de estos, lo que, ante la imposibilidad de pagarlos, obliga a que las mujeres incurran en una sobrecarga del trabajo no remunerado, traducido entre otras cosas, en el cuido de los enfermos, el cuido de las personas mayores jubiladas y más horas destinadas a la recolección y acarreo del agua necesaria para las labores del hogar y su consumo.

Ante todo lo expuesto, sirva la presente para manifestar nuestra preocupación por el futuro que depara para las grandes mayorías, que a lo largo de casi dos décadas de políticas de corte neoliberal; han vivido en carne propia los efectos derivados de la lógica mercantilista que resguarda estas injustas medidas, las cuales han estado orientadas hacia la consolidación de un modelo económico voraz, concentrador y excluyente, que ha deteriorado progresivamente las calidad de vida de todos/as los/as salvadoreños/as por lo que hoy más que nunca, se vuelve urgente que se instaure un nuevo modelo basado en la justicia social.

Por tanto:

Retomando la actitud unilateral del presidente Barak Obama de revisar el tratado, especialmente lo que concierne a la parte laboral y ambiental desde el punto de vista de los intereses de los Estados Unidos, DEMANDAMOS a los futuros Legisladores y al nuevo gobierno:

Revisar seriamente los Tratados Comerciales ya ratificados en función de los intereses del pueblo salvadoreño

Detener la negociación inconsulta de un nuevo tratado con la Unión Europea y

Revertir las políticas neoliberales que sustentan las negociaciones de estos Tratados.

Así mismo, invitamos a las familias salvadoreñas a manifestarnos y luchar de forma activa y constante en contra de los Tratados de Libre Comercio y demás políticas neoliberales.

Red Regional de Monitoreo del CAFTA DR
Capítulo El Salvador

Mesoamericanas en Resistencia por una vida Digna – Capítulo El Salvador, Fuerza Estudiantil Salvadoreña “Dr. Jorge Arias Gómez” (FES), Red de Acción Ciudadana Frente al Libre Comercio (Sinti Techan), Asociación Solidaria de Economía Alternativa (ASEAL).