ACTA DE LA SESIÓN PLENARIA N.º 073

LUNES 08 DE OCTUBRE DE 2007

EL VICEPRESIDENTE JOSÉ ÁNGEL OCAMPO BOLAÑOS:

Gracias, señor Diputado.

En el uso de la palabra el diputado Merino del Río, por diez minutos.

DIPUTADO JOSÉ MERINO DEL RÍO:

Gracias, señor Presidente.

Pueblo de Costa Rica, los que estén siguiendo esta sesión, como ciudadano y como diputado, me siento orgulloso de pertenecer a esta patria y, especialmente, en estos días, de haber sido un miembro activo del Movimiento Patriótico de Lucha contra el Tratado de libre comercio.

No se sientan ninguno de ustedes derrotados. No se sientan ninguno de ustedes tristes. Hemos dado una lucha patriótica ejemplar, enfrentándonos al poder del dinero, enfrentándonos al poder del chantaje y de la calumnia. Enfrentándonos a la política del miedo, a la política de la mentira permanente, de la descalificación de nuestros dirigentes, del insulto personal de lo más traicionero y vil que yo he visto en toda la historia democrática en la vida de Costa Rica, como en su momento iremos demostrando paso a paso.

No se sientan derrotados, al contrario, siéntanse victoriosos de haber participado en esta gesta cívica, en esta gesta democrática que indefectiblemente estará llamada a transformar el rostro de Costa Rica.

La lucha continúa, la lucha por la justicia social continúa. La lucha contra la corrupción y contra los corruptos continúa. La lucha por la construcción de una Costa Rica inclusiva, de una Costa Rica más próspera, más democrática, de una Costa Rica más soberana, no tiene fin para nosotros, para los que tenemos un corazón donde palpita la justicia social y el compromiso con esta patria, permanentemente, más allá de cualquier tipo de coyuntura.

Hemos enfrentado una lucha tremendamente desigual, una lucha donde hay fuerzas en este país que prostituyeron el referéndum, desde el momento que permitieron que fuerzas del capital sin ningún control y desmesuradamente, impidieran un ejercicio democrático equilibrado y recto de las tendencias en pugna, como lo dicta cualquier argumento democrático de un referéndum equitativo.

El Gobierno intervino abusivamente en este referéndum. El Gobierno se brincó la ley, más allá de lo que era la libre opinión sobre las posiciones en pugna. El Gobierno ofreció a los ciudadanos lo que no es suyo. Utilizó el presupuesto público para ofrecer promesas y promesas; chantajes de no dar a la gente necesitada, a los pobres, de no darles vivienda o de no darles becas, etcétera, etcétera.

A pesar de eso, el referéndum es una conquista democrática. A pesar de eso Costa Rica es un ejemplo en el mundo y en Latinoamérica, porque hemos logrado que a pesar de todas esas barreras fuimos a una consulta popular, fuimos a una consulta popular producto de una larga y lúcida, pacífica resistencia cívica. Así que no se sientan ustedes defraudados, amigos y amigas, compatriotas todos.

Hemos abierto una nueva esperanza en Costa Rica. No ha recibido nadie aquí un cheque en blanco para hacer lo que le dé la gana, habrá que hablar entre todos y todas, qué tipo de Costa Rica queremos construir. Con el diálogo, con el respeto, con puentes tendidos pero contando siempre con la opinión de los diversos sectores populares.

Yo saludo, fundamentalmente, a la juventud de mi patria, a esos jóvenes que se estrenaron en la lucha democrática en este referéndum, que lo dieron todo con un corazón vibrante y honesto. Que a veces no supieron cómo enfrentarse a toda esa avalancha del dinero, a toda esa avalancha del poder mediático, que blasonan de demócratas y ejercieron una dictadura mediática en este país como el grupo La Nación o el grupo Repretel, que es una vergüenza, una vergüenza para nuestra democracia cómo enfrentaron este proceso del referéndum.

Estas son verdades, porque la verdad nos hará libres y la verdad nos hará posible construir un país mejor para todos y para todas. Nosotros hemos luchado y seguiremos luchando por una Costa Rica en la que quepamos todos y todas, naturaleza incluida. No queremos arruinar a nadie en este país, pero no queremos que nadie siga lucrando sobre la base del crecimiento de la desigualdad social, de la pobreza, de la corrupción y de esa largas vergüenzas que manchan la historia republicana de nuestro país.

Yo estoy muy satisfecho. Personalmente he sido, incluso, calumniado, pero esos setecientos cincuenta mil compatriotas, y mucha gente del sí, saben quién es José Merino. Saben que José Merino lo que nunca ha hecho en este país ha sido robar, que lo que nunca ha hecho en este país ha sido traicionar, que lo que nunca ha hecho en este país ha sido mentir, eso lo saben esas setecientas cincuenta mil personas del Movimiento Patriótico del \"NO\" y muchas personas del sí, y es lo que me llena a mí de satisfacción, de honor y de orgullo.

Adelante, compañeras y compañeros de lucha, saludo a todo el pueblo de Costa Rica. Saludo todos los votos honestos que se depositaron en las urnas, sean del \"sí\" o sean del \"no\", pero, obviamente, tengo que decir que hay que hacer también ejercicio de memoria, lo tendremos que hacer. No ha acabado esto. Hay un voto en las urnas que tengo que respetar, pero no tengo por qué compartir las lecturas interesadas y torcidas que se hagan de ese voto en las urnas.

Seguiremos oponiéndonos, con los instrumentos que nos da la democracia, a la agenda de implementación, seguiremos oponiéndonos. Igual que ustedes anunciaron que independientemente del resultado del referéndum seguirían adelante con las leyes de implementación, yo también lo anuncié aquí, y fuera de aquí, que me opondré con métodos democráticos, con ideas, con argumentos a aquello que considere negativo para las mayorías sociales de este país y para la soberanía nacional. El mal no se conculca a no ser que se combata con las ideas, con las convicciones, con los argumentos, con la honradez.

Me siento orgulloso como costarricense de que este país haya estado y siga estando bajo las miradas del mundo. Hay una fortaleza democrática que nace de lo más hondo, que hunde sus raíces en una historia republicana de mucho sacrificio, de muchas generaciones, de mucha gente que se entregó en cuerpo y alma por hacer más grande a este pequeño país ubicado en esta delgada cintura de Nuestra América.

Me siento orgulloso, me siento acompañado, quiero que ustedes, compatriotas, se sientan también acompañados. Aquí nunca habrá lugar para la traición, aquí nunca habrá lugar para inclinar la cerviz ante las presiones y las amenazas, aquí estarán siempre abiertas las puertas para la esperanza, abiertas las puertas jóvenes de mi patria, para los sueños que ustedes tienen derecho a construir. No les quepa duda que los iremos construyendo con paciencia, tenacidad y coraje, lucidez, nutrirse de la inteligencia, del conocimiento acumulado, acompáñense, no se sientan solos, no se sientan derrotados, siéntanse jóvenes que orgullosamente levantaron la bandera tricolor, porque creían y siguen creyendo que Costa Rica será más justa el día que sea más independiente, más soberana y no sometida a esos últimos chantajes vergonzosos a que nos sometió una administración Bush desprestigiada, no solamente en su propio país, sino en casi todo el planeta democrático que conocemos.