Un nuevo momento para el movimiento de mujeres
Representantes de diversas redes y movimientos de mujeres de la región, participantes en el V Encuentro Hemisférico de Movimientos Sociales contra el ALCA y el Libre Comercio, que se celebra en La Habana, del 12 al 15 de abril, debatieron en torno a los elementos políticos que las unen, las realidades que motivan sus luchas, así como las acciones a promover en el actual escenario latinoamericano teniendo en cuenta las particularidades de los contextos nacionales.
Las intervenciones de Rosa Guillén del Comité Internacional de la Marcha Mundial de Mujeres, de Tamara Columbie de la Marcha Mundial de Mujeres de Cuba e Irene León, de ALAI animaron el debate que se produjo en los marcos de este Encuentro.
Rosa Guillén en su intervención puntualizó los temas que afectan a las mujeres con la entrada del “libre” comercio, explicando como la organización económica derivada de su implementación no sólo invisibiliza el trabajo de las mujeres sino que lo recarga y en consecuencia mercantiliza el trabajo y sus cuerpos . Ante esto se hizo imprescindible la organización de la lucha y la discusión en torno de los proyectos de la OMC y del ALCA. Las organizaciones de mujeres se proponen acciones que tengan impacto político en el sistema social, de ahí que los temas fundamentales de esta lucha se concentran en el “libre” comercio, la militarización, la integración de los pueblos, la cultura y la diversidad y las políticas públicas y sociales.
Tamara Columbié por su parte, explicó como desde los primeros momentos de esta lucha contra el ALCA y demás planes de reforzamiento de la dominación imperialista, diversas organizaciones cubanas, tales como la Federación de Mujeres Cubanas, el Centro Martin Luther King, el Grupo de América Latina del Instituto de Filosofía (GALFISA) y la Asociación para la Unidad de Nuestra América (AUNA), han participado como parte de la Marcha Mundial de Mujeres, en diversas acciones de protesta y espacios de reflexión sobre las consecuencias de estas políticas para la vida de las mujeres.
Irene León destacó que las luchas feministas han sido contra el capitalismo y el patriarcado y considera que hay un nuevo momento para el movimiento de mujeres como constructoras de propuestas nacionales y para la humanidad. El movimiento feminista global está planteando importantes cuestiones que atañen a al humanidad toda como es la lucha contra la pobreza y la violencia generada por las presencias militares en zonas estratégicas del planeta pues millones de mujeres alrededor de las bases militares están siendo esclavizadas en lo económico, en los servicios y en lo sexual.
Como resultado de estas intervenciones se realizó un debate sobre las formas de articulación más efectivas para articular la lucha de las diversas organizaciones de mujeres y de estas con el resto del movimiento social. Se resaltó que nos une una crítica al sistema capitalista y a la cultura patriarcal y que son necesarias transformaciones globales para que tengamos una sociedad justa que respete la diversidad y excluya toda forma de discriminación. El movimiento de mujeres rescata el valor de trabajar los temas de globalización neoliberal, pobreza, violencia desde la cotidianidad y señala que el movimiento social debe romper con las dicotomías tradicionales entre lo público y lo privado y trabajar con una visión más integral de lo político que debe construirse desde los valores, los deseos, las identidades, es decir, desde la subjetividad.
El movimiento social continental debe lograr no sólo identificar la agenda que nos resulta común (lucha contra el neoliberalismo) sino además integrar las diversas agendas nacionales y sectoriales como espacios reconocidos también de lucha de todos y todas.
Hay que pensar en movimientos horizontales con múltiples liderazgos que asuman la comunicación como eje estratégico, que incluyan además la formación política no sólo para la emergencia de nuevos liderazgos sino para la concientización de amplios sectores populares.
Algunos temas que se proponen en lo inmediato son: la lucha contra la violencia en sus múltiples dimensiones, la lucha contra los diferentes proyectos de “libre” comercio, la lucha contra la migración, tráfico y trata de personas, el rol de las trasnacionales en el fortalecimiento del sistema neoliberal como por ejemplo mediante las maquilas.
Se resaltó por último la importancia de mantener las cortes de mujeres no sólo como espacio de denuncia de la violencia sino su rol activo en la campaña y luchas contra el ALCA y el neoliberalismo.