El imperialismo constituye un sistema de poder mundial que funciona para garantizar la acumulación creciente de capital para las empresas multinacionales y para los principales países imperiales, como Estados Unidos. El imperialismo como sistema es sostenido y desarrollado por la mismas empresas multinacionales, por Estados imperiales (como Estados Unidos, Inglaterra y otros), por organismos políticos (como la OEA, la ONU), financieros (como el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, el Banco Interamericano de Desarrollo), militares (OTÁN en Europa y por ejércitos serviles y entreguistas como el guatemalteco), mediáticos (como CNN, Fox News, entre otros) y por los Estados y gobiernos serviles como el guatemalteco. Todos estos organismos funcionan para sostener un régimen de poder mundial que presenta como su mayor potencia a Estados Unidos.

La implementación de las políticas imperialistas en nuestro país, han tenido como principal ejecutor al gobierno de los Estados Unidos. Desde hechos históricos tan funestos como el financiamiento y conducción de la invasión y contrarrevolución en 1954 --con la complicidad de la oligarquía, el ejército y la iglesia católica-- hasta la ocupación militar que desde 1998 mantiene con la venia de los gobiernos cómplices del PAN, FRG y GANA y del Congreso de la República quienes han aprobado tanto el Plan Maya Jaguar como el Programa Nuevos Horizontes. Con estos planes el ejército yanqui e invasor ha instalado e incrementado su ocupación militar en el país, con los objetivos de asegurarse recursos naturales que le resultan estratégicos para garantizar su poderío militar y su provisión de fuentes energéticas y materias primas, así como para crear un eje militar de contención ante la posible rebelión en México y la rebelión antiimperialista que se extiende desde el Cono Sur.

Adicionalmente ha desarrollado acciones de inteligencia e intervención a través de la DEA, la CIA, la AID y su Embajada. Sus imposiciones han tenido la complicidad servil de la burguesía local y los gobiernos del mal llamado periodo democrático, quienes han aceptado de rodillas sus políticas a costa de los intereses del pueblo y del país en su conjunto. Así fue como entregaron el país a través del TLC.

Esta ocupación militar y los intereses que oculta, vulneran la soberanía nacional y convierten al país en una colonia sujeta a la estrategia fascista de Estados Unidos, un Estado que constituye el principal instrumento del capital mundial, el principal actor del terrorismo del mundo, el máximo violador de Derechos Humanos y el más dictatorial a través de sus políticas militares, económicas, financieras, comerciales (con el TLC y el ALCA) y políticas.

A lo largo de más de más de un siglo, Estados Unidos ha profundizado la expoliación y opresión de nuestro Pueblo y ha impedido que los guatemaltecos podamos dirigir nuestro propio destino. En este marco, BUSH constituye la persona que encabeza el mayor imperio que la humanidad haya conocido, el más terrorista y sanguinario, cuya política de invadir y ocupar territorios, entre ellos el nuestro, ha tenido como propósitos apropiarse de los recursos naturales y los mercados nacionales y posicionarse militarmente para ir extendiendo sus garras sobre el mundo entero. En ese camino ha cometido actos de genocidio y etnocidio, matando niños, ancianos, mujeres y hombres.

Por estas razones, nos sumamos al repudio del pueblo guatemalteco a la presencia de BUSH en Guatemala. Pero además manifestamos nuestro rechazo a las políticas imperialistas que viene a imponer y a la actitud servil y entreguista del gobierno y la burguesía guatemalteca. Nuestro rechazo es a toda práctica que nos convierte en un país ocupado y dependiente.

BUSH FUERA DE GUATEMALA

VIVA EL PUEBLO GUATEMALTECO
VIVA LA LUCHA ANTIIMPERIALISTA
VIVA LA LUCHA POR LA INDEPENDENCIA NACIONAL

ESCUELA DE FORMACIÓN POLÍTICA
ALFONSO BAUER PAIZ Y CARLOS PAZ TEJADA

Guatemala, marzo de 2007.