La Red Mexicana de Acción frente al Libre Comercio (RMALC), organización no partidista y plural, conformada por organismos sociales y civiles de todos los sectores de nuestra sociedad, se suma a la necesidad de una transformación integral, profunda y desde sus raíces, de nuestro país, y con ello para que la Convención Nacional Democrática llame a la conformación de un Constituyente que formule una nueva constitución como expresión de un re-diseño radical del Estado y del pacto social, que exprese los intereses y aspiraciones de la mayoría pobre y marginalizada de nuestro querido país.

El reciente proceso electoral mostró contundentemente los límites de las actuales instituciones; hay que crear otras desde abajo que se expresen en una nueva Constitución. Nos pronunciamos para que la Convención no sólo convoque a la conformación de un constituyente, sino a un camino para ir construyendo ese nuevo país que soñamos y que quedaría plasmado en una nueva constitución, nuevas instituciones y nuevo proyecto de país.

Consideramos que el reto más importante de la etapa es que el movimiento propicie un salto de calidad y adquiera una organización mínima y flexible que le permita aumentar su fuerza y perdurar en el tiempo, sin perder su carácter esencial de movimiento amplio. Es decir, proponemos que la Convención discuta no sólo los objetivos, sino las estrategias y las formas organizativas.

Proponemos que el camino o estrategia básica sea un llamado a la conformación de comités o asambleas unitarias en todos los pueblos, ejidos, colonias, barrios, fábricas, escuelas, etc. La organización del pueblo no empieza con el reciente proceso electoral, es necesario retomar lo ya avanzado y aprovechar el capital social previamente organizado.

Sabemos que no todas las organizaciones sociales existentes son democráticas y representativas, que es necesario también renovarlas pero no por ello podemos desconocer su existencia y experiencia. Para irlas renovando y que sean las bases las grandes protagonistas, proponemos que en esos comités o asambleas unitarias las decisiones no se tomen por voto de las organizaciones, sino directamente por las bases. La propuesta organizativa es para su discusión en la convención.

En todo caso, el punto esencial de nuestra postura es que la Convención debe buscar la forma de darle al movimiento de resistencia una mínima estructura democrática y de participación amplia desde abajo, buscando a su vez reconocer y hacer jugar la experiencia y capital social de las organizaciones comunitarias y sectoriales democráticas y antineoliberales.

Estos eventuales comités o asambleas desperdigados por todo lo ancho y largo del país podrían tener tres campos de tareas: 1) Organizar la resistencia a las medidas anti-populares que puedan surgir del gobierno panista. 2) Disputar desde lo local las políticas públicas y sectoriales. 3) Discutir un proceso para construir los consensos hacia la nueva Constitución.

Los temas para la lucha inmediata y para el nuevo proyecto nacional que la RMALC propone discutir en la asamblea y en los que pone al servicio del movimiento su experiencia y elaboración acumulada son los siguientes:

a) Renegociación o derogación de los TLC’s, especialmente el TLCAN. En lo inmediato el movimiento debe impedir la apertura total del sector agrícola que está prevista en el TLCAN para el 2008

b) Suspender toda negociación de la Alianza para la Seguridad y Prosperidad de América del Norte (ASPAN) y cancelación de los acuerdos ya tomados por el Presidente Fox en el marco de esta alianza.

c) Oposición a las pretensiones hegemónicas en las actuales negociaciones de la OMC.

d) Cancelar los mega proyectos del Plan Puebla Panamá que no cuentan con la aprobación explicita y plebiscitaria de las comunidades.

e) Re-orientar la prioridad de nuestras relaciones internacionales hacia el sur del continente

f) No al libre comercio, sí a una integración alternativa desde los pueblos

g) Reforma del Estado

h) Reforma Laboral y Productiva

La RMALC quiere sumar su experiencia y elaboración de propuestas en este momento decisivo y trascendental del país y por ello se une a la resistencia para la refundación radical del país y de sus instituciones.

RMALC/Prensa

Sergio Ramírez Zúñiga

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