Costa Rica: ¿Qué significa la quema simbólica de hoy?
La protesta nacional de hoy 25 de julio, contra la tiranía mediática encabezada por La Nación, es un acto que pretende denunciar la forma en que han venido manipulando la información, evadiendo el debate y la discusión amplia que merece un asunto tan serio como es el Tratado de Libre Comercio.
Es una protesta pacífica pero firme. Es una protesta contra la intolerancia y la limitación a la libertad de expresión. Es una protesta que pretende se abran espacios al debate.
La participación de los jóvenes en diversas partes del país, representa un reverdecer de luchas patrióticas del pasado, donde fueron ellos quienes detuvieron proyectos tan nocivos como el de Walker, Alcoa o el Combo. Representa un reverdecer que llena de entusiasmo y debe alegrarnos que en la lucha contra el TLC tantísimos jóvenes se hayan involucrado y salieran de la indiferencia para involucrarse en la lucha. En Chile y Francia lograron detener barbaridades, aquí también lo harán en su momento.
Es mejor que hoy quememos unas hojas del periódico La Nación en forma simbólica, a permitir que el pensamiento de columnistas como Julio Rodríguez y Jaime Gutiérrez Góngora sigan provocando y nos lleven a una confrontación sangrienta. (Ver abajo columna de uno de ellos: Para salvar al país de los ticos y cualquier columna "En vela" de JRodríguez)
Gandhi en la India quemó unos "pases" (documentos que los ingleses obligaban a los Indios a portar) como una forma de rebelión a lo que consideraba absurdo. Juan Santamaría, a instancias de don Juanito, quemó el mesón y así acabó con lo que habría sido una esclavitud duradera para Costa Rica
Hoy recogeremos muchos periódicos para la quema simbólica, pero sólo quemaremos unas hojas y los demás quedarán apilados para que los indigentes puedan recogerlos y llevarlos a reciclaje.
Hoy pediremos que se abra un debate nacional de ideas para que la Patria no vuelva a arder como en 1856. Hoy los que amamos la Patria y la soberanía haremos un llamado al debate, al diálogo a la discusión, que es precisamente lo que han eludido desde Oscar Arias hasta los que apoyan y negociaron el TLC con la complicidad de varios medios de comunicación.
Si callamos hoy, será para siempre.