Traducción de IREI – Ginebra
Carta del Ministro de Industria y Comercio de la India a los Miembros de OMC
Ministro
Industria & Comercio
India
D.O. No. 5/13/2005
3 de noviembre, 2005
Estimado …
Es con preocupación que escribo estas líneas. Queda apenas un mes para la Ministerial de Hong Kong, China, pero los verdaderos asuntos permanecen nebulosos o han sido empujados hacia el fondo.
Las negociaciones lanzadas en Doha y su elaboración a través de la Decisión del 1º de agosto 2004 (el “marco de julio”) han sido hechas para asegurar un resultado pro- desarrollo para los países en desarrollo y al mismo tiempo hacer el sistema internacional de comercio mas abierto y basado expresamente en reglas justas y equitativas. No es por accidente, sino por una intención acordada, que hemos llamado estas negociaciones la Ronda del Desarrollo” y no una “Ronda del Acceso a Mercado”. La OMC no es sólo sobre comercio libre y nuestro propósito debe ser asegurar el éxito en Hong Kong sin pretextos que evaden sus aspectos críticos - aspectos críticos que forman la base misma de una Ronda de Desarrollo – o en caso contrario, allá no habrá éxito.
Existen muchos canales complementarios y paralelos para lograr estos objetivos de desarrollo. Desafortunadamente, encontramos que las discusiones basadas en ciertas propuestas, incluyendo aquellas hechas recientemente por algunos Miembros, nos han conducido ha un solo canal de la tal llamada ambición, que es ambición solamente. Ambición significa distintas cosas para distintos países: para algunos significa acceso a mercado; para cuatro quintos de la humanidad significa desarrollo.
El desequilibrio en el sistema internacional de comercio permanece atrincherado. La Ronda Uruguay no ha roto las cadenas que atan las granjas familiares, los productores pequeños o marginales de bienes industriales y a los profesionales y proveedores de servicios en los países en desarrollo. No hay alguna reducción “real” en los subsidios agrícolas como resultado, mientras que un acceso a mercado “real” en productos de interés para los países en desarrollo continua impedido por “picos” y escalamientos arancelarios, aranceles específicos y barreras no arancelarias. Esta situación tiene como ejemplo la situación de los agricultores del algodón en los países en desarrollo, articulada del modo más elocuente en el mensaje de cuatro países africanos a los otros miembros de la OMC.
Manteniendo este contexto, déjenme comenzar con las negociaciones en Agricultura. El marco de julio es categórico cuando acuerda que la agricultura es de importancia crítica para el desarrollo económico de los países Miembros en desarrollo y deben tener la posibilidad de seguir políticas agrícolas que vayan en apoyo de sus objetivos de desarrollo, estrategias de reducción de pobreza, seguridad alimentaria e intereses de subsistencia.
Las posiciones de algunos miembros basadas en solicitudes de acceso a mercado “real” socava la necesidad de ese espacio para políticas para los países en desarrollo y nuestro acuerdo de hacer el trato especial y diferenciado parte integral de todos los aspectos en las negociaciones. Esas demandas impondrían una carga desproporcionada y alta a los países en desarrollo y busca reintroducir normas que fueron expresamente rechazadas tanto en el Mandato de Doha como en el marco de trabajo de julio. También nos distraen de la necesidad “real” de introducir un plano de juego parejo para los mismos países hacia los cuales está dirigido este intento extorsionador.
Debemos recordar que la reducción de aranceles no es la única precondición para el acceso a mercado. Para incrementar un acceso a mercado “real” es necesario que se eliminen los subsidios a la exportación, el apoyo doméstico y las barreras no arancelarias. Hasta que esas medidas distorsionantes continúen en uso, el recurso a los aranceles apropiados continuará siendo el instrumento primario para proteger agricultores vulnerables y faltos de recursos en los países en desarrollo. Los productos subsidiados son tanto, si no es más, un impedimento al acceso a mercado como los aranceles, porque los subsidios y los apoyos son aún más distorsionantes para el comercio.
India por medio de sus alianzas en el G20 y G33, ha dicho con énfasis que aún así esta dispuesta a la asunción de compromisos substanciales en acceso a mercado basados en aranceles consolidados, pero que no pongan en riesgo la subsistencia de sus grandes comunidades rurales vulnerables y pobres. India permanece comprometida con la oferta del G20 del 12 de octubre 2005, cuya premisa esta basada en compromisos proporcionalmente más bajos para los países en desarrollo que para los países desarrollados, una completa satisfacción sobre la efectividad y el contenido operacional de los productos especiales (EP) y el Mecanismo de Salvaguardia Especial (MSE) que permita a los países en desarrollo satisfacer sus necesidades en seguridad alimentaria, seguridad de subsistencia y desarrollo rural, sin restricción o limitación. Doy también la bienvenida a la propuesta de los Miembros ACP (Asia, Caribe y Pacífico) que han presentado una oferta generosa a pesar de sus conocidas limitaciones de capacidad.
En NAMA [acceso a mercado no agrícola] los compromisos requeridos a los Miembros de la OMC en su conjunto son claros como el cristal. Los países desarrollados deben asumir compromisos de reducción porcentual mas grande con el uso de la fórmula, mientras se dará a los países en desarrollo mayor flexibilidad para manejar sus asuntos sensibles. Estos no son trueques inter se. Un acuerdo sobre la cobertura de las flexibilidades en el párrafo 8 daría la necesaria claridad para acometer constructivamente la formula y el trato de las líneas de aranceles no consolidados.
La principal tarea delante de nosotros en NAMA es definir el nivel de ambición de los países desarrollados para reducir desde los aranceles consolidados. Notamos con preocupación algunas propuestas recientes que sugieren nuevas normas para medir la reducción desde los aranceles aplicados. Esto es totalmente extraño al mandato y puede sólo complicar las negociaciones. Una vez que el nivel de ambición se haya definido, podemos fijar los compromisos de reducción de los países en desarrollo a un nivel proporcionalmente más bajo, como fuera previsto en el acuerdo marco.
Toda fórmula suiza de un solo coeficiente para países desarrollados y en desarrollos invierte el trato especial y diferenciado y no es un punto de arranque. El acuerdo marco mismo milita contra esas propuestas. En términos simples, estas propuestas de autoservicio piden más que solo acceso a mercado “real” a los países en desarrollo. Por ejemplo, cuando la propuesta de la UE solicita una reducción de aranceles consolidados en un 77% de India, le significa una conveniente reducción de aranceles del 28% para la UE y de sólo un 24% para Estados Unidos. En contraste, la fórmula ABI busca reducciones equivalentes en porcentaje en los aranceles consolidados actuales para cada Miembro.
El progreso en la negociación de servicios es muy lento. El mercado de los servicios esta aún en evolución en los países en desarrollo y la arquitectura del AGCS [Acuerdo General sobre Comercio de Servicios] les otorga flexibilidad para asumir compromisos de acuerdo con sus habilidades y necesidades. Las propuestas basadas en metas cuantitativas o una - misma- talla- para- todos desconsideran sus habilidades y necesidades como también sus sensibilidades. En una ronda del desarrollo el camino debiera contener compromisos liberales en Modo 1 [comercio transfronterizo]y Modo 4 [movimiento de personas] por los países desarrollados. Estos son cruciales para darle el requerido contenido de desarrollo.
Los países en desarrollo son un reconocido depositario de conocimientos tradicionales a la que contribuye también su biodiversidad. Los conocimientos tradicionales de sus poblaciones indígenas han sido usados desde tiempo inmemorial, inter alia, para curar a bajo costo una cantidad de enfermedades. En un pasado reciente se han hecho intentos para mal apropiarse de estos conocimientos para obtener ganancia comercial, negando en el proceso el justo valor que debería ser reconocido a estas comunidades. Por ese motivo los países en desarrollo han buscado reformas en el acuerdo ADPIC [propiedad intelectual] para prevenir la bio-piratería de material biológico y prevenir la mal apropiación de los conocimientos tradicionales. Deben acordarse normas, por razones de justicia y equidad, que obliguen a revelar la fuente y el país de origen de los recursos biológicos y del conocimiento tradicional utilizados, además de requerir la obtención de un consentimiento informado previo y que los beneficios sean compartidos de manera justa y equitativa. El respeto a la propiedad intelectual de los individuos debe ser complementado por el respeto a la propiedad intelectual de las comunidades.
Necesitamos también asegurarnos de que las flexibilidades que se acordaron para llegar a la decisión de enfrentar los problemas de salud pública en agosto de 2003 sean observadas en letra y en espíritu, para poder conseguir sus objetivos de desarrollo. Por ese motivo apoyamos una enmienda en el acuerdo ADPIC para aplicar estas flexibilidades.
En las negociaciones sobre comercio & ambiente, reglas y facilitación del comercio, también debemos ocuparnos de las necesidades e intereses de los países en desarrollo.
Los países en desarrollo han presentado varias propuestas constructivas sobre asuntos de desarrollo e implementación que son para ellos de importancia considerable. Antes de Hong Kong debe haber un progreso substancial en estos temas. Es importante que acordemos un paquete sobre trato especial y diferenciado para los países menos desarrollados, especialmente un acceso libre de aranceles y cuotas para sus exportaciones hacia los mercados de los países desarrollados. Debe haber progreso en el programa de trabajo para las pequeñas economías de acuerdo con el Mandato de Doha y ocuparse del problema de la erosión de preferencias.
Quiero advertir sobre cualquier intento de rescribir el propio Mandato de Doha y de desbaratar la estructura básica del GATT/OMC con la creación de una nueva categoría de Miembros de la OMC llamada “países en desarrollo avanzados”. Ante todo, esto sería divisivo y podría bien tener el efecto de desencarrilar las negociaciones en su totalidad.
Los plazos son importantes, pero más importante que ninguna otra cosa es tener un plazo para lograr el desarrollo. Un resultado equitativo y justo de la Ronda Doha, en Hong Kong y más adelante, debe entregar algo en la dimensión del desarrollo. India espera para trabajar constructivamente hacia este objetivo.
Con estima,
Suyo sinceramente,
KAMAL NATH