La ronda de Lima: Estados Unidos impone sus prioridades, marca el ritmo y los andinos ceden

2004-08-19 00:00:00

Agosto 19 de 2004

Los resultado de la ronda de Lima son aleccionadores. La
estrategia de Colombia ha sido conseguir "casi" todas las
preferencias comerciales que ya teníamos con el ATPDEA y a
cualquier precio. La estrategia norteamericana es otorgar
mucho menos de las preferencias del ATPDEA y lograr cambios
profundos en propiedad intelectual, inversión, compras
estatales y demás aspectos normativos.

Colombia quería negociar primero el acceso a mercados y por
eso ideó, con los demás países andinos, un enrevesado
cronograma de peticiones y ofertas. Estados Unidos quiere
definir los aspectos sustanciales por eso no cumplió el
cronograma y en consecuencia la tercera ronda culminó sin
que se estudiaran las peticiones y las ofertas, pero sí con
el comienzo del análisis de varios textos. Los andinos
elaboraron algunos a marchas forzadas, mientras los
norteamericanos los tienen desde el comienzo en la mesa.

Según los negociadores colombianos un gran logro fue colocar
textos andinos en las negociaciones y formular generalidades
sobre biodiversidad tema que no fue incluido en los textos
norteamericanos. EEUU ratificó por enésima vez sus
exigencias y entregó su listado de ofertas casi al terminar
la reunión y no presentó listado de peticiones pues pide
apertura total. Sus ofertas para abrir su mercado doméstico
plantean la desgravación del uno por ciento del comercio
agrícola y el 16, 7 del comercio industrial, mientras que
Colombia hizo una oferta mucho más amplia, revelando desde
donde está dispuesta a negociar y abriendo el camino para
que Estados Unidos exija más concesiones.

Voceros de los empresarios, que habían apoyado vehemente las
negociaciones para vender sus productos en el mercado
norteamericano, se mostraron decepcionados y señalaron que
en esas condiciones el tratado podía ser menos atractivo de
lo esperado e incluso Luis Carlos Villegas, presidente de la
Andi señaló que estas parcas ofertas podrían retrasar el
cronograma y Ricardo Villaveces, presidente de Asocaña
señaló que de continuar las cosas así, los países andinos
deberían "reconsiderar seriamente la opción de retirarse del
proceso". Comienza a surgir una tendencia que en medio de la
inferioridad estructural en la negociación y como forma de
mejorar el regateo, pide que se alarguen las negociaciones.

Ecuador y Perú, por su parte, se mostraron conformes con la
oferta estadounidense la cual no ofrece la desgravación
inmediata ni siquiera de los productos que hoy no pagan
aranceles con el ATPDEA. y colocó por ejemplo las rosas en
la canasta de desgravación a más de 10 años, cuando hoy se
venden sin aranceles en el mercado norteamericano. Exigió
garantías para exportarnos café procesado, reiteró la
exigencia de la privatización de las telecomunicaciones, la
eliminación de las franjas andinas de precios y propuso
exceptuar el ron, el café y el atún provenientes de Puerto
Rico. La realidad del cruce de ofertas arrojó, como era de
esperarse, un saldo en contra de Colombia, mientras que
Estados Unidos da poco y pide mucho, Colombia da mucho y
pide poco.

En el tema de propiedad intelectual EEUU sacó los dientes
decapitando a Carlos María Correa, negociador de propiedad
intelectual, y los andinos salieron despavoridos, se
dividieron y lo arrojaron a un inexistente cuarto de apoyo
técnico. Estados Unidos ofreció en compras estatales menos
de lo que otorgó a Chile y a Centroamérica.

Los andinos se sentaron habiendo concedido una desgravación
total en máximo 10 años, corriendo a ver cual hace más
concesiones e incluso con un Toledo, de Perú, quiere que el
tratado se firme en noviembre y después de la ronda
informaron que se harían no nueve sino siete rondas de
negociación. Se sentaron con la decisión de negociar por
separado aspectos cruciales y mostrando todas sus débiles
cartas.

En Colombia se neutralizó la protesta de algunos mandatarios
regionales, enviando representantes de varios departamentos
al "cuarto de al lado" y se les prometió la redención por
medio de una "agenda interna" que consiste básicamente en
una adecuación de la infraestructura al flujo de
importaciones y que está cocinando el DNP con los recursos
que le extraen al pueblo del aumento del IVA, la reforma a
las pensiones y el endeudamiento.

El resultado no podía ser peor. El parte de victoria del
ministro Botero se redujo a afirmar que se habían conseguido
recursos para hacer propaganda al TLC en las regiones; el
representante de las Pyme, Juan Alfredo Pinto habló de que
se brindó una atención especial a estas empresas y que se
propuso la creación de un fondo de capital de riesgo con 10
millones de dólares de los Estados Unidos y que se logró que
se hiciera una mesa aparte para estudiar como les iría a las
pequeñas industrias con el tratado. Hernando José Gómez
señaló como éxitos además un proyecto para la modernización
del mercado de capitales.

El gobierno norteamericano aprieta y los andinos ceden. El
mecanismo de ofertas y peticiones, que fue presentado como
una genialidad andina para poner a Estados Unidos a la
defensiva no aguantó el poderío norteamericano. El ritmo,
los temas, las prioridades, las excepciones son determinados
por Estados Unidos. El aparente forcejeo está conduciendo a
un desenlace previsible. Se cederá en todos los aspectos
normativos y se presentarán los magros resultados en materia
de exportaciones como una resonante victoria. Aspectos
cruciales de la negociación siguen siendo secretos y no se
sabe hasta donde los andinos están dispuestos a ceder. La
sociedad civil sigue al margen y las reuniones informativas
que ocasionalmente cita el ministerio, en las cuales informa
generalidades, son utilizadas para aparentar una inexistente
consulta a los ciudadanos.

Todos estos acontecimientos revelan la inconveniencia de la
firma del tratado, la debilidad andina en la negociación, la
arrogancia norteamericana y la ausencia de un debate
realmente serio sobre este proyecto. Exigimos que los
negociadores colombianos se levanten de la mesa y no sometan
al país a el escarnio y la humillación.

Página web: www.recalca.org.co