México: Los abusos de los cuerpos de seguridad en las manifestaciones deben ser investigados
Declaración pública
Índice de AI: AMR 41/023/2004 (Público) Numero del
Servicio de Noticias: 144 8 de junio de 2004
Amnistía Internacional expresa su preocupación por la
actuación de las fuerzas de seguridad involucradas en los
acontecimientos que tuvieron lugar en Guadalajara el 28
de mayo con motivo de la Cumbre entre los Estados de la
Unión Europea y de Latinoamérica celebrada en esa ciudad.
Según la información recibida por Amnistía Internacional,
a pesar de registrarse actos violentos por parte de
algunos de los manifestantes el día 28, la respuesta
policial,con la detención de al menos 111
personas,desembocó en graves abusos a los derechos
humanos, incluyendo violaciones a la integridad física y
mental de los detenidos.
Cuando se cumple más de una semana de los hechos, al
menos 40 personas siguen detenidas y procesadas en
relación con los disturbios. Los otros 70 detenidos ya
quedaron en libertad. Sin embargo, las denunciasy
testimonios de muchas de las personas que fueron
detenidas parecen confirmar el uso de detenciones
arbitrarias, la incomunicación y maltrato o tortura en
las primeras horas después de los arrestos.
La Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco
(CEDHJ) ha logrado entrevistar a muchos detenidos para
recopilar datos sobre los abusos. Ahora es imprescindible
que se garantice el derecho al debido proceso y la
integridad física y mental de los detenidos y que se
investigue a fondo el operativo policial que reprimió y
detuvo a varios manifestantes, así como la identificación
y sanción de los responsables de los abusos.Además las
autoridades deben hacer público el nombre de las personas
detenidas y los delitos de los que se les acusa.
Las autoridades mexicanas han anunciado en varias
ocasiones que el Estado de Derecho ya reina en México.
Por lo tanto es urgente que no se permita la impunidad
por estas violaciones y que se garantice que los cuerpos
policiales actúen siempre dentro del marco de la ley para
mantener el orden público.