El Salvador: Ante las negociaciones del TLC CA-EU
Ante la finalización de las "Negociaciones" del Tratado de "Libre
Comercio" entre Centroamérica y Estados Unidos
Pronunciamiento de la Red Sinti Techan
El desenlace de la IX Ronda de Negociación del TLC CA-EU recién
finalizada en Washington, constituye una crónica anunciada por la
Red Sinti Techán desde diciembre del 2002 –antes de que iniciaran
oficialmente las "negociaciones"-. Los resultados confirman que más
que un proceso de "negociación" ha habido una imposición del TLC por
parte de Estados Unidos, pues sus principios, su lógica y su texto
ni siquiera fueron discutidos en las numerosas reuniones llevadas a
cabo. A casi un año de conversaciones se finaliza con un TLC CA-EU
que será la fiel copia de los contenidos del resto de TLC.
La última Ronda del TLC CA-EU se concentró en los temas definidos
por los gobiernos como "sensibles", aquéllos en los cuales no
pudieron lograr un acuerdo previo y que "curiosamente" están
relacionados con el comercio de bienes, principalmente de productos
que continuarán protegidos por Estados Unidos con altos aranceles,
subsidios o barreras no arancelarias. Los aspectos sustantivos del
Tratado, que están relacionados con los servicios públicos, las
inversiones, los derechos de propiedad intelectual, las políticas de
competencia y las compras gubernamentales, fueron evacuados con
antelación, tal cual fueron propuestos por Washington, pues ya
estaban definidos desde antes de arrancar la carrera del TLC CA-EU
en San José, Costa Rica.
Como lo hemos expresado reiteradas veces, ha sido el componente
comercial del TLC el único que estuvo sujeto de "negociación", pues
el resto –que es lo fundamental del Tratado-- fue impuesto desde el
inicio y no admitió el mínimo cambio por parte de Estados Unidos.
Pese a que "formalmente" se podía negociar "algo" en materia
comercial, Estados Unidos impuso sus condiciones en la negociación –
negándose a modificar subsidios, barreras no arancelarias y
exclusiones--; además, en este ámbito los resultados para El
Salvador han sido claramente desfavorables dadas las condiciones
desventajosas y las grandes asimetrías.
La masiva propaganda gubernamental pretende presentar al TLC como un
instrumento técnico, neutro y aséptico, que beneficiará a toda la
población salvadoreña; cuando se trata de un instrumento político,
que ha sido utilizado para favorecer intereses particulares de
personas y empresas, incluyendo ministros del gobierno. Hemos
reiterado que el TLC genera ganadores y perdedores: el sacrificio de
los sectores más vulnerables y con menor capacidad de imponer sus
intereses al gobierno es ahora tangible con los resultados de las
"negociaciones"; por ejemplo los productores de granos básicos y los
porcinocultores, sectores sociales como consumidores y trabajadores,
y nuestro medio ambiente.
Por otro lado, a pesar que durante el 2003 se desarrollaron centenas
de reuniones entre gobiernos y las cúpulas de las gremiales
empresariales para "ponerse de acuerdo" y llevar una posición
conjunta, las "negociaciones" siempre tuvieron carácter bilateral, y
el Tratado no aplica entre los países de Centroamérica; muestra de
ello es la rapiña de los gobiernos centroamericanos al finalizar la
IX Ronda, disputándose los restos de la presa que Estados Unidos
tomó para sí desde el inicio, allí nunca hubo un espíritu
"integracionista". Se trató de una lucha en la que cada gobierno
buscaba ceder o entregar más de su economía a cambio de los pocos
restos que quedaron para la disputa centroamericana.
Con la "imposición del TLC" se hace más evidencia la ceguera de los
gobiernos centroamericanos, y en particular el salvadoreño, que en
lugar de consolidar la integración regional y fortalecer acciones
concertadas entre países hermanos para negociar desde una posición
más firme y conveniente, se abandonan al bilateralismo desde la
mayor de las obsecuencias.
Reiteramos que las instituciones y organizaciones sociales miembras
de la Red Sinti Techan valoramos la importancia que el comercio
internacional puede tener en el crecimiento de los países, siempre y
cuando la inserción de las economías sea definida desde los
intereses nacionales y a partir de las estrategias de desarrollo de
los pueblos; pero NO estamos de acuerdo con los TLC, pues su lógica
y contenidos riñen con los principios de sustentabilidad, reducción
de desigualdades, participación democrática y vulneran los proyectos
nacionales de desarrollo.
Enfatizamos el hecho que en el caso del TLC CA-EU, estamos frente a
un Tratado de Libre Comercio y no un Tratado Comercial. Los Tratados
Comerciales están referidos exclusivamente al comercio de mercancías
entre países, mientras que el TLC, además de abordar los aspectos
comerciales, incluye en un formato rígido –que no admite
modificaciones—otros temas que son determinantes en la vida de los
pueblos, como son: inversiones, servicios, propiedad intelectual,
políticas de competencia, energía, sector financiero, transporte
aéreo, compras gubernamentales, entre otros.
Finalmente, denunciamos la persistente actitud entreguista del
gobierno de El Salvador, quien nunca ha ponderado los intereses
nacionales; entrega todo en actitud sumisa hacia afuera y desafiante
e impositiva hacia adentro. Apelamos a la Asamblea Legislativa o
Congresos a que ejerza su autoridad en beneficio de nuestro pueblo y
no ratifique el tratado en mención. Además manifestamos que no es la
moratoria ni siquiera reformar el TLC la alternativa. Hay que
rechazar el TLC. La alternativa es la integración construida desde
abajo con la definición activa de los pueblos.
Ante lo anteriormente planteado, MANIFESTAMOS:
– A los diputados y diputadas de todos los partidos representados
en la Asamblea Legislativa NO votar por la ratificación del TLC
CA-EU.
– Al pueblo salvadoreño le reiteramos que es fundamental
movilizarnos para detener la ratificación del TLC, hay que
estar alerta de algún "madrugón" -al que nos tienen
acostumbrados los partidos oficialistas— que pudiera conllevar
a la ratificación intempestiva del TLC CA-EU.
– Ejerzamos una de las modalidades de nuestro poder ciudadano.
Votemos contra el TLC; en las elecciones venideras castiguemos
a los partidos políticos que favorecen la ratificación del TLC.
NO ES NO: NO A LA RATIFICACION DEL TLC CA-EU.
SI A LA INTEGRACIÓN DE LOS PUEBLOS
¡OTRO EL SALVADOR ES POSIBLE¡
RED SINTI TECHAN, integrante de la ALIANZA SOCIAL CONTINENTAL.
San Salvador, 18 de Diciembre de 2003.