Enfrentando la amenaza del EPA
Grupos de derechos humanos instan al gobierno a salirse del pacto comercial con la Unión Europea.
Organizaciones de desarrollo y derechos humanos haitianos están haciendo campaña contra la firma de un nuevo tratado comercial con la Unión Europea (UE) que dicen se convertirá en otro golpe contra la economía ya enferma del país.
Un Acuerdo de Asociación Económica (EPA) entre la UE y las 16 naciones caribeñas agrupadas en el CARIFORUM está programado para firmarse para fines de este año.
El gobierno de Haití está listo para firmar, pero las organizaciones haitianas, incluyendo las que representan a los campesinos agricultores, dicen que el acuerdo “que eliminará los aranceles sobre los bienes comerciados entre las naciones firmantes”, destruirá el sector agrícola del país que provee medios de vida para casi 2/3 de los 8 millones de habitantes.
Los y las activistas recalcan que la economía haitiana necesita más, y no menos protección.
La UE ha estado negociando estos acuerdos comerciales durante 5 años con grupos mayormente pertenecientes a ex colonias europeas en África, el Caribe y Asia. Los EPAs reemplazarían la estructura comercial existente, la Convención Cotonou, que vence el 31 de diciembre de este año. Los negociadores de la UE dicen que los acuerdos ayudarán a estos países a desarrollar sus economías (muchas de las cuales dependen de la exportación de materias primas básicas) y que ayudarán a fomentar los mercados regionales atrayendo inversiones extranjeras.
Pero una coalición formada recientemente por 9 organizaciones haitianas, Bare APE (Bloquear el EPA, en creol), está en desacuerdo. El 26 de septiembre, la coalición que incluye al movimiento campesino Tèt Kole, y la Plataforma por un Desarrollo Alternativo (PAPDA), lanzó una campaña de marchas, talleres y reuniones con entidades gubernamentales y organizaciones internacionales.
“Esta movilización le permitirá a varios sectores de nuestra nación continuar estudiando la mejor forma de lograr un desarrollo alternativo y sustentable, protegiendo los sectores vitales de la producción nacional e impidiendo a la Unión Europea hipotecar las posibilidades de desarrollo del país”, dijo la Coalición BARE EPA en una declaración el día anterior al lanzamiento de la campaña.
Uno de los principales impulsores de la campaña es Camille Chalmers, director de la Plataforma por un Desarrollo Alternativo (PAPDA). Señala el caso del arroz, la dieta básica de la mayoría de los haitianos, y dice que la reducción de los aranceles de protección al arroz importado y la falta de protección estatal para los productores en décadas recientes ya han cobrado sus víctimas.
Dijo que Haití era autosuficiente en materia de alimentación hasta 1972. “En 1985 produjimos 123.000 toneladas métricas de arroz, pero los últimos datos de 2006 indican que produjimos solamente 66.000 toneladas e importamos 342.000… Estamos en una situación escandalosa. Haití, el país más pobre del Continente Americano es uno de los 4 principales importadores de arroz de los Estados Unidos. Si esta tendencia continua vamos a ser testigos de la desaparición de la producción de arroz, y 120.000 personas quedarán desempleadas.”
Otro crítico del EPA propuesto, es Jean-Baptiste Charles, el director del programa de producción láctea de la organización Veterimed que ayuda a los campesinos a mejorar la producción. El programa de producción láctea de Veterimed ha revitalizado la producción de leche, pero Charles lamenta el hecho de que “teóricamente tenemos leche suficiente para proveer a la demanda nacional, sin embargo continuamos importando leche a un costo de alrededor de U$S 30 millones por año.”
Charles dice que su organización ve a los países industrializados subsidiando a sus productores y luego sus productos más baratos invaden los mercados de países como Haití. El resultado es que los productores haitianos se ven forzados fuera del negocio.
Mirando cuatro sectores básicos de la producción agropecuaria haitiana: caña de azúcar, arroz, pollos y huevos, estimamos que en los últimos años se han perdido 830.000 puestos de trabajo.
Chalmers dice que el impacto del EPA y la apertura total de la economía haitiana a importaciones extranjeras no va a golpear solamente al sector agrícola sino a todas las posibilidades de desarrollo del país.
“Los EPAs producirán múltiples golpes a las economías de países pobres como Haití. Afectarán gravemente al presupuesto pues la eliminación de aranceles a la importación reducirá la disponibilidad de recursos que necesita cada estado para financiar el desarrollo y los servicios públicos. Así se creará una mayor dependencia de las Instituciones Financieras Internacionales.”
Hasta hace poco el gobierno de Haití ha tenido poco interés en las negociaciones del EPA y delegaba en el organismo regional CARICOM (del cual es uno de los 15 miembros) las negociaciones en su nombre. En unas de las pocas declaraciones públicas sobre el proceso del EPA, a fines de abril en una reunión convocada por la Organización de Desarrollo Industrial de Naciones Unidas, el Ministro de Comercio e Industria, Maguy Durc, pareció aceptar el EPA declarando: “Ha llegado el momento para que nos pongamos a trabajar, para evaluar nuestras fortalezas y debilidades, y en particular aceptar la competencia de las empresas regionales y europeas, y especialmente los requisitos de compromisos recíprocos”.
Con el gobierno de Haití dependiente de créditos y subvenciones de las Instituciones Financieras Internacionales, otorgados con la condición de que el gobierno se abstenga de erigir barreras de protección comercial, parece poco probable que los activistas anti-EPA puedan detener el proceso.
Sin embargo, mientras el plazo propuesto para el 31 de diciembre se acerca, el fracaso de los negociadores comerciales europeos y caribeños en ponerse de acuerdo sobre varios temas de principios y de detalles, a pesar de los años que llevan las discusiones, ha ensombrecido al EPA. Los activistas haitianos esperan que se prolongue para tener más tiempo para presionar a su gobierno a que reconsidere las implicaciones del acuerdo.
Fuente: Latin America Press (LAP), producida por Noticias Aliadas – información independiente, de Latinoamérica y el Caribe para el mundo.