Resistencias a las bases militares en América Latina
“Cada día, catorce personas colombianas se mueren por causa del conflicto armado interno. Cada día más de 700 personas se desplazan forzadamente por razones de violencia política, expresó John Lindsay –Poland de la organización Fellowship of Reconciliation de América latina y el Caribe, durante la rueda de prensa que se realizó ayer 5, al inicio de la Conferencia Internacional No más bases militares extranjeras.
Agregó que en el transcurso de esta Conferencia Internacional unas “4.000 personas serán desplazadas de sus hogares, de sus tierras. Ahora mismo vemos cómo el gobierno colombiano facilita el trabajo sucio, el trabajo sangriento a los paramilitares”. Además el gobierno de “Estados Unidos continúa con la ayuda militar de 600 millones de dólares para capacitar a militares colombianos para enfrentar al propio pueblo colombiano”.
“Nosotros tenemos otra idea y esa idea es apoyar a la población desplazada que hoy mismo supera más de 3.7 millones de personas”. También el apoyo a la sociedad, que está busca una solución negociada al conflicto armado y también está plantea nuevas iniciativas. Ahí están los grupos de mujeres, de jóvenes, de indígenas, de afro-colombianos, de campesinos y pobladores para no apoyar ni la guerrilla, ni el ejército, ni los paramilitares.
La ecuatoriana Nieve Solórzano de INREDH señaló que la Base de Manta sirve geopolíticamente para continuar con el Plan Colombia y contrarrestar a la guerrilla colombiana, que se mantiene por más de cuarenta años. La abogada de INREDH recordó que el Convenio de la Base de Manta que se termina en el año 2009 es ilegal porque no fue aprobado por el Congreso Nacional en Pleno e ilegítimo porque no fue consultado al pueblo ecuatoriano.
La Base de Manta, que reemplaza a la Base de Panamá, por su posición estratégica, ejerce un mayor control de Latinoamérica y El Caribe. Nos hemos unido aquí las organizaciones internacionales y nacionales para decir ¡No a las Bases Militares Extranjeras!, por todas las violaciones a los derechos humanos y porque toda base militar extranjera sirve para el control de los recursos naturales como el petróleo, la minería, el agua; pero, también para controlar a los movimientos sociales.
Con el fin de establecer un vínculo entre las dos exposiciones anteriores, Andrés Thomas, señaló: “Aquí en Manta, la política hegemónica de Estados Unidos está imponiendo su poder, está imponiendo la militarización. Hace unos meses el comandante De Luca dijo: “la base de Manta esta ahí para apoyar el Plan Colombia”. Eso es una violación absoluta a la soberanía del pueblo ecuatoriano por que impone una guerra que esta aquí como un pueblo vecino y eso involucra al Ecuador a una guerra que no le pertenece.
La embajada de Estados Unidos solventa viajes a Manta para reporteros de cualquier medio, sobre las actividades de la Base y sobre los beneficios que tiene ésta, como los cursos de inglés para la población. “Bien sabemos que esto son sobornos para que el pueblo vea de manera positiva la presencia militar estadounidense” y de esta manera se ejerza presión desde adentro hacia el presidente Rafael Correa, por la posición que él tiene respecto a la base de Manta.
Agregó “estamos aquí para fortalecernos, para crear una solidaridad entre las luchas que han tenido éxitos como en Vieques Puerto Rico que sufrió 60 años de bombardeo por la marina de Guerra de EEUU”.
Lourdes Cervantes de la Organización de Solidaridad de los pueblos de África, Asia y América Latina (OSPPAL) de Cuba agradeció por el escenario de debate sobre el tema de las bases Militares en distintos países.
“La presencia de las bases militares imperialistas es una de las políticas hegemónicas de Estados Unidos, tiene que ser enfrentado por las luchas y resistencias de nuestros pueblos.”
Aclaró que la base militar norteamericana en Guantánamo en Cuba, una de las más antiguas bases militares del planeta, es ilegal. El uso de esta base se remonta a un tratado bilateral entre Cuba y Estados Unidos desde el año de 1903 cuando fue impuesta como un apéndice a la primera constitución de Cuba independiente, como consecuencia de la “Enmienda Platt” que fue aprobada e impuesta por el congreso norteamericano en 1901, para permitir la presencia militar estadounidense de manera indefinida en territorio cubano.
Solicitó la solidaridad internacional en la aspiración del pueblo cubano para que se recupere la soberanía sobre este territorio usurpado de manera ilegal, que ha generado daños económicos, de contaminación, y en su soberanía. Además añadió que para “escándalo de la humanidad entera, todos sabemos que Estados Unidos ha convertido a Guantánamo en un monstruoso centro de detención y tortura en esta supuesta cruzada contra el terrorismo internacional”.