Presidentes y
representantes de los 12 países de la Comunidad Sudamericana
de Naciones (CSN) definieron ayer un modelo de integración
regional que será base de estrategias concretas para llegar a
la meta de consolidar la igualdad al interior del bloque, que sea
solidario internamente y con presencia importante en el ámbito
internacional.

Tras meses de
preparación y dos días de la segunda Cumbre de la CSN,
los mandatarios de Bolivia, Brasil, Venezuela, Chile, Paraguay,
Uruguay, Perú y Guayana, el vicepresidente de Argentina,
Daniel Scioli, el de Ecuador, Carlos Serrano, la canciller de
Colombia, María Consuelo Araujo, y el embajador de Surinam,
Robby Ramlakhan, firmaron la Declaración de Cochabamba con lo
que concluyó la cita presidencial.

El encuentro
estuvo marcado por la coincidencia entre los Jefes de Estado de la
urgente necesidad de integrarse sólidamente, incluso superando
rencillas y malentendidos pasados.

La oportunidad
sirvió para que los presidentes de Venezuela y de Perú,
Hugo Chávez y Alan García, se dieran la mano tras meses
de ataques y este último también limó asperezas
con el electo mandatario de Ecuador, Rafael Correa, con quien incluso
regresó a su país.

Michelle
Bachelet y Evo Morales sostuvieron una reunión que reveló
avances sobre la discusión de una agenda común de 13
puntos, incluido el marítimo; y Bolivia y Brasil decidieron
retomar proyectos de inversión en el ámbito energético
tras la crisis de la nacionalización de los hidrocarburos.

El documento
suscrito por las 12 naciones destaca por el avance concreto de la
creación de una Comisión de Altos Funcionarios, que
tiene la misión de asegurar la implementación de las
decisiones presidenciales y que funcionará desde 2007 en Río
de Janeiro con el apoyo de una Secretaría pro tempore; y la
convocatoria a una Cumbre Energética de la CSN, el mismo año,
en Caracas, Venezuela.

La Comisión
establecerá grupos de trabajo en las diferentes áreas
de integración y deberá presentar sus primeras
conclusiones en un año en la próxima cumbre
presidencial que será cumplida en Cartagena, Colombia.

La firma de la
declaración fue precedida por la sesión de los miembros
de la Comunidad que, durante más de tres horas en el Palacio
Portales, discutieron sobre los caminos para llegar a la integración,
expusieron sus propias propuestas y sacaron a relucir algunas
divergencias, especialmente, respecto al comercio y a la eficacia de
los dos grandes bloques de la región, la Comunidad Andina
(CAN) y el Mercosur.

El presidente
Evo Morales clausuró el encuentro presidencial indicando que
en Cochabamba fue colocada la "piedra fundamental" para la
unidad latinoamericana porque se acordó adoptar el primer
paso, para después a apuntar a cumplir medidas que busquen
como fin último la eliminación de la exclusión
social y la reducción de la pobreza en todos los países
de Sudamérica.

Ritmos

Aunque en el
documento inicial de la declaración está propuesta la
creación de una Secretaría Permanente de la CSN, este
punto no fue acordado por no existir, según el presidente Luiz
Inácio Lula da Silva, total consenso.

Ante el reclamo
del presidente venezolano, Hugo Chávez, por la falta de una
decisión sobre el tema, Lula dijo que la creación de
una estructura permanente será debatida en la próxima
cumbre del Mercosur, el 18 y 19 de enero de 2007.

La posibilidad
de crear un órgano parlamentario sudamericano, cuya sede será
Cochabamba, quedó también pendiente aunque con encargo
de diseñar los mecanismos para su establecimiento.

La voz de
Chávez, durante su participación en la plenaria, fue la
más discordante porque reclamó a sus colegas más
definición y menos discusión, lo que no tuvo una total
acogida.

Esto develó
que, aunque todos quieren la integración, unos apuestan por un
ritmo acelerado y otros por hacerlo con calma, poniendo énfasis
en algunos niveles y no tanto en otros.

El modelo

En la
declaración presidencial se plantea un nuevo modelo de
integración para el siglo XXI, con "identidad propia,
pluralista en medio de la diversidad y las diferencias, reconociendo
las distintas concepciones políticas e ideológicas que
corresponden a la pluralidad democrática de nuestros países".

Este modo
planteado comprende el ámbito comercial y una articulación
económica y productiva más amplia, así como
nuevas formas de cooperación política, social y
cultural, tanto públicas como privadas, como de otras formas
de organización de la sociedad civil.

La declaración
indica que los principios rectores de la integración
sudamericana son: la solidaridad y cooperación; la soberanía
y el respeto a la integridad territorial y autodeterminación
de los Pueblos; la paz; la democracia y pluralismo; respeto a los
derechos humanos y un concepto de vida en armonía con la
naturaleza.

Las premisas
para la construcción de la integración sudamericana
están basadas en el compromiso democrático, el
fortalecimiento del diálogo político, la creación
de un espacio de concertación y conciliación, la
contribución a la estabilidad regional, la articulación
de políticas sociales regionales y la valorización de
una identidad cultural sudamericana con participación de
actores locales y regionales.

SEDE DE
PARLAMENTO, COCHABAMBA

Diseño

En la
declaración, se encarga el diseño de mecanismos para la
conformación de un Parlamento Sudamericano. Aunque no
especifica el lugar de la sede, los presidentes mantuvieron la idea
de que sea Cochabamba.

Solicitud

El presidente
Evo Morales, adelantándose, dijo, durante la clausura de la
Cumbre Social por la Integración de los Pueblos, que
solicitará al Prefecto la donación de un espacio de
cuatro hectáreas para comenzar a construir el edificio del
Parlamento.

SEDE DE
PARLAMENTO, COCHABAMBA

Los presidentes
acordaron discutir sobre la creación de una Secretaría
Permanente en la próxima reunión del Mercosur

El objetivo:
superar las asimetrías

La Declaración
de Cochabamba, denominada "Colocando la Piedra Fundamental para
una Unión Sudamericana", plantea como grandes objetivos
la superación de las asimetrías para una integración
equitativa y el establecimiento de un "nuevo contrato social
sudamericano" que se exprese en el establecimiento de metas
definidas de desarrollo social y en mecanismos sistemáticos de
evaluación.

Para llegar a
esto se plantea una integración energética mediante la
articulación de las estrategias y políticas nacionales
para un aprovechamiento de los recursos energéticos de la
región que sea integral, sostenible, solidario.

En el plano de
la infraestructura, lo que se busca es promover la conectividad de la
región a partir de la construcción de redes de
transporte y telecomunicaciones con criterios de desarrollo social y
económicos sustentables.

Se pretende
también una cooperación económica y comercial
encaminada al establecimiento de un sistema transparente, equitativo
y equilibrado.

Respecto a la
integración financiera industrial y productiva, se define que
será a través de la compatibilización de
políticas nacionales.

Se hace énfasis
en la ciudadanía sudamericana para alcanzar el reconocimiento
de derechos civiles, políticos, laborales y sociales para los
ciudadanos en cualquiera de los otros estados miembros.

La migración
será encarada con un enfoque integral y comprensivo, bajo el
respeto irrestricto a los derechos humanos.

Hay también
un acuerdo de cooperar en materia de defensa a través del
intercambio de experiencias sobre doctrina y formación de
personal.

La cooperación
alcanzará a la cultura y al medioambiente y desarrollarán
mecanismos de diálogo con la sociedad civil. Para ejecutar
estos puntos, los mandatarios decidieron celebrar reuniones anuales
de jefes de Estado y gobierno, encuentros semestrales de cancilleres
y reuniones ministeriales sectoriales.

DECISIONES

CUMBRE
ENERGÉTICA

Los presidentes
sudamericanos decidieron realizar, de acuerdo a la Declaración
de Cochabamba, en Caracas una Cumbre Energética que debe
acelerar las iniciativas de desarrollo de integración y
abastecimiento.

El planteamiento
hecho por el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva
fue aprobado luego de un intenso debate respecto en la plenaria y el
rechazo de Hugo Chávez de continuar con el mecanismo de "las
cumbres".

Lula dijo que
los mandatarios deben reunirse "un día completo para
discutir únicamente el tema de la energía".

ARGENTINA

Los mandatarios
también decidieron dar a Argentina el apoyo de sus países
en el antiguo litigio que mantiene con el Reino Unido por la posesión
de las islas Malvinas.

El documento,
anexo a la Declaración de Cochabamba, referida a la
integración regional, "alienta" al gobierno
argentino "a continuar su trabajo con firmeza y perseverancia".
El canciller argentino, Jorge Taiana, se declaró "muy
satisfecho" por el pronunciamiento de la Comunidad Sudamericana,
según una nota oficial divulgada ayer.