Indígenas de Sudamérica rechazan neoliberalismo

2006-12-08 00:00:00

Representantes de pueblos indígenas reunidos en el Foro Social por la Integración de los Pueblos rechazaron hoy aquí el modelo neoliberal, al cual culparon de ahondar más la pobreza y la exclusión de millones de personas en la región.
 
En una Resolución entregada a los jefes de Estado que asisten a la Cumbre Sudamericana de Naciones (CSN), que se inaugurará esta noche, subrayaron que apuestan por una fórmula que incluya a los oprimidos y excluidos de siempre, del campo y la ciudad.
 
El documento, al cual tuvo acceso Prensa Latina y que recoge la propuesta de los pueblos originarios como parte de los procesos integracionistas en Sudamérica, deberá ser considerado por los dignatarios en sus primeras deliberaciones.
 
En ese texto también se subraya que las comunidades originarias avanzan en la construcción de un modelo de sociedad equitativa, justa, y solidaria, basada en el respeto a la tierra y contraria a la acumulación neoliberal y de libre comercio.
 
Con ese fin, los indígenas ratificaron las grandes jornadas de movilización en cada una de sus naciones como vía para lograr respuestas a sus históricos reclamos.
 
También recordaron que en el camino hacia la unidad de los movimientos sociales han sido vitales las Cumbres y otras reuniones continentales y regionales como las efectuadas en México, Ecuador, Perú y Guatemala.
 
El mensaje respalda además las transformaciones en beneficio de las mayorías antes explotadas y cita como ejemplo los procesos de Brasil, Bolivia, Ecuador, Uruguay y Venezuela.
 
Los pueblos originarios trasmitieron a los dignatarios de los 13 países integrantes de la CSN unas 10 propuestas sobre la formación de un nuevo continente.
 
En ese proyecto sobresale la idea de una Comunidad Sudamericana que privilegie convenios de cooperación como los de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA) y el Tratado de Comercio de los Pueblos (TCP).
 
Además, rechazan los Tratados de Libre Comercio, que denominan "Colonización", impulsados por Estados Unidos, así como a la fracasada Area de Libre Comercio para las Ameritas (ALCA).
 
También condenaron la manipulación de Naciones Unidas por parte de Washington y exigieron se respete la Declaración de ese organismo  internacional sobre los pueblos indígenas, acordada en abril de este año por el Consejo de Derechos Humanos.
 
Por otra parte, los originarios demandaron una representación directa en la Comunidad Sudamericana de Naciones, sin lo cual ese mecanismo de cooperación sería infuncional.
 
En otra parte del documento, demandaron el derecho a decidir los modelos de desarrollo para sus comunidades y previa consulta con sus autoridades, emprender en sus territorios proyectos de explotación de los recursos naturales, lo ahora hacen a espaldas de los pueblos.
 
Asimismo exigieron el acceso a los medios de comunicación, pero bajo la conducción de las organizaciones indígenas.
 
La condena a la militarización del continente es otra de las demandas que los originarios pusieron consideración de los dignatarios de la CSN, la cual hoy abre sus puerta con el traspaso de la secretaria Pro tempore de Brasil a Bolivia.
 
Según la agenda de ese foro, el presidente boliviano, Evo Morales, anfitrión de la cita, ofrecerá una cena de bienvenida a los dignatarios asistentes.
 
En la CSN Morales sostendrá reuniones bilaterales con sus homólogos de Chile, Brasil, Perú, Venezuela, Uruguay,  Ecuador y Paraguay.
 
El objetivo central de este segundo encuentro internacional de jefes de Estado de la región es fijar la piedra fundamental que consolide la conformación de una Unión Sudamericana.