Cochabamba es capital de integración sudamericana
Esta ciudad boliviana se convierte en capital de la unidad continental, según organizadores del Foro Social de Integración de los Pueblos que hoy abre sus puertas y la II Cumbre Sudamericana de Naciones (CSN), a inaugurarse el viernes próximo.
Pablo Viglieti, del comité preparatorio de la cita de los movimientos sociales, confirmó a Prensa Latina que unos dos mil 500 delegados de más de una veintena de países y 60 organizaciones se han acreditado para participar en los debates.
Unos 13 temas centran las deliberaciones de las mesas de trabajo que antecederán la apertura de la reunión en el coliseo del Instituto Americano, prevista para esta noche.
Según Viglieti, defensa y militarización son de los asuntos urgentes que tratarán dirigentes campesinos, obreros, indígenas, intelectuales y religiosos de la región.
También abordarán otros puntos preocupantes de la sociedad civil como educación y salud, así como institucionalidad, asimetrías y comercio.
Migraciones y ciudadanía, medio ambiente y biodiversidad, agua, justicia e impunidad, financiamiento, agricultura y soberanía alimentaría, además de los derechos sociales y trabajo y despenalización de la hoja de coca, serán tópicos de intercambio, agregó.
La ciudad de Cochabamba, engalanada con afiches de ambas cumbres, aguarda con expectativa los resultados de estos encuentros y sus pobladores se muestran solidarios con los visitantes, muchos de ellos alojados en hogares de esta localidad.
Según Juan Carlos Gremio, del comité organizador, se espera el arribo de más de mil visitantes extranjeros.
Entre las principales organizaciones internacionales que participaran están la RED ALCA (Colombia), Common Frontiers (Canadá), Red Mexicana de Acción Frente al Libre Comercio (Rmalc-México) y la Red Brasilera por la Integración de los Pueblos (Rebrip- Brasil), entre otros.
Las organizaciones nacionales que estarán presentes son la Federación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos (Csutcb), Central Obrera Boliviana (COB) y la Federación Departamental de Juntas Vecinales (Fedjuve).
Además asisten representantes de la Federación de Mujeres Bartolina Sisa (FMBS) y la Federación de Trabajadores Campesinos del Trópico de Cochabamba (Ftctc).
De acuerdo con Edwin Claros, de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos, por primera vez en la historia de estos eventos, los movimientos sociales no saldrán a las calles ni plazas para protestar contra la reunión de unos 12 jefes de Estado.
Claros manifestó que la magnitud de la CSN se debe al apoyo y al trabajo que impulsa el Estado boliviano.
"Por una parte, el ejecutivo respalda el acercamiento entre presidentes para fijar metas de integración y, por otra parte, aúna la voz y esfuerzos de los movimientos sociales latinoamericanos en su lucha contra el neoliberalismo", agregó.
Asimismo precisó que las demandas de los movimientos sociales serán entregadas directamente a los mandatarios para que éstos diseñen políticas en beneficio de las mayorías.
Según diversos analistas, actualmente los países sudamericanos cuentan con soberanía formal, pero baja autonomía real, pues dependen de los mercados internacionales para vender sus productos básicos.
De ahí la necesidad de reafirmar y ejercer la soberanía de sus naciones como primer paso para cualquier proyecto verdadero de integración.
La preparación de la Cumbre Social por la Integración de los Pueblos se inició el 7 y 8 de abril pasado durante una reunión del Movimiento Boliviano de Lucha contra el Tratado de Libre Comercio (TLC) y el Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA)
En aquella oportunidad, representantes de más de 100 organizaciones sociales analizaron las propuestas de la construcción hacia una América integrada, libre, soberana e incluyente.
De esa forma nació el Movimiento Boliviano por la Soberanía y la Integración Solidaria de los Pueblos y las principales redes agrupadas en la Alianza Social Continental (ASC) y la Campaña contra el ALCA.