Contra los que no estamos de acuerdo con el golpe de Estado

En Honduras se vive un momento de brutal represión

2009-08-13 00:00:00

Alertamos al mundo entero de la brutal represión que estamos sufriendo los hondureños/as. El día de ayer, un militar disparó a un manifestante provocando que la gente se enardeciera, iniciándose una fuerte represión contra los manifestantes. Los militares llegaron a la Universidad Pedagógica Francisco Morazán y lanzaron adentro de esta institución bombas lacrimógenas con gas pimienta, balas de goma que impactaron en nuestro cuerpos, dejándonos con graves moretones y dolores, disparando para querer entrar y así violentando la autonomía de nuestra universidad.
    
También el martes 12 , a eso de las 11:20 de la  noche,  las oficinas de la Vía Campesina sufrieron un atentando, en las  horas que hay toque de queda que inicia a partir de las 10:00 p.m. Los vigilantes del estacionamiento del Instituto Nacional Agrario manifestaron que había pasado un vehiculo turismo y dijeron aquí es y empezaron a disparar contra las instalaciones de  nuestras oficinas, impactaron 4 balas de una arma de nueve milímetros, un disparo impactó en las oficinas de la administración. De esto pueden dar testimonio una compañera periodista que se encontraba junto a otro compañero.
    
El día de hoy miércoles 13 de agosto volvimos a salir a las calles en forma pacífica,  a eso de las 1:00 p.m.,  al llegar al centro de la ciudad de Tegucigalpa, los policías de las fuerzas especiales y militares del ejercito empezaron a tirar bombas lacrimógenas con gas pimienta (prohibido por las Naciones Unidas), dando toletazos a los manifestantes, dejando muchos heridos, arrestados,  y llegaron hasta el grado de perseguirnos. Entre los heridos está el compañero Marvin Ponce (diputado de Unificación Democrática), entre otros.
    
Luego los militares de las Fuerzas Armadas llegaron a eso de las 2:00 p.m. a la Universidad Pedagógica Francisco Morazán disparando sus fusiles sin haber dado ninguna palabra de advertencia hacia los manifestantes que nos encontrábamos en las instalaciones, nos sacaron a la carrera haciéndonos disparos sin importarles haber herido a alguien. Posteriormente salimos corriendo y logramos refugiarnos en un escondite, desde allí hice una llamada a mi compañera Karen Palencia (maestra y coordinadora de la logística en la Universidad) y me informó que habían mas de 40 personas allí en el auditorio, entre ellas:  Karen Palencia, Noemí Carias, Valeska Mejía, Carolina Rodríguez, Edgardo Cerrano, Jeny Silva, Lourdes Padillas, Cecilio Cruz, luego no pudo seguir dándome los nombres porque en esos instantes los militares llegaron al lugar donde se encontraban , y desde entonces no he logrado tener comunicación con ninguna de ellas y ellos. Ahora mismo, la universidad se encuentra totalmente militarizada y retienen a nuestros compañeros y compañeras, allí llego el ejercito nacional solo y ahora  muchos organismos de derechos humanos, Fiscalía General y otros dicen haber encontrado unas bombas caceras,  cosa que desmentimos. Ellos las han puesto para incriminar a nuestros compañeros/as.
    
Además de la brutal represión en el centro de la ciudad,  tenemos a muchos/as compañeros/as heridos que están retenidos en las diferentes postas policiales sin ninguna atención medica.
    
Ante todos estos sucesos,  le solicitamos en forma urgente a los organismos de Derechos Humanos nacionales e internacionales adoptar medidas de presión para que se respete la vida de nuestros compañeros y compañeras que estamos en la resistencia pacifica por que se restituya nuestro Estado de Derecho.
    
La vida de los hondureños y hondureñas que estamos en resistencia pacífica corre peligro, en Honduras ya no se respeta la libre expresión, la  locomoción, entre otros derechos.
    
Es urgente hacer acciones fuertes para que de una vez por todas regrese el Presidente Zelaya,  de lo contrario los militares del Ejército y la Policía Nacional nos golpearán, maltratarán, nos matarán. Ayúdennos,  ya no aguantamos más esta situación.
    
Wendy Cruz
Vía Campesina
Honduras