La intransigencia de un gobierno de facto que se resiste a entregar el poder, mantiene en la incertidumbre a ocho millones de hondureños que ponen sus esperanzas en la mediación del presidente costarricense, Oscar Arias, para que la historia tenga un final feliz.
En una reunión llevada a cabo en la casa presidencial con las cúpulas empresariales, el Presidente de facto, Roberto Micheletti, aseguró que su posición es indeclinable y que no permitirá que el presidente electo por los hondureños para un mandato de cuatro años, regrese al poder.
La comunidad internacional sigue condenando el golpe de Estado perpetrado en contra del gobierno de Manuel Zelaya Rosales y exige la restitución del orden constitucional en Honduras.
Mientras la Comisión Europea determinó suspender la ayuda presupuestaria de  65.5 millones de euros  equivalentes a 92 millones de dólares, la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hilary Clinton,  habló por teléfono  con Micheletti para informarle que si fracasan las negociaciones con el presidente Arias, esa nación también le suspenderá la ayuda a Honduras.
Por su parte el presidente costarricense, mediador entre las partes, hace un último intento por convencer al gobierno golpista a que salga del poder y permitan la restitución del presidente legítimo. No obstante, Roberto Micheletti y el grupo de empresarios que lo respaldan, sostienen que no lo harán.
 Empresarios
Ante la difícil situación que se avecina para Honduras,  los dirigentes empresariales se reunieron ayer para respaldar a Micheletti. A la cita llegaron Amílcar Bulnes, presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada, Luis Larach, presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés, Aline Flores, presidenta de la Cámara de Comercio e Industrias de Tegucigalpa, empresarios como Leonel Gianni, Adolfo Facussé, óscar Galeano y Eduardo Facussé  entre otros.
El presidente de la Asociación Nacional de Industriales, Adolfo Facusse, principal opositor al Decreto de incremento al salario mínimo aprobado en diciembre pasado por el gobierno de Zelaya, deja a un lado su comportamiento mezquino y confirma su disposición para buscar la forma de evitar consecuencias negativas que podrían derivarse del bloqueo económico.
Nunca antes la empresa privada había demostrado su voluntad para pagar los impuestos. Sin embargo, ahora son ellos quienes piden al gobierno golpista, que les cargue nuevos tributos. “Proponemos un impuesto adicional del 10% sobre el Impuesto Sobre  la Renta  para las empresas que ganen buenas utilidades y un 20% a las importaciones de artículos suntuarios”, le expresó Facussé, a la Ministra de Finanzas Gabriela Núñez.
 “Aquí estamos presentes los grupos de poder de verdad”, afirmó Amílcar Bulnes, Presidente del COHEP, tras mencionar  las cámaras de comercio de Tegucigalpa y San Pedro Sula, a Santiago Ruiz y a Asterio Reyes, presidente de la Asociación Hondureña de Productores de Café (AHPROCAFE), que sin tomar en cuenta la opinión de unos cien mil productores de café, llegó a la reunión para representarlos.
 
Estamos en Paz
“Aquí estamos viviendo la paz que los hondureños queremos vivir,  no hay persecución para nadie, no hay detenidos por política” Aseveró Micheletti, mientras la gente no tiene libertad de movilización porque desde el derrocamiento del presidente constitucional, en el país se instauró un toque de queda y las manifestaciones pacificas que llevan a cabo las organizaciones populares son fuertemente reprimidas por el ejercito u la policía.
 Cuando se cumplen veintitrés días de haberse ejecutado el golpe de Estado, continúan las deliberaciones entre las comisiones nombradas por las partes con la mediación del Premio nobel por la Paz, Oscar Arias, mientras en las calles, plazas públicas, puentes y carreteras, las acciones de resistencia continúan ejecutándose a favor del restablecimiento de la democracia.  Gerey