Manifiesto público del movimiento campesino hondureño
El movimiento campesino de Honduras, organizado y representado por sus tres confederaciones, el Consejo Coordinador de Organizaciones Campesinas de Honduras (COCOCH), la Confederación Nacional Campesina (CNC) y la Confederación Hondureña de Mujeres Campesinas (CHMC) y el Sindicato de Trabajadores del Instituto Nacional Agrario (SITRAINA) ante sus afiliados, las organizaciones sindicales, el pueblo y la prensa nacional e internacional, manifestamos lo siguiente:
1.- Condenamos el golpe de estado ocurrido en Honduras el pasado domingo 28 de junio de 2009 y ejecutado por las Fuerzas Armadas y la empresa privada, en complicidad con los partidos políticos tradicionales y las iglesias católica y evangélica que ha interrumpido temporalmente el gobierno Constitucional del Presidente José Manuel Zelaya Rosales y que pone en peligro las conquistas sociales logradas en los primeros tres años de este gobierno y llevando nuestra incipiente democracia y a nuestro pueblo a vivir en el estado de miseria, barbarie, persecución, encarcelamiento, asesinato, represión psicológica que solamente se dan bajo gobiernos fascistas.
2.- Estamos dispuestos a defender las instituciones creadas con dineros de los trabajadores del campo y la ciudad entre las que destacamos BANADESA, BANPROVI, SAG, IHMA, INJUPEMH, IMPREMA e ICF ante los saqueos programados por los golpistas y a resistir para defender la función que en beneficio que prestan a todos nosotros. Anunciando que nos mantenemos cuidando las instituciones del Estado antes mencionada y estamos en la disposición de defender a cualquier precio lo que le corresponde al pueblo.
3.- Nos oponemos firmemente al despilfarro que los golpistas quiere hacer con los recursos aportados por el ALBA y PETROCARIBE ya que estos son y deben ser invertidos en los campesinos y obreros pobres de Honduras y no para pagar los salarios de los empleados públicos y aliviar la crisis generada por los conservadores y agudizada por el aislamiento internacional en que se encuentra.
4.- Llamamos a los oficiales, clases y soldados jóvenes de las Fuerzas Armadas a reorientar la actual conducción de la institución militar para ponerla al servicio del pueblo y abandonen el papel de gendarme de la oligarquía que ahora desempeñan. Les recordamos que la mayoría de sus miembros provienen de las aldeas y barrios más pobres de Honduras y que esto los obliga a asumir una conducta más patriótica para engrandecer nuestra Honduras que los ricos y poderosos quieren repartirse como una hacienda personal.
5.- Entendemos que la crisis política actual es provocada por los conservadores, empresarios, iglesias y Fuerzas Armadas, que la misma es un problema nacional y no de personas como se nos quiere hacer creer.
Por todo lo expresado, hacemos un llamado a todos los compañeros y compañeras del movimiento campesino y sindical, a todo el pueblo hondureño, a cerrar filas para defender el orden constitucional que necesariamente tiene como condición esencial la restitución del Presidente José Manuel Zelaya Rosales, electo legalmente en la última elección general celebrada en el 2005. Reiteramos que nuestra resistencia pacifica asume a partir de este momento la característica de popular y prolongada si así lo demanda la patria, que necesita que la dignidad de los hombres y los Derechos Humanos sean respetados.
Tegucigalpa, 15 de Julio de 2009.
UNIDAD, SOLIDARIDAD Y LUCHA
EL QUE LA AMA TIERRA, AMA LA PATRIA.
LA TIERRA NO SE VENDE, SE RECUPERA Y SE DEFIENDE!
¡A 37 AÑOS DE LUCHA, AQUÍ NADIE SE RINDE!