A REINVENTAR EL SOCIALISMO

2006-03-13 00:00:00

1. CREANDO UN SOCIALISMO HUMANO
1) UN SOCIALISMO QUE NO PUEDE SER CAPITALISMO DE ESTADO
1. “Tenemos que reinventar el socialismo", declaró Chávez en su discurso de clausura en el Foro Social Mundial del 2005 en Porto Alegre, Brasil. “No puede ser el tipo de socialismo que vimos en la Unión Soviética, sino el que emergerá al desarrollar nuevos sistemas construidos sobre la base de la cooperación, no de la competencia.” El capitalismo tiene que ser trascendido si queremos en algún momento poner fin a la pobreza de la mayoría de la población mundial. “Debemos superar el capitalismo. Pero no podemos recurrir al capitalismo de estado, que sería la misma perversión de la Unión Soviética. Debemos reclamar el socialismo como una tesis, un proyecto y un sendero, pero un nuevo tipo de socialismo, humanista, que sitúe a los humanos y no a las máquinas o al estado a la cabeza de todo.”
2. Esta declaración sorprendió a muchas personas fuera de Venezuela, fue como algo caído del cielo. Sin embargo, era la continuación lógica de un camino que había comenzado con el rechazo al imperialismo, al neoliberalismo y la lógica del capital. Esta postura pública, reforzada por la derrota dramática propinada por un pueblo movilizado y el ejército al golpe militar de la clase dominante local y del imperialismo, ha entusiasmado a la gente alrededor del mundo mostrando una señal prometedora de que realmente puede haber una alternativa a la barbarie.
3. Dentro de Venezuela, hay también una señal prometedora. Los logros proporcionados a los pobres por las misiones han sido el resultado más concreto de la Revolución Bolivariana. Pero son las ideas de dignidad, desarrollo humano y democracia protagónica presentes en la Constitución, las que le han dado un sentido a estos logros, las que han permitido que éstos sean considerados como los primeros pasos en el camino hacia un mundo mejor. Como resultado de los discursos de Chávez, ese nuevo mundo es visto por más y más venezolanos como una continuación lógica del rechazo al método del capitalismo y una toma de partido por una economía social -- un socialismo humanista, “el Socialismo del Siglo XXI.”
2) EL PAPEL DEL ESTADO EN EL SOCIALISMO
4. ¿Puede esta señal prometedora hacerse realidad? El primer paso en Venezuela fue ganar el control del estado existente. Contrariando las bellas palabras de algunos poetas, no se puede cambiar el mundo sin tomar el poder. Y, ese estado está siendo utilizado ahora para crear las bases de nuevas relaciones de producción —primero por medio de la recaptura de la propiedad de facto del petróleo (tanto al deshacerse de la vieja administración de PDVSA como mediante la transformación de la producción antes contratada con empresas trasnacionales en producción en empresas mixtas) y luego utilizando los ingresos petroleros para apoyar el desarrollo de cooperativas y la expansión de la industria propiedad del estado. Estas dos formas de propiedad están creciendo gradualmente en relación con el capital privado (que hasta la fecha retiene sus enclaves -- especialmente en los medios de comunicación, la banca, las telecomunicaciones y el procesamiento de alimentos).
3) CAMINAR CON LAS DOS PIERNAS
5. La combinación de la industria estatal y de las cooperativas está en la base del nuevo modelo productivo concebido en la actualidad para Venezuela. Las nuevas empresas estatales en la industria básica, telecomunicaciones, aerolíneas, además de la asociación con empresas estatales de otros países en áreas tales como la de la producción de tractores, automóviles, rieles de ferrocarril, satélites, y producción de alimentos procesados se identifican como nuevas fuerzas que van a incorporar tecnología moderna e impulsar el desarrollo económico. Íntimamente articuladas con estas firmas estatales y conectadas con ellas como parte de nuevas cadenas productivas (como proveedores y procesadores) van a estar las cooperativas, rehabilitadas como empresas de producción social. El concepto, así, es el de “caminar con las dos piernas”: grandes empresas y pequeñas empresas; firmas estatales y firmas de producción social; desarrollo intensivo y desarrollo extensivo.
4) ¿SE ESTÁ CONSTRUYENDO REALMENTE EL SOCIALISMO EN VENEZUELA?
6. Estos proyectos están desarrollando nuevas fuerzas productivas, creando las bases para alejarse de la dependencia abrumadora del petróleo y generar nuevos puestos de trabajo para los desempleados y excluidos. Pero, ¿es eso socialismo? ¿Son relaciones socialistas las que se están construyendo? Después de todo, la propiedad jurídica y las relaciones de producción no son la misma cosa. Como se indica en el Capítulo 1, la ruptura de los derechos de propiedad (que ocurrió con la separación entre los medios de producción y los productores directos) fue una condición necesaria pero no suficiente para las relaciones capitalistas de producción; en tanto que para éstas últimas fue necesario además que los capitalistas tomaran posesión de la producción y dirigieran la producción hacia sus propios fines.
7. Las empresas estatales pueden ser empresas capitalistas de estado o empresas socialistas en cuanto a su carácter; y las cooperativas pueden basarse en el auto-interés de un colectivo o en las necesidades de la comunidad en su conjunto. Esta distinción ha sido reconocida por Chávez —tanto en su crítica del capitalismo de estado como también en la idea del desarrollo de las empresas de producción social (EPS)—.Ya existían cooperativas, administradas colectivamente por sus miembros, y sin embargo se veía que algo les faltaba. ¿Por qué? Porque el intercambio de mercancías en las que estaban involucradas implicaba que el comprador y el vendedor fuesen independientes entre sí en el intercambio de actividades, por otro lado, lo central es en la unidad, la solidaridad entre los miembros de una sociedad.
5) COMBINACIÓN DE DEMOCRACIA PROTAGÓNICA EN LAS EMPRESAS Y EN LAS COMUNIDADES
8. En las discusiones actuales sobre las EPS (que están todavía en un estado indefinición considerable), podemos identificar dos relaciones: (a) la relación entre las EPS y las empresas estatales que forman su núcleo y (b) las relaciones entre las EPS y las comunidades.
En el caso del nexo entre las firmas estatales y las EPS, el rechazo de las relaciones mercantiles entre estas empresas es la afirmación de que estas unidades productivas no son independientes sino que forman parte de una misma totalidad, que son un subconjunto del trabajador colectivo que está generando productos específicos en el interés de la sociedad en su conjunto. En el caso de las EPS y su vínculo con la comunidad, lo central es la creación de un “sistema comunal de producción y consumo”, la articulación directa de las necesidades de la comunidad y la actividad productiva.
9. En ambos casos, la premisa es la toma de decisiones democrática, el desarrollo de relaciones en las que el productor colectivo sea tanto “el objeto como el sujeto del poder.” En la medida en que las comunidades identifican colectivamente sus necesidades y establecen sus prioridades, hay un fundamento para que la actividad productiva se base realmente en las necesidades y fines comunales. Y, es en este contexto, en la medida en que los productores de las empresas estatales decidan sobre la actividad planificada tanto entre sí como con los productores en las EPS, su actividad podrá basarse en la cooperación, la solidaridad y en el servicio de las necesidades de la sociedad. Esta combinación particular de democracia protagónica en la comunidad y de democracia protagónica en el lugar de trabajo incorpora la solidaridad entre las unidades productivas y la sociedad directamente en las propias unidades productivas (la ausencia de dicha solidaridad, como hemos visto, fue un problema en Yugoslavia).
6) ASÍ ES COMO LA GENTE SE TRANSFORMA A SÍ MISMA
10. Este es el marco en el que la gente puede transformarse a sí misma en el curso de la transformación de sus circunstancias. Funcionando como sujetos del poder tanto en el lugar de trabajo como en la comunidad, la gente puede desarrollar sus capacidades y potencialidades. Y, como Marx comenta, este desarrollo es el mayor estímulo sobre el poder productivo del trabajo. Este crecimiento de las fuerzas productivas humanas es el corazón de un nuevo tipo de socialismo, de un socialismo humanista, que pone a los seres humanos y no a las máquinas por encima de todo.
2. CUÁL SERÁ LA VÍA DE LA REVOLUCIÓN BOLIVARIANA
1) DOS INSTITUCIONES QUE PUEDEN CONVERTIR EL SOCIALISMO EN REALIDAD EN VENEZUELA
12. ¿Qué rumbo va a tomar la Revolución Bolivariana?
13. Dos instituciones que la Revolución Bolivariana ha venido desarrollando pueden convertir esta concepción en una realidad concreta. A nivel de la comunidad (200-400 familias en las áreas urbanas, 50 en las rurales), la creación de los consejos comunales que pueden diagnosticar democráticamente las necesidades y prioridades de la comunidad. Y, en el centro de trabajo, el desarrollo de la cogestión en las firmas estatales -- un concepto propio venezolano de cogestión que enfatiza el vínculo entre la empresa y la sociedad, donde los trabajadores operan las empresas en interés de la sociedad en su conjunto y se ven a sí mismos como "garantes de la soberanía del pueblo".
14. La aparición de estos dos elementos nuevos es un proceso de aprendizaje y desarrollo. Dado que las personas se desarrollan a través de su actividad, la democracia protagónica en la comunidad y en el centro de trabajo las va a cambiar y, con el tiempo, se convertirán en personas que entiendan esta particular asociación que debe establecerse entre trabajadores y comunidad que puede construir una sociedad nueva.
2) LOS QUE SE OPONEN A LA PARTICIPACIÓN EN CENTROS DE TRABAJO Y COMUNIDADES
15. Pero, hay oposición al desarrollo de estos dos elementos de una nueva sociedad socialista. Mientras se producen avances en la cogestión en ALCASA y CADELA, en otros lugares de la administración (incluyendo al interior del gobierno mismo), hay algunos que no creen en la gestión de los trabajadores. Para ser más precisos, ellos están de acuerdo en que los trabajadores participen en la toma de decisiones triviales (tales como la selección de los adornos navideños, como ocurrió en CADAFE), pero creen que las decisiones importantes deben quedar en manos seguras (las suyas).
16. La misma orientación se opone al desarrollo del poder real que implica la toma de decisiones en los consejos comunales. Aquí, sin embargo, hay un elemento adicional además del miedo a perder el control sobre las decisiones económicas. En ambos casos entre funcionarios del estado como entre los miembros de los aparatos de los partidos chavistas, se percibe cierta resistencia a un desplazamiento hacia abajo del poder porque reduce su posibilidad de repartir empleos y recursos desde arriba (lo que afecta las formas tradicionales del clientelismo y la corrupción).
3) LA REVOLUCIÓN PUEDE SER DEFORMADA
18. La revolución económica, en resumen, ha comenzado en Venezuela pero la revolución política (que comenzó espectacularmente con la nueva constitución pero que requiere que el estado se transforme en un estado donde el poder surja desde abajo) y la revolución cultural (que llama a un asalto serio contra las prácticas continuas de corrupción y clientelismo) están muy rezagadas. Sin avances en estos dos terrenos, la Revolución Bolivariana no puede evitar ser deformada.
19. Consideren, por ejemplo, las implicaciones que tendría el mantenimiento de las jerarquías y del poder desde arriba en las firmas estatales. El resultado inmediato sería la decepción de aquellos trabajadores que han creído que la revolución iba a cambiar las cosas en el lugar de trabajo, mientras confirmaría el cinismo y la apatía de los trabajadores que no se han comprometido. Y, el resultado sería el reforzamiento de la alienación y, en esa misma medida, la pérdida por parte de la sociedad del aporte que pueden hacer esos trabajadores con su conocimiento y la realización y crecimiento de sus capacidades, en resumen, la pérdida de fuerzas productivas humanas. Sin la producción democrática, participativa y protagónica, las personas siguen siendo seres humanos fragmentados, siguen siendo las personas lisiadas que el capitalismo produce.
4) A DÓNDE CONDUCE LA DESCONFIANZA EN LOS TRABAJADORES
21. Si se piensa que no se puede confiar en los trabajadores para la toma de decisiones correctas en asuntos críticos para la sociedad, se está diciendo que se quiere que los trabajadores continúen en el papel de contrincantes que juegan en el capitalismo, es decir, que se centren en la lucha por salarios más altos, mayores ventajas y privilegios y jornadas de trabajo más cortas y menos intensas. De esta manera se refuerzan todas las tendencias egoístas de la vieja sociedad y se socava la construcción de la sociedad nueva. ¿Es lógico el deseo de maximizar el plus producto para dedicarlo a programas sociales y al desarrollo de nuevas fuerzas productivas? No sólo se reduce el plus producto al restringir el desarrollo de las capacidades y potencialidades humanas, sino que además se favorece que los trabajadores exijan salarios más altos para sí mismos. Por otra parte, la misma lógica que sostiene que no hay lugar para la cogestión en las industrias estratégicas llevaría a sostener que no hay lugar para las huelgas de los trabajadores en esos sectores. ¿Cuán lejos estamos entonces de la "perversión de la Unión Soviética"?
22. El problema de las jerarquías dentro de la empresa estatal no se limita a esas empresas de por sí. Las relaciones jerárquicas dentro de estas empresas no pueden dejar de extenderse a la relación entre ellas y las empresas de la producción social. ¿Qué clase de discusión democrática puede haber entre estas empresas y los colectivos de trabajadores si las decisiones se toman arriba? En esta relación, estos últimos no son ni colectivos independientes con poder suficiente para tomar decisiones ni protagonistas democráticos en el colectivo total; más bien, se transforman en unidades productivas que, de hecho, no tienen ningún control sobre su actividad. ¿En qué momento los miembros de las EPS acabarían considerándose simplemente como un grupo de trabajadores asalariados?
23. De modo semejante, en ausencia de una institución que verdaderamente desde la base que identifique las necesidades de las comunidades locales, ¿quién decidirá sobre sus necesidades? ¿Funcionarios locales que rechazan la transparencia debido a sus implicaciones? ¿Cuadros locales del partido? ¿Y qué ocurre con la producción dirigida a las comunidades? En lugar de la "autogestión coordinada con la sociedad" que Mészáros describió, el compromiso hacia la comunidad será determinado por las empresas (las cooperativas, las EPS y las empresas estatales). La demostración del compromiso hacia la comunidad se convertirá así simplemente en un "impuesto", un costo comercial. ¿Es eso lo que se quiere decir cuando se habla de una producción que responda a las necesidades y los propósitos comunales?
5) LA AMENAZA ESTÁ DENTRO DE LAS ENTRAÑAS MISMAS DE LA REVOLUCIÓN
24. Hay un verso de una vieja canción de Bob Dylan: “Aquél que no está ocupado naciendo, está ocupado muriendo.” Si la Revolución Bolivariana no avanza en el desarrollo de la democracia protagónica en el lugar de trabajo y en la comunidad, ¿qué diferencia habría entre Venezuela y capitalismo? Todo lo que haría falta sería recurrir al capital privado (nacional y extranjero) para tener una fuente creciente de inversión, y la revolución estaría de vuelta a la posición en que estaba en tiempos del Plan Nacional 2001, de regreso a los tiempos en que Chávez creía en la “Tercera Vía.”
25. Para algunos, esto no sería -- en absoluto -- una tragedia. ¿Debemos sorprendernos si entre los líderes chavistas hay algunos que desean no un “Chavismo sin Chávez”, como se les acusa a menudo, sino más bien un "Chávez sin socialismo"? Hay algunos para los cuales el desarrollo de las capacidades y potencialidades de las masas es menos fuerte que el deseo de acumular poder y comodidad para sus familias. Todos sabemos que hay gente que usa la camisa roja, pero que se opone a la revolución. Aquí radica la amenaza verdadera a la Revolución Bolivariana -- no en la propiedad privada de los bancos, los medios de comunicación y otros elementos del enclave capitalista existente. La amenaza está dentro de las entrañas mismas de la Revolución Bolivariana.
26. Y esta amenaza de hacer retroceder la revolución hasta el punto en que llegue a apoyar el capitalismo (el que, al mismo tiempo, es la base para una nueva oligarquía arraigada en la corrupción) señala la necesidad de luchar por la Constitución. Luchar para hacer realidad su premisa de que la participación de los trabajadores en la esfera económica —a través de la “autogestión, cogestión y cooperativas en todas sus formas”— conduce al desarrollo humano integral tanto como "la participación de la gente en la formación, realización y control de la gestión de los asuntos públicos es el camino necesario para lograr la participación y asegurar su desarrollo completo, tanto individual como colectivo."
27. Esta sería, por supuesto, una lucha por hacer realidad el llamado de Chávez que reclama el “socialismo como propuesta, como proyecto y como camino, pero un nuevo tipo de socialismo, un socialismo humanista, que ponga a los seres humanos y no a las máquinas o al estado por encima de todo.” El llamado a llevarlo adelante impulsando las revoluciones políticas y culturales necesarias para la revolución económica.
6) UN INSTRUMENTO POLÍTICO QUE REÚNA A LOS QUE PARTICIPAN EN EL CENTRO DE TRABAJO Y EN LA COMUNIDAD
28. ¿Puede esa lucha basarse en la espontaneidad? ¿O en campañas esporádicas que evoquen el poder de las masas para hacer una vez más de nuevo la revolución dentro de la revolución? Teniendo en cuenta los enemigos que la Revolución Bolivariana tiene (tanto los externos como los internos), se necesita un instrumento político que pueda reunir a quienes luchan por la democracia protagónica en el lugar de trabajo y en la comunidad. Un instrumento que pueda desarrollar y articular demandas comunes como las de transparencia (una condición necesaria para la democracia verdadera y para la lucha contra la corrupción). Un instrumento que se base no en agrupaciones estrechas, sino en todas las organizaciones populares y que represente los intereses de los trabajadores en su totalidad.
29. ¿De qué otro modo pueden resolverse las contradicciones inherentes entre quienes quieren que la revolución continúe? -- por ejemplo, las contradicciones entre el sector informal y el sector formal, entre los explotados y los excluidos, entre los trabajadores y los campesinos, entre las cooperativas y los sectores estatales, excepto mediante la discusión, la persuasión y la educación democráticas que parten del deseo de la unidad en la lucha? ¿De qué otro modo se puede evitar que las contradicciones en el seno del pueblo se conviertan en contradicciones entre el pueblo y el enemigo -- excepto mediante la creación de un partido para del futuro de la Revolución (más que de su pasado)? Un instrumento construido desde abajo que pueda continuar el proceso de democracia revolucionaria que se necesita para construir este nuevo tipo de socialismo.
3. MÁS ALLÁ DE VENEZUELA
1) LA REVOLUCIÓN BOLIVARIANA PUEDE TRIUNFAR O FRACASAR
30. No hay nada inevitable. No se puede adelantar si la Revolución Bolivariana ha de triunfar en su afán de construir una sociedad nueva o si ha de desembocar en una variedad nueva de capitalismo con características populistas. Sólo la lucha determinará esto. Sin embargo, la responsabilidad de aquellos que apoyan el proceso fue descrita bien en 1993 por Chávez: "el pueblo soberano debe transformarse a sí mismo en el objeto y el sujeto del poder. Esta opción no es negociable para los revolucionarios".
31. La Revolución Bolivariana puede frac