Una Vía Urbana daría a los habitantes del mundo un instrumento que le permita a los movimientos avanzar en la defensa de sus derechos económicos, sociales y culturales; También ayudaría a detener las políticas de desalojos y para propiciar la creación de viviendas dignas.

En el seminario se puso en evidencia que el 15% de la población mundial está amenazada de desalojos de las cuales los países como Nigeria, India, Sudáfrica, Kenia, Italia, Francia, Puerto Rico, República Dominicana, México, Colombia y Brasil, entre muchos otros, son las más afectadas.

Se recogió la importancia de construir un sistema de alertas internacional para informar sobre los desalojos que estén ocurriendo. Estas alertas se harían mediante la creación de antenas desde los países o los territorios afectados para que la información salga instantánea y efectivamente.

Entre los instrumentos ya logrados por los movimientos sociales a nivel internacional se mencionaron el Estatuto de la Ciudad (Brasil) y la Carta Europea por el Derecho a la Ciudad.

La AIH le pidió a los presentes que demanden de sus gobiernos locales municipales declarar sus territorios como "ciudades libres de desalojos". El gobierno municipal de Roma ya se ha declarado como una ciudad libre de desalojos y ha dado pasos para utilizar hogares vacantes y repartirlos entre familias necesitadas.

Entre las propuestas sobre los próximos pasos a seguir para crear un mundo con cero desalojos están: 1) demandar de los gobiernos que se declaren sus territorios "libres de desalojos"; 2) crear un sistema de alerta internacional sobre desalojos; 3) crear un Fondo Popular para la Vivienda y la Tierra; 4) redactar una Carta Mundial sobre el Derecho a la Ciudad; 5) Constituir una Vía Urbana como espacio común de los movimientos sociales.