Decir filósofo no siempre significa una desconexión total entre el mundo de las ideas y el mundo de la vida cotidiana. Para los filósofos y filósofas cubanas que forman parte de GALFISA (Grupo “América Latina: Filosofía Social y Axiología”) su profesión es también una forma de resistencia que acompaña la lucha de los movimientos populares contra el neoliberalismo. Temas como la diversidad, la exclusión de la mujer y el papel de la academia en el contexto actual del continente, se abordaron en una breve entrevista con Gilberto Valdés Gutiérrez, coordinador de esa experiencia.

“Galfisa ha venido al VI Foro Social Mundial para participar en una Corte Mundial de Mujeres junto a otras organizaciones como la Marcha Mundial de Mujeres, la Red de Intelectuales en Defensa de la Humanidad y el Centro Memorial Martin Luther King, Jr (CMMLK). La esencia de esta Corte es mostrar la diversidad de formas de violencia económica, política, social y simbólica que genera la civilización patriarcal, excluyente y depredadora que entre todos y todas queremos cambiar. No por gusto la Corte se inserta en el foro dentro del eje de poder y luchas emancipatorias. La razón es que intentamos la construcción de nuevas alternativas y nuevos paradigmas, y pensamos en proyectos compartidos de mujeres y hombres.

“Durante la Corte se oirán las voces de la esperanza y sus alternativas, nunca con la idea de unificar y perder la diversidad, sino con el propósito de tejer las distintas formas de resistencia, cosmologías y perspectivas liberadoras que hoy enfrentan el pensamiento del imperialismo y el neoliberalismo global”.

Expectativas en el Foro

“Creo que toda las organizaciones presentes en esta Corte saben que no se puede luchar sin identidad y que es importante que las luchas de la resistencia partan de las identidades. Hablamos de identidades no atomizadas porque creemos que la diversidad es una característica del movimiento social popular. Aunque existen muchas lecturas de la diversidad, no se trata de decir “aquí están los indígenas”, “aquí están los negros”, “aquí están los campesinos” y “aquí están los trabajadores de la ciudad”. Más bien es cuestión de ver qué nos une a todos y cuáles son los retos que enfrentamos, sin dejar de respetar las distintas perspectivas y las maneras que existen de enfrentar los poderes globocolonizadores”.

Una academia con “los pies en la tierra”

“Nosotros somos un grupo pequeño de hombres y mujeres del Instituto de Filosofía de la Habana que centra su investigación en los movimientos sociales y las alternativas que se dan en la América Latina. Nos vinculamos a la educación popular y hemos participado en Cortes de Mujeres realizadas en Asia, África y los Estados Unidos. Queremos que la academia no ande “por los aires”, que se vincule realmente a las urgencias y las reflexiones del momento, y que contribuya a la articulación de todas esas riquezas potenciales que hoy se enfrentan al poder”.