Reforma Agraria Integral = Soberanía alimentaria
Por un mejor nivel de vida en el campo
El modelo agrícola de los países pobres se subordina a las
necesidades del gran capital internacional, es así como aparentemente
llegan a nuestros países nuevos modelos con el supuesto combate a la
pobreza pero sin embargo lo que hacen es que cada día legitiman las
diferencias profundas entre los más ricos y los pobres expresado
tajantemente en la tenencia, explotación y legalización de la tierra.
En Nicaragua lamentablemente la lucha despiadada de la contra
Reforma Agraria avanza vorazmente quitando las tierras masivamente a
los que un día fueron beneficiados por uno de los procesos de entrega
de tierras a campesinos pobres más significativas de la historia
moderna en nuestro continente, en los años ochenta se entregaron mas
de dos millones de manzanas de tierra beneficiando a mas de 120.000
familias. Sin embargo en los últimos 14 años un sinnúmero de
factores que van poco a poco atacando ese proceso llevando a un
productor a perder su tierra, que estaba destinada a mejorar su nivel
de vida.
La contrarreforma agraria se expresa así:
Desde los organismos multilaterales: Fondo Monetario Internacional
(FMI), Banco Mundial (BM), Banco Interamericano de Desarrollo (BID),
Organización Mundial de Comercio (OMC):
- Son los principales actores de la contrarreforma agraria,
siendo la punta de lanza de la política globalizante neoliberal
de los gobiernos del Norte (Estados Unidos y Europa) y dentro
de ellos, el gran capital compuesto por fuertes grupos
económicos quienes de disputan “democráticamente” el poder de
dominar a los pueblos del sur. Orientan la Reforma Agraria
definida por el mercado estableciendo “Bancos de Tierras”
permitiendo a los grandes latifundistas vender sus peores
tierras a precios altos y comprar a precios bajos las tierras
del campesino pobre.
- Dictan políticas (ordenan) que avasallan nuestra dignidad y
soberanía creando estructuras organizativas que obligan a los
países pobres a hacer lo que ellos dicen, como la OMC que no
cesa de incluir a la agricultura dentro de las políticas
comerciales. Obligando a nuestros pequeños productores a
continuar produciendo para la exportación de materia prima para
la agroindustria de los países ricos y cada día olvidarse de
producir el sustento alimenticio para sus familias, obligando a
los pequeños y medianos productores a morirse de hambre.
- Instan (obligan) a los países pobres a firmar Tratados de Libre
Comercio cuyos acuerdos jurídicos están por encima de la Carta
Magna Constitucional, marco fundamental de la base jurídica de
cada uno de nuestros países, que vienen a beneficiar solamente
a los países desarrollados reafirmando el papel de
subordinación, nueva forma de esclavitud de los países pobres,
entre ellos el Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos,
Canadá y México (NAFTA, siglas en inglés), el Tratado de
Libre Comercio entre Estados Unidos, República Dominicana y
Centroamérica que se encuentra en proceso de ratificación, el
Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA), y el Plan
Puebla Panamá, que pretende dominar y explotar la riqueza de
Mesoamérica (sur de México hasta Panamá) a favor de las
grandes transnacionales.
- Subordinan a los gobiernos a ejecutar políticas económicas que
llaman “ajustes estructurales” para solucionar la pobreza, en
los cuales los pobres, los campesinos, son los principales
beneficiados y los que ponen la mayor cuota de sacrificio
esperando resultados positivos los cuales nunca llegan.
- Complicidad de organismos asistenciales que tratan de mitigar
el problema del hambre que se genera al convertir a miles de
campesinos pequeños productores en proletarios agrícolas que
van a laborar en sus antiguas tierras pero que ahora son
propiedad de nuevos terratenientes muchos de ellos ligados al
capital extranjero. Mucha de esta ayuda alimentaria es comprada
o donada por los países ricos de los excedentes de sus
productores a quienes además de comprar el excedente les
otorgan estímulos (subsidios) por exportar ese excedente como
ayuda alimentaria a los países pobres muchas veces conteniendo
productos transgénicos.
Desde el Gobierno Nacional y principales poderes del Estado:
Lamentablemente el Gobierno Nacional y demás poderes del Estado se
disponen a cumplir de la mejor manera (buscando buenas calificaciones
al servilismo) las políticas económicas y comerciales dictadas por
los organismos multilaterales bajo la excusa de que no hacerlo:
- Atentaría al proceso democrático y de paz en que se encuentra
el país y la región centroamericana, todo lo contrario
significaría desestabilidad, crisis que podría culminar
nuevamente en una guerra civil. Por lo tanto, todo aquel grupo
que se oponga es considerado desestabilizador del proceso.
- No habría la forma de negociar la deuda externa.
- No habría forma de conseguir financiamiento.
- Estaríamos fuera de la agenda de los países donantes. Claro
está, los dueños del dinero deciden qué hacer y cómo hacer lo
que quieren con los pobres.
- Estaríamos fuera del proceso de globalización y modernización
del mercado. Sería lo peor que nos pudiese pasar ¿Cuál es la
nueva teoría o tendencia del mercado moderno? Simplemente,
seguir pisoteando al pobre de una manera más solapada, ¿seguir
usándonos como conejillo de indias?
- Nuestra producción no tendría mercado.
- Estaríamos a favor del terrorismo sino hacemos lo que dicen los
Estados Unidos y sus principales instrumentos de expandir la
democracia.
Siendo los principales cómplices de convertir a los pobres en más
pobres, beneficiando fundamentalmente al gran capital extranjero,
firmando y aprobando todos y cada uno de los acuerdos que los
organismos multilaterales definen deber ser firmados. De ahí que
sean ellos los que definen cual deber ser la agenda que le interesa
a la nación impulsar. Por lo tanto, el tema de la Reforma Agraria
Integral les eriza la piel y prefieren decir que no es un tema de
agenda.
En Nicaragua han sido desmanteladas las estructuras financieras que
apoyaban a la pequeña y mediana producción. No existe ninguna
estructura estatal que beneficie a pequeños y medianos productores.
Toda esta actitud política del Gobierno y de los demás poderes del
Estado a quienes lamentablemente pagamos su salario. Contribuyen a
aumentar la crisis en el sector campesino nicaragüense propiciando
que muchos capitalistas extranjeros compren a precios irrisorios las
mejores tierras que en manos de campesinos pobres se ven obligados a
venderlas. No obstante la complicidad del gobierno en no facilitar
títulos, financiamiento, asistencia técnica al campesino, facilita
que los capitalistas extranjeros se apropien de estas tierras bajo la
excusa de ser inversionistas que traen dinero y por consiguiente
empleo al campesino que se muere de hambre, siendo esto un logro
importante en su gestión gubernamental.
Vigencia de la reforma agraria integral en el contexto actual
“En ausencia de una tenencia segura de la tierra, los pobres de las
zonas rurales carecen de incentivos para conservar o invertir en las
calidades productivas de las tierras. Ellos enfrentan diariamente el
riesgo de ser expulsados para que los beneficios de su mano de
obra e inversiones sean expropiados por los terratenientes. Entonces,
naturalmente, toman de la tierra lo necesario para satisfacer las
necesidades de subsistencia de sus familias y, a menudo, se ven
forzados a llevar a cabo acciones desesperadas. No puedo imaginarme
no hacerlo, si se me negaran una y otra vez las oportunidades para
ganarme la vida y mejorar las oportunidades para mi familia” (1)
Hablar de Reforma Agraria en estos días para muchos, lamentablemente,
es hablar de una tema “fuera de agenda” que significa estar fuera
del orden que establecen los organismos que dictan la política
económica en nuestro país.
La Reforma Agraria Integral contradice el nuevo orden económico
globalizado del neoliberalismo, está en contraposición de una Reforma
Agraria establecida por el mercado de tierra, se trata de establecer
entonces una reforma agraria que lleve bienestar y mejor el nivel de
vida del campesino, establecer una reforma agraria que estimule la
producción de alimentos.
La Reforma Agraria Integral promueve la Soberanía Alimentaria que
garantiza la seguridad alimentaria y nutricional de los pueblos.
Es necesario retomar la lucha por la Reforma Agraria Integral,
retornarla a la agenda de trabajo diario del gobierno y que la nueva
Ley de Reforma Agraria tome en cuenta que: “las políticas y programas
que afectan a los sistemas agrario y rural deben formularse y
aplicarse con pleno conocimiento y participación de toda la población
rural, incluidos los jóvenes, y de sus organizaciones a todos los
niveles, y los esfuerzos en pro del desarrollo deben responder a las
diversas necesidades de diferentes grupos de campesinos pobres” (2)
De esta declaración que los gobiernos firmaron, han hecho todo lo
contrario de consultar al sector rural, y han venido actuando a
espaldas de los pequeños y medianos productores, negociando y
entregando la soberanía a las grandes transnacionales.
Así mismo se debe incorporar el sentir del movimiento indígena y
campesino centroamericano que resumen a través de declaración el
verdadero concepto de una Reforma Agraria Integral:
“Demandamos que la agricultura vinculada a los pueblos campesinos e
indígenas sea a través del impulso de una Reforma Agraria Integral,
incorporando el acceso a la tierra, a los bosques, al riego, a la
asistencia técnica, promoción y defensa de nuestros mercados internos
y locales, garantizando la alimentación a los pueblos, recuperación
de semillas y plantas criollas, incorporando en la dirección a las
mujeres y jóvenes campesinos e indígenas, exigimos verdaderas
políticas agrarias, y con nuevos modelos de desarrollo rural sano y
perdurable con igualdad y justicia real en el campo, como agrícolas
y rechazamos la privatización de nuestros recursos naturales”. (3)
En este contexto, la vigencia de una Reforma Agraria Integral es
totalmente válida y urgente, la cual debemos promover e impulsar
decididamente, ya se han venido manifestando de diferentes formas y
expresiones la necesidad de una Reforma Agraria Integral, hace falta
pasar a la acción definitiva, en este sentido es necesario:
- Exigir a organismos como la FAO que desarrollen la lucha contra
el hambre y a favor de la producción de alimentos, proponiendo
resolver el problema de acceso a la tierra, financiamiento,
asistencia técnica, etcétera, a los miles de campesinos pobres
que cada día se convierten en hambrientos por falta de comida.
No es justo, no es lógico que se lleve comida como asistencia a
quien la produce o quien la debería estar produciendo si cada
gobierno le diera el apoyo que se merece.
- Reafirmar nuestro compromiso con la Campaña Global por la
Reforma Agraria que impulsa Vía Campesina.
- Es fundamental resolver el problema de acceso a la tierra y
recursos financieros, transferencias tecnológicas y asistencia
a los pequeños y medianos productores antes de firmar o avalar
un Tratado de Libre Comercio con la potencia más grande de la
Tierra como son los Estados Unidos.
- Denunciar cómo, a través de la excusa de la promoción turística
nuestros gobiernos facilitan a las grandes extensiones de
tierra que compren a pequeños productores necesitados de
comida, adueñándose y privatizando riveras de lagos, ríos y
costas.
- Marchar por la vida por una nueva Ley de Reforma Agraria
Integral, en donde reafirmaremos con nuestro sacrificio, y
disposición de mejorar el nivel de vida del campo, en el cual
se indique la integralidad del proceso, abarcando el
financiamiento, la aplicación de nuevas tecnologías,
diversificación de la producción que facilite el sustento
alimentario a las familias campesinas, y el establecimiento de
canales seguros de comercialización procurando dar valor
agregado a la producción campesina.
- Consolidar un Frente Centroamericano por la Reforma Agraria
Integral en donde rodas las organizaciones rurales nos
dispongamos a realizar acciones conjuntas que nos permitan
avanzar por mejorar el nivel de vida del campo y la producción
de alimentos.
Notas
(1) “Reforma Agraria ¿Ganadores, perdedores o beneficios
compartidos?” Uso de la Tierra y Desarrollo Económico, Bruce
H. Moore, director de la Coalición Internacional para el
Acceso a la Tierra, 29 de noviembre de 2003.
(2) Declaración de principios Conferencia Mundial sobre Reforma
Agraria y Desarrollo Rural, 12 al 20 de julio de 1979.
(3) Movimiento Campesino e Indígena Centroamericano, San Salvador,
4 de marzo de 2004
* Eduardo José Vallecillo Barberena es integrante de la Asociación de
Trabajadores del Campo (ATC) de Nicaragua.