El mundo está siendo transformado a través de las Tecnologías de
Información y Comunicación (TIC). Sin embargo, la promesa que
representaba Internet en tanto que alternativa a la centralización
del poder y en tanto que medio para difundir ampliamente las
oportunidades económicas, ha resultado vaga y ha sido reemplazada
en primer lugar por la marea puntocom y en segundo lugar por la
tendencia actual por la que Internet deba ir unida a intereses
comerciales. Aquella primera visión de la Red como facilitadora de
comunidades; de los aislados; los discapacitados, los excluidos
debido a su situación geográfica, ingresos o características
físicas parece haberse esfumado junto con el intento del sector
público de promover la Red en tanto que herramienta y recurso
para todos, una herramienta democratizadora y que promueva la
igualdad de posibilidades.

La visión de las TIC como medio para lograr una amplia
distribución de los medios de acceso, administración y uso
productivo de la información y comunicación ha sido reemplazada
por esfuerzos destinados a hallar posibilidades cada vez más
efectivas de comercio electrónico global. Facilitar el uso de
dichas tecnologías para lograr beneficios a nivel local
(beneficios económicos, sociales, culturales, de medio ambiente,
cívicos y políticos) requiere de esmerados esfuerzos por parte de
expertos y expertas tecnológicos, investigadores e investigadoras
y profesionales del trabajo comunitario.

"Uso efectivo" en lugar de "brecha digital"

Las TIC en tanto que herramientas de acceso universal van más allá
del debate sobre la brecha digital e implican analizar cómo y en
qué condiciones el acceso a las TIC puede volverse utilizable y
útil. En otras palabras, de qué manera puede obtenerse un "uso
efectivo" a través de las varias comunidades y poblaciones
excluidas. El objetivo a perseguir es el desarrollo de estrategias
y aplicaciones para el uso de las TIC en apoyo al desarrollo
económico, la justicia social y el fortalecimiento político;
además de garantizar el acceso local a los servicios sanitarios y
de educación; favorecer el control local de la producción y
distribución de información y garantizar la supervivencia y
vitalidad de las culturas aborígenes.

El acceso simple a Internet y a otras TIC no basta para mejorar de
manera significativa las probabilidades de vida de las poblaciones
que se encuentran en riesgo a causa de los rápidos cambios
tecnológicos. La exclusiva atención que los organismos de
desarrollo dan a la brecha digital -es decir, a las cuestiones de
"acceso"-mientras que ignoran los esfuerzos comunitarios
tendientes a lograr el "uso efectivo" de las TIC sugiere que la
mayoría de los programas sobre la BD son poco más que subsidios de
marketing disfrazados destinados a proveedores de servicio e
infraestructura, más que esfuerzos por distribuir de mejor manera
los beneficios y oportunidades reales resultantes de las TIC.

Mientras que se ha invertido gran cantidad de recursos de
desarrollo en la creación de infraestructura y puntos de acceso a
las TIC (telecentros locales), pocas de estas iniciativas han
estado dirigidas a expandir las capacidades locales para el
desarrollo, el aprovechamiento y mantenimiento de las TIC. Además,
el tipo de desarrollos de TIC que permitirían una participación
eficaz por parte de las comunidades locales en los procesos de
toma de decisiones regionales, nacionales e internacionales
(representación electrónica) son en su mayoría ignorados en favor
del diseño e implementación de un servicio más eficaz y
centralizado, incluso si a veces están mejorado en términos de
electrónica (gobierno electrónico).

Las comunidades locales

La concepción de las TIC como medio de apoyo al fortalecimiento
local sigue avanzando, en parte a través de una variedad de
iniciativas de TIC comunitarias tales como el acceso público a los
telecentros, las redes comunitarias y los programas comunitarios
sobre informática y de las iniciativas comunitarias, muchas veces
autogestionadas, de salud, cultura y participación electrónicas.
Dichas actividades, que suelen estar combinadas con el uso de
software libre, ceden el control de la distribución e
implementación de las TIC a manos locales y brinda herramientas
para adaptar las capacidades de suministro de servicio, de
productividad y comercialización de las TIC a las necesidades y
recursos locales.

De esta manera las comunidades locales tienen la oportunidad de
establecer vínculos de base (entre pares) en el ámbito regional,
nacional e internacional con el fin de propiciar el intercambio de
información, el desarrollo de iniciativas de colaboración
políticas y económicas y de afianzar los lazos familiares y
comunitarios en épocas en que prevalecen las migraciones inducidas
por factores económicos. Además brinda a las comunidades la
posibilidad de participar activamente como beneficiarios y/o
contribuyentes a las amplias y cambiantes estructuras de
innovación nacional e internacional.

Redes comunitarias

Una red comunitaria es un sistema de información y comunicación
del ámbito local, administrado localmente. El trabajo en red
comunitario (también llamado trabajo en red cívico o ciudadano)
según se lo practica en miles de proyectos comunitarios de TIC en
gran número de países, combina un sentido de la geografía local y
de los contextos electrónicos junto con la interacción, la cual
ocurre cuando la gente y las organizaciones trabajan juntas en el
ámbito local para solucionar dificultades y crear oportunidades,
apoyados por sistemas de TIC adecuados. El trabajo informático
comunitario ayuda a brindar estrategias tecnológicas y
sociotécnicas destinadas a facilitar los procesos comunitarios y a
alcanzar objetivos comunitarios.

Lo que caracteriza un abordaje de tipo informático comunitario/de
trabajo de red comunitario(CN/CI) a la computación pública es el
compromiso público a la universalidad de oportunidades propiciadas
por la tecnología que incluya a las personas en desventaja; un
reconocimiento hacia el hecho de que la "vivencia de una comunidad
física" es primordial al bienestar individual y familiar
(bienestar económico, político y cultural); la creencia de que
dicha comunidad viviente puede ser mejorada a través de un uso
sensato de las TIC; la comprensión acabada de las tecnologías de
información desde el punto de vista del usuario; un liderazgo
social práctico, el emprendimiento y la creatividad. Además,
CN/CI puede brindar una estrategia para el diseño de hardware y
software comunitario y de colaboración alternativos, que tal vez
sea más adecuado para el "otro 90%" de la población mundial; para
ellos, poseer una computadora personal es poco probabble debido a
limitaciones de infraestructura, financieras y sociales.

De loccal a mundial

Las comunidades locales, y aquellas que se insertan dentro de
éstas, que tienen intereses específicos adquieren mayor fuerza a
través del acceso a otras comunidades con intereses similares a
través de comunidades electrónicas virtuales. Dichas "comunidades
de intereses/comunidades de práctica" reúnen a quienes tienen
intereses similares en redes mundiales, con el fin de facilitar la
creación del conocimiento, el intercambio de recursos, información
y apoyo mutuos. Si bien dichas comunidades virtuales pueden ser
utilizadas con fines no deseados, el vínculo entre las TIC
comunitarias y las comunidades virtuales externas puede resultar
muy alentador, como por ejemplo en campañas por la justicia social
o del medio ambiente.

Por otra parte está el tema de la "sostenibilidad" de dichos
esfuerzos una vez que se carece del apoyo inicial (generalmente
externo). En este contexto, el uso de las TIC es abordado como
algo optativo –un "lujo" que debe estar constantemente financiado
por recursos locales que suelen escasear. Sin embargo, a medida
que las TIC del ámbito local se transforman en un elemento
integral de la producción local, de la entrega del servicio y de
un sistema que reporte beneficios (tanto sociales como
económicos), la "sostenibilidad" desaparece en tanto que
problemática y las TIC pasan a ser consideradas como un bien
social necesario. ya que el desarrollo de medios para un uso
efectivo de las TIC en la creación de riquezas locales, la
educación continua, el desarrollo cultural local y la seguridad
local quedan extremadamente relegadas por la simple provisión de
acceso.

Es necesario lograr que los beneficios productivos de las TIC, que
en la actualidad están en auge en el sector privado y en el mundo
desarrollado (a través de aumentos, muchas veces considerables, en
eficacia, productividad, rapidez de respuesta y eliminación de
intermediarios), sean accesibles a quienes cuentan con recursos
limitados e infraestructuras deficientes. De la misma manera, la
atención de quienes gestionan las políticas, de los diseñadores de
tecnología y de quienes las implementan (desarrolladores y
desarrolladoras de hardware y software, consultores y consultoras,
estudiosos y estudiosas e inversores) debe ser reconducida no sólo
hacia las aplicaciones del sector privado y empresarial sino
también hacia las comunidades de bajos ingresos, hacia quienes
están marginados, las pequeñas y micro empresas, todos quienes
quedan al margen de la revolución tecnológica y cuyas necesidades
pasan inadvertidas y no son tenidas en cuenta.

Y el futuro

En la actualidad están surgiendo otras oportunidades para
comunidades locales a través del aumento generalizado de capacidad
técnica en comunicaciones virtuales posibilitadas por las
tecmnologías de banda ancha. Esta tecnología (e incluso hace muy
poco la tecnología inalámbrica o WiFi) necesitan del acceso a
recursos para la sociedad civil local (por ejemplo, derecho de
paso). A través del emergente modelo de negocios basado en la
adición de la demanda pública creada en el sector público la
consolidación de la demanda local y centrado en el sector público
como principal usuario, representa nuevas y significativas
oportunidades para el desarrollo local si se instauran marcos de
políticas adecuados. La tecnología de banda ancha tal vez pueda
poner a disposición de las autoridades cívicas una serie de
recursos, tanto financieros como técnicos, para poder emprender
iniciativas de desarrollo social, económico y tecnológico locales.
En países en vías de desarrollo la tecnología inalámbrica a bajo
costo brinda una posibilidad para superar las limitaciones de una
infraestructura de telecomunicaciones no adecuada, la cual es
costosa en términos de desarrollo y mantenimiento.

Conclusión

Hoy, más que nunca, es necesario que quienes trabajan por los
bienes públicos luchen por intervenir y garantizar que las
oportunidades representadas por las TIC sean disponibles para así
ampliar las posibilidades de las comunidades locales; de la misma
manera que trabajan para enriquecer el número y diversidad de
servicios al consumidor y su eficacia corporativa. Este es, tal
vez, el objetivo público número uno de la década por venir. Una
amplia disponibilidad de acceso a Internet es sólo el comienzo.
Posibilitar el uso de estas tecnologías para lograr beneficios en
el ámbito local (económico, social, cultural y político) para
sentar las bases de comunidades locales requerirá de esfuerzos
conjuntos de profesionales de la tecnología, investigadores e
investigadoras y profesionales comunitarios y por sobre todas las
cosas, la voluntad política necesaria para que todo esto sea
llevado a cabo.

Los procesos concernientes a la CMSI y sus resultados, se verán
fortalecidos de incluirse a quienes trabajan con iniciativas de
TIC comunitarias y de base y si se los integra como partes
necesarias al proceso de la cumbre y en el trabajo de dirección de
proyectos y de creación de recursos posteriores a la cumbre,
dedicados a posibilitar la continuidad de las iniciativas de
tecnología orientadas a la comunidad y a la sociedad civil ya
existentes, como parte integral en la creación de una Sociedad de
la Información abarcadora e inclusiva.

Recursos

M. Gurstein (Ed.) Community Informatics: Enabling Communities with
Information and Communications Technologies, Idea Group, 2000; L.
Keeble & B, Loader (Eds.) Community Informatics: Shaping Computer-
Mediated Social Networks, Routledge, 2001; S. Marshall, Wal Taylor
& Xinghou Yu, (Eds.) Proceedings of the IT in Regional Areas
Conference: Using Informatics to Transform Regions 2002; and D.
Schuler, New Community Networks: Wired For Change, Addison Wesley
Publishing, Co. 1996; Global Community Partnership:
www.globalcnpartnership.org quienes generalmente presentan estos
temas. Listas electrónicas bytesforall_readers@yahoogroups.com;
Telecentres@lyris.idrc.ca y
Communityinformatics@vancouvercommunity.net

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El presente es un documento temático de la Campaña CRIS escrito
por Michael Gurstein. Los documentos temáticos apuntan a iniciar
el debate sobre temas relacionados con la CMSI. Visita nuestro
sitio Web www.crisinfo.org. Esta información puede ser reproducida
libremente mencionando su procedencia y autoría. Traducido del
Ingles por Ana Verona.

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CRIS issue paper 2.0e