Seminario Comunicación para el ejercicio de la ciudadanía
Voces de Alarma
Se escuchan voces de preocupación, de extrema preocupación. Sus
dueños son intelectuales, politólogos, sociólogos, políticos en
ejercicio de responsabilidades de Estado y otros que alguna vez las
tuvieron.
Todos claman porque se encuentre cuanto antes una luz capaz de
alumbrar un nuevo tiempo menos cruento, más humano. Sin tanto horror,
sin tanta irracionalidad. Son voces que, en diferentes escalas y
también no siempre en idénticas circunstancias, han forjado, recreado
y disfrutado la sociedad capitalista.
Sin embargo, el capitalismo, ahora liderado a punta de misil por
Estados Unidos, empuja a la humanidad toda -con sus capitalistas y con
quienes no lo son, ni lo quieren ser- al precipicio. Al abismo. Hacia
el final del juego.
Ya hay quienes se animan a sostener, desde las mismísimas
entrañas del imperio, que se ha iniciado "el principio del fin" de
éste. Así se atreve Saskia Sassen, socióloga, docente de la
Universidad de Chicago y de la London School of Economics, firmante -
entre otros- del documento con que un grupo de intelectuales hizo
pública su rotunda negativa a apoyar la política exterior de la
administración Bush. Decía Sassen hace unos pocos días al diario
Clarín de la Argentina, en entrevista realizada por el periodista
Oscar Raúl Cardoso, que "el gobierno de Estados Unidos está trabajando
muy duro para hacer del mundo un lugar menos seguro para todos".
Y hay quienes, como el ex presidente de España, Felipe González,
reclaman "por favor" recuperar prioridades, "recuperar la
gobernabilidad", denunciando la gravedad de una crisis política de
gran magnitud. Crisis que, como sabemos, no se remite tan solo a lo
político, dado que según prestigiosas publicaciones del mundo
capitalista como The Economist, auguran para finales de 2003 deflación
y caídas de precios en Estados Unidos, Europa y Japón, lo que se
sumaría a otras perlas de la época como la caída de la tasa de
ganancia, quiebras de compañías gigantescas sostenidas sobre
contabilidades mentirosas, destrucción de cientos de miles de puestos
de trabajo, incremento de la tasa de pobres e indigentes.
El fracaso del capitalismo se expone en una inacabable sucesión
de miserias. Y el desesperado intento de Estados Unidos por guardar la
basura debajo de la manta se verifica cada vez que desde Washington se
oprime el botón de la maquinaria bélica.
Se alzan voces, decíamos, que exigen no dejar que el mundo se
transforme en un fabuloso polígono de tiro, donde Estados Unidos y sus
aliados más consecuentes y tan criminales como el puntero
exterminador, hagan blanco procurando saciar su sed de petróleo y de
otros recursos naturales; así como la lujuriosa vida de unos pocos. La
vida de los dueños del dinero.
Voces que advierten, como la del escritor norteamericano Norman
Mailer, cuando afirma que "Después del 11 de septiembre, la nueva
mayoría no pudo contemplar el hecho de que tal vez Bush no debería ni
siquiera estar en la Casa Blanca. Había que salvar el país. Los
norteamericanos habíamos despertado al horror de saber que nos odian
tanto que hay gente capaz no sólo de destruirnos sino también de
inmolarse".
Voces que claman, reclaman, piden, denuncian, exigen. Voces
múltiples que quizás sin proponérselo del todo saltan los márgenes de
una ideología intrínsecamente injusta. Voces que hacen de la
comunicación en resistencia una espiral creciente, confirmándonos en
nuestras viejas y cada día más jóvenes convicciones. Demostrándonos –
por si alguno de nosotros lo necesitara- que la lucha no ha sido ni
será en vano.
* Juan Carlos Camaño, Secretario General de la FELPA
Forum Social Mundial 2003. Eje temático número 3.
Medios, Cultura y Contra-hegemonía 24-27 de enero de 2003, Porto Alegre
Seminario organizado por Observatorio Político, Social y Cultural de Medios, Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires