CAÑAR-ECUADOR: Una agresión premeditada

2001-06-04 00:00:00

Bajo la conducción de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador,
CONAIE, desde el 13 de los corrientes nos encontrábamos participando en la
"Movilización por la Vida" para que con estas acciones el gobierno nacional se
sensibilice y derogue la Ley de Desarrollo Agrario impuesta por el
socialcristianismo, que viene a empeorar las condiciones pauperizadas del pueblo
indígena, de campesinos y del pueblo en general. Además hemos planteado la
creación de partidas docentes para impulsar la educación intercultural bilingüe,
rechazo a las privatizaciones de las áreas estratégicas, solución a los conflictos de
tierras y rechazo a la persecución y represión a los dirigentes indígenas y populares.
Es decir, nunca estuvimos en contra de los pobladores urbanos ni de los mestizos.

Con el propósito indicado el Movimiento Indígena del Cañar, como nunca antes en la
historia de nuestro proceso organizativo, que lleva ya tres décadas, centramos
nuestro accionar exclusivamente en el bloqueo pacífico de la Panamericana y otras
vías y no realizamos ni una sola marcha por el centro urbano como hemos realizado
usualmente en otras ocasiones. Por tanto, no hubo ni siquiera un germen de
provocación a los pobladores urbanos.

Así, públicamente hicimos conocer que nuestra lucha era contra el sistema
deshumanizante más no contra los pobladores urbanos como se pretende
desinformar a la ciudadanía. Pero nuestra sorpresa cuando desadaptados sociales y
criminales que en su mayoría fueron militantes del socialcristianismo y de los
partidos de gobierno, encabezaron un acto de vandalismo, demostrando que aún en
los albores del tercer milenio, los llamados civilizados y vestidos de terno, masacran
a las gente indígena, disparando a mansalva con armas de todo calibre que no son
permitidas por la ley, otros portando palos, piedras y cañones de construcción
casera. Este acto cobró la vida del compañero Manual Mesías Yupa Yupa quien fue
impactado en la cabeza por los proyectiles que fueron disparados; los compañeros
Serafín Allaucu, Marí Andrea Tamay y el niño Belisario Yupa, se encuentran
desaparecidos y otras treinta y cinco compañeros entre hombres, mujeres y niños
están heridos.

No conformes con esto procedieron a destruir, saquear e incendiar la casa campesina
Ñucanchi Huasi y la iglesia San Clemente, la Dirección Provincial de Educación
Intercultural Bilingüe y tres vehículos que eran de propiedad de la Organización
Indígena Provincial, además de la destrucción de dos vehículos de propiedad de la
comunidad de Huayrapungo.

El edificio de la Ñucanchi Huasi estuvo completamente equipado para el
funcionamiento de un Centro Cultural de investigación socio-cultural y educativa
con proyección andina, existían talleres, equipos de todo tipo, hospederías, bodegas,
etc.

Estamos convencidos más bien de que nuestra capacidad autogestionaria fue la
principal provocación, porque entramos a competir en el mercado y a evitar la
especulación que siempre han generado los de siempre.

Se ha dicho al país, en información unilateral, mil infamias en contra del pueblo
indígena del Cañar, para justificar las atrocidades que cometieron minúsculos grupos
que ya hemos señalado. Nosotros decimos a los ecuatorianos que no hubo de nuestra
parte ningún acto de provocación. La prueba más fehaciente es nuestra historia de
lucha. A lo largo de este proceso jamás ha existido esa intención, por ello más bien
hemos marchado muchas veces juntos con los sectores populares de Cañar y hemos
recibido solidaridad, tal como recibimos, también esta vez, de la gran mayoría de los
pobladores urbanos de Cañar. Esto desdice que fue un "tumulto" el que atacó a los
indígenas y a su sede social. Fue un grupo minúsculo que se les puede contar sin
sacar el aire en los pulmones. Nosotros sí sabemos "quien puso la primera chispa".
Este grupo planificó fríamente el ataque criminal y racista a los indígenas.

Un ataque planificado

¿Por qué estamos convencidos de que todo fue planificado?

Fue planificado porque no hubo provocación de nuestra parte. Se habló originalmente
de saqueos, de destrucción de ventanales y más infamias como hechos consumados
aduciendo que esto provocó una reacción "instintiva" de ese grupo. Invitamos a los
medios de comunicación serios para que verifiquen y recojan testimonios y digan
qué almacén o tienda saquearon los indígenas, qué cosas se sustrajeron, en dónde y
de quién eran esos comercios supuestamente saqueados. Este pequeño grupo, a
través de sus voceros que los medios de comunicación conocen bien quienes son, ha
manifestado que reaccionaron en defensa de una "humilde mujer que vendía unos tres
atados de verduras". Desde cuándo las oligarquías locales están preocupados por los
humildes, si ellos han sido los que han abusado toda la vida a esas "humildes
mujeres"?

Fue planificado porque el ataque comenzó con el sonido de una sirena; porque hubo
grupos perfectamente organizados: para quemar, saquear y destruir la casa campesina
y para impedir el acceso a la ciudad a los indígenas que deseaban realizar sus
actividades particulares en el centro poblado, inclusive los que realizaban la
tradicional novena y más celebraciones religiosas propias del mes de junio fueron
atacados.

Fue planificado porque todos estos grupos estaban fuertemente armados con armas
de todo calibre, con cohetes y lanzacohetes, con cañones caseros y, lo insólito,
?hasta con bombas lacrimógenas!; fue planificado porque hubo una incitación a través
de una de las radios locales, mientras que la otra fue silenciada ¿Por qué? Estamos
seguro que ésta no estuvo en el complot. Sería bueno que AER investigue las causas
por las que se fue del aire la Radio la Voz de Ingapirca. No actuó con celeridad el
Cuerpo de Bomberos, a pesar de las desesperadas gestiones y llamadas telefónicas
que hicimos, sólo cuando empezó a quemar la iglesia se hicieron presentes.

Fue planificado porque se dio un trato discriminatorio a los indígenas en el hospital;
porque las autoridades locales no movieron un dedo para impedir el acto criminal;
porque se inventaron la infamia de que habíamos envenenado el agua para lograr un
respaldo momentáneo de la gran mayoría de la población y armaron una tragicomedia
en la cual forzaron a un grupo de indígenas con pistola en mano para que cada uno
tomara un galón de agua. Esta mentira fue desmentida porque nadie que tomó el agua
murió y por los análisis de laboratorio que ellos mismos hicieron; en fin porque se
adelantaron a desinformar al país... Cree Ud. con todo esto que fue una reacción
"instintiva" como se pretende desinformar a la ciudadanía?

A luchar juntos

Con todos estos hechos los indios ya sabemos lo que significaría para nosotros y
para el pueblo ecuatoriano en general, la continuidad de un gobierno socialcristiano.
Se pretende importar el apartheid del sufrido pueblo sudafricano que se deshizo de él
luego de años de lucha, para implantar en el Ecuador como estrategia de
gobernabilidad. Hemos encontrado la prueba de la incapacidad de las clase política
tradicional para generar alternativas de cambio social contundentes y convincentes.
Hemos descubierto una mentalidad colonizante en la orientación política de nuestro
país. Las excepciones son más bien personas que se pueden contar con el dedo. La
mayoría de ecuatorianos nos hemos dado cuenta ya de todo esto por eso no vamos a
caer en la trampa tendida por los socialcristianos. Seguro nos vamos a dar las manos
y luchar juntos.

Invitamos a los que defienden la vida y los derechos humanos, a los medios de
comunicación serios y responsables, a las organizaciones populares, a las ONGs para
que visiten Cañar y se enteren de la misma fuente la verdad de los hechos. Los indios
tenemos la frente limpia, siempre altiva para defender lo que somos como entidad
social y cultural específica. Por ello, no hemos escondido ni hemos distorcionado
los hechos. Tampoco nos hemos dejado vencer por el desaliento. Al contrario,
nuestra lucha seguirá siempre firme hasta conseguir nuestros anhelos que son a la
vez, de la gran mayoría del pueblo ecuatoriano. Por ello hacemos un llamado de
solidaridad para la reconstrucción de nuestra casa, para que ésta siga prestando sus
servicios a todo el pueblo.

Unión Provincial de Comunas y Cooperativas del Cañar (UPCCC)