Colombia: Que la Verdad y la Reforma Agraria Popular den Respuesta al Gobierno

2005-10-19 00:00:00

Las Organizaciones Indígenas respondemos a las declaraciones del Gobernador Chaux y del Ministro de Agricultura en las que, contrario a la verdad, acusan a las victimas indígenas, campesinas y populares, del despojo de tierras de ser quienes causan este despojo. La verdad habla por si mima: aqui estan los hechos.

Los que nos despojan de la Tierra y la matan, nos acusan desde el Gobierno de su crimen. Por eso preguntamos:

¿Cuántas hectáreas por persona poseen el Presidente Uribe, el Gobernador Chaux y los grandes terratenientes en Colombia?

¿Cuántas hectáreas tenemos en promedio por persona los indígenas, campesinos y afro colombianos?

¿Qué proporción de las tierras de grandes terratenientes es apropiada para la agricultura comparada con las de los pueblos indígenas, campesinos y afro colombianos?

¿Cual es la tendencia de la tenencia de la tierra en Colombia, en particular durante el Gobierno Uribe y quienes se benefician y perjudican de la concentración en la tenencia de la tierra?

¿Por qué medios, quienes y con qué fines nos vienen despojando a los indígenas, campesinos y afro colombianos de las tierras?

¿Que relación existe entre la guerra, el despojo legal y económico y los intereses corporativos y personales promovidos desde el estado y el Gobierno?

Las respuestas a estas preguntas contienen verdades que invalidan, a la vez que ponen en evidencia las intenciones malsanas que motivan las declaraciones recientes del Ministro de Agricultura y el Gobernador del Cauca contra los pueblos indígenas del Cauca acusándonos de concentrar tierras y de amenazar con ello los derechos de campesinos y afro colombianos, cuando la realidad demuestra que los culpables, otra vez, acusan a las victimas. Por eso también preguntamos:

¿Quienes pueden y deben hacer la Reforma Agraria con justicia que requiere Colombia?

INVITAMOS A LA OPINIÓN PÚBLICA A RESPONDER CON NOSOTROS ESTOS INTERROGANTES Y LES INFORMAMOS QUE:

1- Los indígenas tenemos título (lo cual no significa posesión porque en la selva y en el resguardo U'wa hay tierras en manos de colonos que no han sido "saneadas") sobre el 27 % (no el 30%) del territorio colombiano, pero, la mayoría del territorio indígena legalmente reconocido está en la selva amazónica (el 67%) en zonas de caza, recolección y horticultura itinerante donde no puede haber sino -como en el caso de los Nukak- una familia en mil hectáreas a riesgo de destruir la selva; en la selva del Pacífico (un millón de hectáreas de selva) y el desierto guajiro (un millón de hectáreas). No están entonces la mayoría de estas tierras en la zona andina: el Cauca, Nariño, Tolima, Córdoba o Caldas donde hay gran cantidad de indígenas viviendo en minifundios. Gran parte de los resguardos del Cauca y Nariño están en tierras no aptas para la agricultura ni la ganadería; incluso en nevados.

2- Los censos agropecuarios del DANE muestran QUE LOS GRANDES USUFRUCTUARIOS (LOS DUEÑOS DE LAS MAS GRANDES HACIENDAS QUE CONCENTRAN LA PROPIEDAD DE LA TIERRA) SON APENAS EL 0,4 %, ES DECIR SOLAMENTE 15 MIL PERSONAS (UNA DE LAS CUALES ES EL PRESIDENTE URIBE) DISPONEN DEL 50 % DE LA TIERRA ÚTIL PARA LABORES AGROPECUARIAS EN COLOMBIA.

3- Mientras que LAS PEQUEÑAS EXPLOTACIONES -QUE INCLUYEN A LOS INDÍGENAS Y CAMPESINOS DEL CAUCA - SOLAMENTE TENEMOS EL 14% DE TIERRA DIPONIBLE y sin embargo tenemos sembrada el 43% del área y producimos el 60% de los alimentos.

4- Dada esta realidad, la mayoría de los grandes propietarios son un obstáculo a la soberanía alimentaria y el bienestar del país, pues solamente les interesa la especulación con los precios de la tierra.

5- El estado solamente ha adquirido 200 mil hectáreas para indígenas en 44 años porque el resto de los resguardos existentes eran selva amazónica o del Pacífico, sabanas naturales del llano y desiertos ya ocupados inmemorialmente por los pueblos originarios refugiados allí, o resguardos coloniales aun ocupados por resistencia de siglos.

6- El Presidente Uribe ha mostrado que es un enemigo de los indios, de los afro colombianos y de los campesinos: Acabó con el INCORA (entre otras políticas del agro que hablan por si mismas) y estableció el Incoder dejándolo solamente con el 20 % del presupuesto que tenía el INCORA para comprar tierras indígenas. Aunque el INCORA ya tenía poco presupuesto, al crear el Incoder y dejarlo sin presupuesto, asfixia al agro y a la reforma agraria. El Incoder tampoco dispone de dinero para sanear los resguardos del Pacífico, Orinoquía y Amazonia, por lo que las cifras de hectáreas que aparecen registradas a los indígenas no se corresponden con la realidad territorial, a la vez que llegan más y más colonos que han huido de las zonas fumigadas con glifosato, asentándose en resguardos a costa del territorio indígena. Nada tiene el Incoder para solucionar este problema. El Incoder tampoco tiene recursos para responder a los campesinos por lo que vemos a miles en la recuperación de tierras en el Cauca. Hace apenas dos meses en cumplimiento de los compromisos del gobierno en Ralito el Incoder expidió la absurda resolución 1516 que desconoce los derechos fundamentales de las comunidades afro colombianas para someterlas a contratos impuestos por la fuerza de grupos armados ilegales.

7- Así indígenas, campesinos, negros, somos victimas de las políticas del Gobierno que nos despojan de tierras y luego de robarnos y desterrarnos, le mienten a la opinión publica y promueven un conflicto entre los indígenas, campesinos y negros despojados por los grandes terratenientes en el poder, en cabeza del propio Presidente y del Gobernador Chaux. Porque conocemos este engaño, estamos unidos en la lucha por liberar la madre tierra del saqueo y la especulación que ahora, con las leyes forestal y de aguas quieren profundizar al conceder bosques y aguas, al igual que los paramos, los parques y el subsuelo a la explotación de multinacionales como mercancías. La firma del TLC y de las leyes de protección a la inversión externa y la de “justicia y paz” se suman a esta estrategia integral de despojo de territorios y entrega de tierras a intereses privados. Nuestra unidad camina la palabra: así lo demostramos desde el Mandato del Congreso Indígena y Popular hasta el encuentro interétnico hace apenas una semana: porque nuestras raíces están en los territorios, indígenas, campesinos y afro colombianos somos y seremos solidarios en la lucha por su libertad.

8- El rencor de gobernantes y terratenientes no solo genera despojo, sino que causa crímenes horrendos y profundiza el problema de la tierra. Hoy ese mismo rencor orienta las estrategias de gobernantes. No somos los indígenas, campesinos y afro colombianos los que sentimos ni los que actuamos desde el rencor. Por el contrario, somos y hemos sido sus victimas. La reparación por la masacre de El Nilo es una obligación del estado colombiano consecuencia de una masacre criminal cometida en Diciembre de 1991en la que se demostró la responsabilidad del Gobierno. La reparación en tierras por el incumplimiento de obligaciones, ratificada por los recientes acuerdos con quienes recuperamos temporalmente las haciendas La Emperatriz y Guayabal es un acto de justicia por las injusticias cometidas y una demostración de tolerancia y resistencia por parte de los pueblos afectados. No la pueden negar ni los discursos del Gobernador del Cauca, Dr. Juan José Chaux, que es él mismo un terrateniente como lo es el Presidente Uribe, ni los del Ministro de Agricultura, argumentando tramposamente la posesión de los territorios amazónicos para negar las necesidades apremiantes de los indígenas caucanos. Entendemos que el Dr. Arias hable como lo ha hecho recientemente y cuando ha intentado de manera perversa negar la validez de la Consulta indígena, campesina y popular manifestando a nombre del Gobierno que los indígenas no hemos entendido el TLC y que nos han manipulado fuerzas oscuras. Lo entendemos porque el es hijo del expresidente del poderoso y temible gremio bananero y no sabe ni le interesa saber cuál es la realidad e historia de los pueblos indígenas.

8- El Gobernador Chaux no solo no quiere a los indígenas sino que siempre ha querido despojarnos de nuestros territorios y derechos ancestrales, como cuando quiso destruir los resguardos siendo congresista. Así se lo recordamos y se lo probamos personalmente durante las conversaciones preliminares a la firma del Acta de Cumplimiento de los Acuerdos de El Nilo en Septiembre 13, que el intenta obstaculizar al acusar a los indígenas de ser instigados por terroristas e infiltrados por la insurgencia y al instigar el si a campesinos, afro colombianos, terratenientes y a la opinión publica en general, por todos los medios a su disposición (incluyendo los de comunicación), a unirse contra los indígenas a quienes culpa con mentiras de las carencias de tierras que grandes terratenientes como el, el Gobierno, el Estado y los grandes intereses corporativos han causado a lo largo de la historia. Su rencor contra los indígenas es tan profundo que ni siquiera puede someterse a acuerdos suscritos por el Gobierno Nacional y pone todo su poder y su gobierno al servicio irracional de promover conflictos fratricidas en un país en guerra.

Porque la avaricia y el rencor de los que hacen las políticas de Estado y de Gobierno causan la muerte de los territorios y de los pueblos que somos hijos de la madre tierra,

Porque una tierra encarcelada, dominada, explotada, expropiada y destruida sufre, se muere y no puede garantizar la vida de especies y pueblos en armonía y equilibrio.

Porque Unidos todas y todos Por la Libertad de la Madre Tierra haremos la ¡Reforma Agraria Popular!...

Llamamos a una Gran Cumbre de los pueblos por la Libertad para la Madre Tierra: Reforma Agraria Popular.