Este 24 de marzo nos sumamos a las movilizaciones en Capital y en las 10 provincias donde estamos organizados, acompañando a los organismos históricos de Derechos Humanos por la memoria, la verdad y la justicia.
 
Otro triste aniversario del golpe cívico militar, que siguiendo las orientaciones del imperialismo estadounidense, cortó abruptamente un proceso de construcción social y política que se apoyaba en los intereses populares y se sostenía por la participación y compromiso de las masas de trabajadores argentinos. 
 
Decimos que en esta fecha es importante dar un grito unitario, nunca más podemos permitir que la Alianza entre ejército, burguesía e imperialismo imponga sus intereses a través de tortura, asesinatos, cárcel y muerte. 
 
Afirmamos que la democracia debe profundizarse, debemos caminar desde esta democracia burguesa y republicana a una democracia popular y participativa, entendemos que aún falta mucho para que los derechos humanos sean universales, nos oponemos a la ley antiterrorista y a toda expresión que intente criminalizar y desprestigiar la lucha social y el legítimo derecho a acciones y movilizaciones en el marco de la lucha por justicia e igualdad social, política y económica. 
 
No es posible pensar en un país justo y equitativo mientras la tierra continúe concentrándose en pocas manos y las empresas transnacionales sigan saqueando nuestros bienes naturales y arruinando nuestras aguas y suelos. Megaminería y agronegocios son continuidad del proyecto del imperialismo que se impuso sembrando muerte y terror en la dictadura. Las venas de América Latina continúan sangrando. Sin embargo aires renovados y esperanzadores recorren nuestro continente, de la mano de las luchas de los movimientos sociales, de la resistencia, este 24 de marzo nos encuentra bajo otras condiciones, en las cuales la integración latinoamericana comienza a ser un hecho. Hay entonces nuevas posibilidades de dejar de ocupar el lugar y rol que el imperialismo se obstina en exigirnos. Y solo la lucha de los pueblos puede permitirnos dar ese salto. 
 
Sin embargo, el 24 de marzo debe encontrarnos en un acto unitario, desde donde podemos reafirmar nuestra voz gritando nunca más!. Allí estaremos.
 
 
¡Memoria, verdad y justicia!
 
¡Somos tierra para alimentar a los pueblos! 
 
Movimiento Nacional Campesino indígena 
 
Vía Campesina