En defensa de la vida: No a los transgénicos

2011-06-20 00:00:00

Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas – CAOI
Bolivia, Ecuador, Perú, Colombia, Chile, Argentina
 
La CAOI expresa su preocupación por la pretensión de aprobar el ingreso de organismos genéticamente modificados a Bolivia.
 
La megabiodiversidad de nuestros andes, protegida y desarrollada durante milenios por nuestros pueblos indígenas, no puede ser amenazada, apropiada ni mercantilizada por las corporaciones multinacionales, es una reserva alimentaria estratégica que garantiza la continuidad de la vida y es nuestro legado histórico que compartimos con el mundo.
 
Es la defensa de la vida y de la Madre Tierra la principal razón por la que los pueblos indígenas rechazamos de manera categórica el ingreso de productos transgénicos a nuestros países. Por ello la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas (CAOI) expresa su profunda preocupación por la aprobación, en la Cámara de Diputados de Bolivia, de la Ley de Revolución Productiva, Comunitaria y Agropecuaria que permite el ingreso de organismos genéticamente modificados.
 
Nuestra megabiodiversidad salvará de hambre al mundo. Ya lo hizo la papa en Europa durante la II Guerra Mundial. Un producto propio de los andes que, gracias a los conocimientos y saberes de nuestros pueblos originarios, tiene hoy miles de variedades. La experimentación genética no es algo nuevo, en el ande domesticamos miles de especies animales y vegetales. Pero nunca comercializamos nuestros conocimientos, porque la vida, porque la Madre Tierra, no son mercancías ni pueden ser propiedad privada. Los conocimientos colectivos son bienes colectivos.
 
Bajo el pretexto del desarrollo científico y de la alimentación, no se puede entregar nuestras semillas ancestrales a las corporaciones multinacionales como Monsanto, para que las manipulen, se apropien de ellas y las controlen. El norte utiliza los territorios del sur para sus experimentos genéticos. Y ya está científicamente comprobado que el consumo de transgénicos afecta gravemente la salud. Incluso se ha demostrado que estos son cancerígenos.
 
Desde que nuestros hermanos del Qullasuyu eligieron al primer presidente indígena del continente, la CAOI y sus organizaciones hemos apoyado el proceso boliviano, lo hemos defendido de los afanes desestabilizadores y golpistas internos y externos, porque consideramos que Bolivia es el laboratorio donde se gesta nuestro futuro.
 
Lo defendemos porque sentimos que es un proceso de cambio para poner fin a la dependencia, a la mercantilización de la Madre Tierra, a la vulneración de nuestros derechos, a la marginación histórica de los pueblos indígenas. Por ello le decimos claramente al hermano presidente Evo Morales, a sus ministros y a los integrantes de la Asamblea Legislativa del Estado Plurinacional de Bolivia: ustedes son responsables de un proceso de cambio, no pueden hacer lo contrario y retroceder para reafirmar un sistema mercantilista, depredador y enemigo de la vida.
 
Nos ratificamos en nuestro rechazo rotundo a los transgénicos e instamos al Gobierno y al Parlamento bolivianos a derogar los artículos de la Ley de Revolución Productiva, Comunitaria y Agropecuaria que permiten el ingreso de organismos genéticamente modificados. El futuro de nuestra megabiodiversidad, de la vida, de la Madre Tierra y de las reivindicaciones históricas de los pueblos indígenas, está en sus manos. Esa es su responsabilidad histórica y confiamos en que sabrán actuar en concordancia con ella.
 
 
Junio 20 del 2011.
 
Miguel Palacín Quispe
Coordinador General CAOI