Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas – CAOI
Bolivia, Ecuador, Perú, Colombia, Chile, Argentina
 

Después de más de un año de espera en la agenda del Pleno y pese a las desesperadas maniobras en contra por parte de representantes de Monsanto y del Poder Ejecutivo, el Congreso de la República del Perú aprobó un proyecto de ley que declara una moratoria de diez años para el ingreso al territorio nacional de Organismos Vivos Modificados (OVM) con fines de cultivo, crianza o de cualquier índole de productos transgénicos.
 
El proyecto original señalaba una moratoria de quince años, pero debió negociarse el plazo para lograr la aprobación del proyecto. Se espera ahora que el saliente gobierno de Alan García no observe la norma, tal como hizo con el dictamen de ley de consulta aprobado el año pasado por el Poder Legislativo.
 
En cuanto sea promulgada, esta ley dejará sin efecto el Decreto Supremo 003-2011, emitido el pasado 15 de abril, que aprobó el reglamento "sobre Seguridad de la Biotecnología en el desarrollo de actividades con Organismos Vivos Modificados agropecuarios o forestales y/o sus productos derivados del Ministerio de Agricultura", norma que motivó el rechazo de las organizaciones indígenas y campesinas peruanas, así como de sectores académicos, intelectuales y diversos gremios, que exigieron su inmediata derogatoria.
 
El proyecto aprobado hoy fue sustentado por el presidente de la Comisión Agraria, Aníbal Huerta, quien manifestó que ante el peligro que pueda significar el uso de la biotecnología se debe aprobar una moratoria para cuidar nuestra biodiversidad.
 
Desde diferentes ópticas coincidieron en la defensa de la biodiversidad nacional por nuestra mayor diversidad climática, pero discreparon en el plazo de la moratoria. La norma aprobada establece como autoridad competente del tema al Ministerio del Ambiente. Asimismo, crea una Comisión Técnica de Evaluación y Prevención de Riesgos de uso de OVM, la que en dos años deberá emitir un informe sobre el tema.
 
Servicios en Comunicación Intercultural (Servindi) señaló que “a pesar de la estrepitosa caída del grupo protransgénicos en el Ejecutivo y de la inminente aprobación de la ley en el Congreso, el aprismo intentó burlar el fondo del dictamen: si de quince años, se estaba rebajando a diez años, ¿por qué no lo dejamos en cinco y todos contentos? La propuesta planteada por Jorge del Castillo, Luis Giampietri y Edgar Núñez puso en el ridículo a un partido que se despide del poder sin decoro”, señaló Servindi.