Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas – CAOI
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Villa El Salvador fue el escenario de la presentación del libro “Porvenir de la cultura Quechua en el Perú”, de Rodrigo Montoya Rojas.
 
El Coliseo de Villa El Salvador vivió la tarde de ayer una verdadera fiesta de la identidad indígena. La presentación del libro del doctor Rodrigo Montoya Rojas. Porvenir de la cultura quechua en el Perú. Desde Lima, Villa El Salvador y Puquio, congregó a investigadores, estudiantes, representantes de organizaciones indígenas, jóvenes y población en general.
 
La ceremonia fue un acto de reivindicación y orgullo de la identidad indígena, la cual fue manifestada no solo por los participantes, que dialogaron en quechua y español, sino también por las expresiones artísticas de música y danza, en particular por el fin de fiesta: Atipanakuy-competencia de danzantes de Tijeras de la Asociación de Danzantes de Tijeras de Ayacucho en Villa el Salvador. 
 
Benito Calixto Guzmán, dirigente nacional de la Confederación de Comunidades del Perú Afectadas por la Minería (CONACAMI), llevó el saludo de esta organización y de la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas (CAOI).
 
En su alocución, dijo que “no es fácil para los pueblos indígenas hablar de mestizaje. La nuestra era una civilización que tenía su propio idioma, su cultura, su sistema de autoridades, su justicia, su forma de producción. Fue un proceso interrumpido abruptamente con la invasión europea. No fue un encuentro de dos culturas sino la imposición de un nuevo modelo civilizatorio”.
 
Recordó además que “desde hace más de 500 años nuestra cultura fue reprimida, ignorada, invisibilizada, excluida. Pero seguimos resistiendo, manteniendo en nuestras comunidades nuestras prácticas, nuestros principios, nuestras creencias”.
 
Planteó finalmente que “depende de nosotros mismos que el porvenir de la cultura quechua y de todas nuestras culturas ancestrales no sea la extinción sino su desarrollo autónomo y su fortalecimiento. Si seguimos reivindicando nuestra identidad y ejerciendo nuestros derechos, en las ciudades, en los Andes y en la Amazonía, nuestras culturas florecerán”.
 
Por su parte, Hugo Blanco, indígena quechua, dijo que “si retornamos a la cultura e indígena en general, a la colectividad, el ayllu, a amar y cuidar la Madre Naturaleza, la humanidad seguirá existiendo cada vez más solidaria. En quechua la palabra ñaupaq significa a la vez antiguo y adelante. Ñaupaqman rinanchos significa a la vez debemos ir a adelante y debemos ir a la pasado. Retornando a nuestras raíces garantizaremos la continuidad de la especie”.