La Junta Ejecutiva del Congreso General Kuna a través de este medio desea expresar su indignación, uniendo a la reacción de muchos de nuestra población, que han visto cómo se burlan los miembros de este gobierno, un gobierno que se ha encargado de denigrar, ofender y menospreciar a nuestros pueblos indígenas en los últimos meses.
 
El hecho que la ministra Alma Cortés aparezca vestida de mola y en un evento donde precisamente se recuerda de los atropellos, la humillación que vivió nuestro pueblo por parte del gobierno en la década del 20, es una afrenta a la memoria de los nuestros líderes como Ologindibibbilele, Nele Kantule, Olonibiginya, Susu, entre otros y de nuestro pueblo. A pesar de los 86 años transcurridos los descendientes de los gobernantes de ayer parecen mantener esas políticas de marginación y violación de los derechos de los pueblos indígenas.
 
Estamos conscientes que cada comunidad tiene la potestad de recibir a cualquier invitado o invitada pero no podemos dejar de expresar nuestro sentir, nuestra profunda indignación cuando en estos momentos los gobernantes de turno parecen ignorar nuestra existencia, viola nuestros derechos y negocian detrás de nosotros la integridad de nuestros territorios como si fuera un negocio particular bajo el supuesto desarrollo de nuestros pueblos.
 
Hacemos un llamado a nuestras comunidades, sus dirigentes para que no nos sorprenda en nuestra buena fe, al congraciarnos con aquellas personas como la ministra Alma Cortés. Aquellas personas, entre otros personeros del gobierno de Martinelli que sin importar niños, mujeres y hombres indefensos mandaron a reprimir con saña en el hermano pueblo Ngäbe Bugle recientemente, luego en Pacora y en otras regiones.
 
Asimismo debemos de poner atención a los políticos locales quienes únicamente buscan beneficio propio, y muchas veces son los buscan y crean méritos a los que no tienen ni merecen, ni mucho menos en nuestros territorios como es el caso de la ministra Alma Cortes que lejos de merecer un reconocimiento por nada más bien indigna. Lo ocurrido en la comunidad de Ailigandi, tierra de Ologindibbilele nos debe llamar la atención para que no se desvirtúe momentos y hechos como la Revolución Kuna y mucho menos se ensucie nuestro emblema.
 
 

Que Viva la Revolución Kuna

 
Junta Directiva del Congreso General Kuna
 
23 de febrero de 2011