Alto a la criminalización
En el Día de la No Violencia contra la Mujer, detengamos la represión y el uso de territorios indígenas para guerras ajenas a nuestros pueblos.
Nuestras mujeres indígenas trabajan y luchan cada día junto con nuestros pueblos indígenas. Son las que crearon y defienden la soberanía alimentaria, las que mantienen nuestra identidad desde sus hogares y comunidades, las que cuidan nuestra salud con sus conocimientos ancestrales de medicina tradicional, las que defienden nuestros territorios y la Pachamama de la agresión de las industrias extractivas y los Estados, las que exigen participación y liderazgo. Ellas son víctimas de múltiples formas de violencia: doméstica, social, institucional.
No podemos negar la existencia de violencia en nuestras comunidades, producto de la pérdida de nuestra identidad que reconoce a la mujer como fuente de vida y practica la dualidad y la complementariedad. Debemos trabajar en nuestras organizaciones por erradicar esta lacra, castigada por nuestro Derecho Mayor, lo cual solo será posible si avanzamos en la consolidación de la participación y el acceso de la mujer a los cargos dirigenciales en nuestras comunidades y nuestras organizaciones.
Ellas también son víctimas de la violencia social, expresada en el racismo, en la estigmatización que las relega al papel de empleadas domésticas en las ciudades y las expone a malos tratos y violaciones sexuales, en las altas tasas de analfabetismo, en los menores salarios por igual trabajo con respecto a los hombres. Y demuestran su capacidad y su coraje asumiendo el rol de jefes de familia debido al abandono.
Y son también víctimas de la violencia institucional, cuando son perseguidas y criminalizadas, como tantas mujeres mapuches en Chile; víctimas de violaciones, asesinatos, torturas y desapariciones de ellas y sus padres, hermanos, esposos e hijos en conflictos armados internos, como en Perú y Colombia; víctimas de desplazamientos forzados por la misma razón y por el despojo territorial perpetrado por multinacionales con la complicidad de los Estados.
En el Día de la No Violencia contra la Mujer, la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas, CAOI, saluda el trabajo y el coraje de las mujeres indígenas y llama a seguir luchando para poner fin a la criminalización, la estigmatización, el racismo, la violencia doméstica y toda forma de discriminación y agresión contra ellas. Exige además el respeto a sus derechos reconocidos en legislaciones nacionales e internacionales. Y llama a nuestras organizaciones a trabajar sin tregua por hacer efectiva la participación y el liderazgo de nuestras mujeres indígenas, para con su invalorable aporte seguir trabajando en el logro de nuestros objetivos estratégicos.
Lima, 25 de noviembre de 2009.
Coordinación General CAOI
COORDINADORA ANDINA DE ORGANIZACIONES INDÍGENAS – CAOI
Bolivia, Ecuador, Perú, Colombia, Chile, Argentina