Colombia: Hostigamientos que ponen en riesgo a la comunidad
Normal
0
21
false
false
false
MicrosoftInternetExplorer4
st1\:*{behavior:url(#ieooui) }
/* Style Definitions */
table.MsoNormalTable
{mso-style-name:"Tabla normal";
mso-style-parent:"";
font-size:10.0pt;"Times New Roman";}
Desde la ACIN, insistimos ante la comunidad nacional e internacional para que no nos dejen solos, se solidaricen con esta comunidad y denuncien todos estos hechos que se realizan contra nosotros y contra todos los pueblos que resisten.
La Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca ACIN, denuncia e informa a la opinión pública nacional e internacional, a los organismos humanitarios, ONGs de derechos humanos y comunidad en general, que una vez más nuestras comunidades son víctimas de una guerra que no es nuestra.
Somos nosotros, las comunidades indígenas, campesinas y afrocolombianas las que sufrimos todas las consecuencias de la guerra y la violencia que se refleja en todo el territorio del norte del Cauca. Hechos como los siguientes evidencian una vez más la ocupación a la que estamos sometidos.
- El día 29 de agosto de este año, en la vereda Llano Guabito, Municipio de Corinto, resguardo de López Adentro Corinto, a eso de las 10 de la mañana la guerrilla de las FARC realizó un hostigamiento al Ejército Nacional, lanzando desde la parte alta artefactos explosivos tipo tatucos de fabricación artesanal. Hechos que colocan en riesgo a la población civil, tal como sucedió con las familias de los comuneros: FERNANDO TOVAR, ADOLFO GUASAQUILLO, BETI PILCUE Y JOSÉ DOLORES TENORIO, RAÚL YOINO, LUÍS ALFREDO BALTASAR, MARINA MÉNDEZ, ANA JULIA ANDELA, OLIVERIO LIPON y MIGUEL MEZA, quienes fueron afectados de forma directa debido a que estos artefactos cayeron a menos de 20 metros de sus viviendas.
También estuvieron en riesgo los estudiantes de la Institución Educativa y de la escuela de esa vereda, puesto que transitaban por ese lugar cuando algunos artefactos cayeron cerca de la vía. Al mismo tiempo, la preocupación de las comunidades es grande porque algunos artefactos de estos cayeron en las diferentes parcelas sin hacer explosión y esto se convierte en otro riesgo inminente para las familias, en especial los niños que viven en esta zona.
Lo anterior, se suma a varios hechos de violencia que se siguen presentando en todo el norte del Cauca, como lo ocurrido el día sábado 30 de agosto cuando se evitó una tragedia, por una carga explosiva que había sido abandonada a la orilla de la carretera, que fue desactivada gracias a la información oportuna que dieron las autoridades indígenas de la zona, a las autoridades municipales correspondientes.
Desde la ACIN, insistimos ante la comunidad nacional e internacional para que no nos dejen solos, se solidaricen con esta comunidad y denuncien todos estos hechos que se realizan contra nosotros y contra todos los pueblos que resisten.
Santander de Quilichao, septiembre 4 de 2008