Como parte de las acciones que la Asamblea de los Movimientos Sociales apoya y participa este año en el mundo, se realiza el 28 de junio la Jornada por el Derecho a la Diversidad Sexual.

Esta iniciativa de participación activa, coordinada por el Diálogo Sur-Sur LGBT, abre un espacio para que todos los movimientos y personas comprometidos con cambios de fondo para la construcción de otro mundo afirmen como propio el principio de diversidad sexual, para que expresen su solidaridad con las luchas que llevan adelante las organizaciones de lesbianas, gays, bisexuales y transgéneros, y aquellas que defienden las diversidades en términos más amplios .

Para ello, se sugiere organizar acciones de reflexión y visibilidad en torno a esta causa, así como acompañar, y participar en los actos conmemorativos del Orgullo LGBT que se realizan en muchos países ese día.

De manera destacada, se invita a expresar ideas, testimonios, notas de solidaridad a través del sitio Web . En este espacio virtual quedarán registrados mensajes de escritoras/es, líderes, personalidades y gente del mundo entero. Reunir esta multiplicidad de voces cobra especial relevancia en esta coyuntura, cuando se vive una tensión entre los cambios democráticos orientados a reconocer derechos ciudadanos sin discrimen por orientación sexual, y las tendencias ultra conservadoras y retrógradas que procuran impedir o desmantelar reformas legales e institucionales que amparan esos derechos.

La experiencia y la visión política que están detrás de esta jornada, muestran los avances cualitativos de la Asamblea de los Movimientos Sociales, en cuyos llamamientos anuales, - adoptados en cada Foro Social Mundial-, desde 2002 se incluye el tema. En este año, el llamamiento de Caracas dice "Afirmamos nuestro respeto a la diversidad sexual y a la autonomía de las personas. Respetamos su derecho a tomar libremente decisiones sobre su cuerpo y sexualidad. Rechazamos cualquier forma de discriminación relacionada con las opciones personales y hacemos un llamamiento a impulsar la movilización del 28 de junio por la plena vigencia de la diversidad sexual".

Las organizaciones LGBT intervienen en ese espacio de convergencia de luchas mundiales, con una perspectiva de construcción de igualdad que involucra todos los niveles: se trata de cambios macro en las estructuras e instituciones de la sociedad, junto con transformaciones en la vida cotidiana, en las prácticas del día a día, en todas las acciones y terrenos de la existencia humana. Esta visión de igualdad en un mundo diverso supone la coherencia en las prácticas de todas/os, por eso los desafíos de inclusión interpelan a los propios movimientos, a sus dinámicas, culturas, símbolos internos, al tiempo que amplían el alcance de las propuestas de cambio que éstos ofrecen al mundo.

En este nuevo momento de agendas compartidas, de apropiación mutua de causas e ideas, se espera que la celebración del orgullo LGBT no ocurra ya "en solitario", entre las/os directamente afectados por discriminaciones -que van de lo sutil a lo brutal de los crímenes de odio-, o con una cooptación desde el mercado, sino como una afirmación de la diversidad que concierne a la humanidad toda, que constituye la savia de un mundo diferente.

El 28 de junio, día de conmemoración del orgullo y la libre expresión de la orientación sexual, ha ido ganando un creciente apoyo de diferentes actores y sectores democráticos, y se ha extendido a través del mundo con sus expresiones de acciones creativamente visibles, propuestas de igualdad, autodeterminación y justicia. Con un perfil cada vez más alto, las demandas e iniciativas de la ciudadanía política incluyen la erradicación de todas las formas de discriminación y exclusión, tales como el racismo, el sexismo y un cambio del modelo neoliberal, que multiplica todas las formas de relaciones desiguales.