¡Por un Financiamiento autónomo y soberano!
Uno de los ejes de discusión de la Cumbre de los Pueblos del Sur "Todos los Pueblos, toda la esperanza" giró en torno a la construcción de un nuevo financiamiento autónomo al servicio de los pueblos, frente a los procesos de integración que se están llevando adelante, como el Mercado Común del Sur, MERCOSUR, que a pesar de la nueva coyuntura política regional sigue manteniendo la misma matriz que en lo años 90.
Frente a esta situación se planteó la necesidad de profundizar las medidas que lleven a una genuina igualdad, en contraposición con las asimetrías planteadas desde los gobiernos, acompañado de una verdadera distribución de la riqueza, el respeto por los derechos laborales y migratorios, entre otras cuestiones.
Otro tema que despertó gran interés fue la creación, el pasado 9 de diciembre, del Banco del Sur, integrado por Bolivia, Venezuela, Brasil, Ecuador, Paraguay, Argentina y Uruguay. La concreción del banco abre la posibilidad de pensar una nueva lógica financiera y económica que rompa con la hegemonía imperante. Un banco que esté al servicio de las necesidades y los derechos de los pueblos, basado en tratos igualitarios y justos, frente a la depredación capitalista, que busca por todos los medios incrementar sus ganancias a cualquier costo.
Pero eso dependerá de la fuerza e injerencia que tengan las organizaciones y movimientos sociales en las discusiones sobre como será el banco, qué financiara y con qué fondos lo hará. El debate esta abierto y los gobiernos tienen la obligación de escuchar a los movimientos y sobre todo de encarar un proceso de consulta abierto, transparente y democrático, para no reproducir parámetros de las Instituciones Financieras Internacionales, los cuales venimos denunciando y repudiando por las nefastas consecuencias que han tenido a lo largo de todo nuestro continente.
Desde diferentes sectores se lanzaron mecanismos que permitan tener participación no solo en el banco en sí, sino en los controles ciudadanos. La Plataforma de seguimiento al BNDES, el Banco de Desarrollo de Brasil, llevada adelante por los movimientos brasileños, es una experiencia para tener en cuenta a la hora de decidir qué políticas se pueden implementar.
El proceso de Auditaría integral de la deuda lanzada por el gobierno del Ecuador, también fue tenido en cuenta como una herramienta fundamental en la lucha contra la dominación de la deuda. Permite fortalecer las demandas frente a los gobiernos de la región sobre la necesidad de implementar auditarías participativas de todas las deudas frente a los continuos pagos de las deudas ilegítimas e ilegales.
Los desafíos están planteados en esta oportunidad histórica que tienen los pueblos de América Latina de construir verdaderamente una alternativa sustentable al neoliberalismo. Y en ese camino, los movimientos sociales tienen una gran responsabilidad de estar a la altura de las circunstancias y de avanzar no solo en las resistencias sino en la concreción de alternativas, y el Banco del Sur es una posibilidad que se abre de empezar a hacer posible una nueva arquitectura financiera.