En la Ciudad de Posadas Provincia de Misiones República Argentina, las organizaciones campesinas de los países de la región sur de América, reunidas en esta gran cumbre EXPRESAMOS:

Que los Pueblos del Sur seguimos padeciendo el despojo de las tierras, la migración masiva de los campesinos a las grandes urbes donde forman el cinturón de pobreza, el hambre y problemas de acceso a la alimentación en general, como efecto de los monopolios, monocultivos, y del modelo agroexportador y agroindustrial, sostenido por las corporaciones del capitalismo global.

Y por ello DECLARAMOS:

1- La Reforma Agraria Integral, como parte del proceso de redistribución de la riqueza, la Soberanía Alimentaria, es decir el derecho de los pueblos a decidir el qué, el cómo y el para quién se van a producir los alimentos, y el Poder Popular, como reaseguro para la realización de los dos objetivos anteriores, son los tres ejes fundamentales que las organizaciones campesinas definimos para generar el verdadero cambio de una América Latina libre, donde los pueblos vivan dignamente.

2- Que ningún gobierno puede dejar de tomar en cuenta la Reforma Agraria Integral y la Soberanía Alimentaria como políticas de Estado, puesto que están obligados a respetar la vida, la naturaleza, la diversidad cultural y el derecho a la alimentación.
3- La necesidad de articulación entre las organizaciones campesinas, populares e indígenas para la unidad en la lucha y una verdadera liberación de nuestros pueblos oprimidos.

4- Que las organizaciones sociales del campo y la ciudad emprendan conjuntamente una campaña por la Soberanía Alimentaria que busque asegurar el acceso a la alimentación para el pueblo y denuncie las iniciativas de la FAO que promueven solucionar la crisis alimentaria global con los mismos elementos que la causaron: agricultura industrial, monocultivos de exportación y paquetes tecnológicos no-apropiados (como “el paquete transgénico”).

5- Que es necesario que la legislación agraria, allí donde la haya, sea efectivamente aplicada en la realidad y no sea un simple enunciado de deseos.

6- La urgente recuperación y revalorización de las semillas nativas y de los conocimientos campesinos.

7- La importancia de las acciones de lucha concretas, que son en última instancia el único reaseguro de cumplimiento de los derechos campesinos.

8- Que la Presidente de la República Argentina tome la decisión de no enviar a los seis campesinos paraguayos a su país natal –que actualmente se encuentran detenidos en el penal de Marcos Paz Buenos Aires-, y se dispongan sus liberaciones, atento a que los compañeros campesinos son perseguidos políticos por sus luchas sociales.

9- Que el conflicto del “Campo y el Gobierno” no pone en el tapete la problemática campesina, ni tampoco evidencia el creciente control de las corporaciones sobre el sistema agroalimentario. Tanto las cuatro entidades (SRA, FAA, CRA, Coninagro) como el gobierno son cómplices de la matriz sojera que se ha instalado en Argentina.

10- La necesidad de que el nuevo gobierno paraguayo tienda al desarrollo del sector campesino, respetando este clamor popular que hasta hoy no ha sido escuchado.