Tegucigalpa M.D.C. jueves 12 de noviembre del 2015. Las y los jóvenes campesinos de las diferentes organizaciones decidieron formar el Frente Nacional de Juventud Campesina, Indígena y Afrodescendiente FRENAJUD, con el propósito de formarse para ocupar los espacios que les corresponde como relevos organizacionales.

 

FRENAJUD fue creado el 28 de Octubre del 2009 unos meses después del golpe de Estado.

 

Silma Pérez una de las fundadoras de FRENAJUD manifestó que los jóvenes se vieron en la necesidad de organizarse porque la mayoría andaban desorganizados, así que se reunieron para formar el Frente y se aglutinaron en la Vía Campesina.

 

“Teníamos la necesidad de que se nos escuchara, porque en la mayoría de las organizaciones hay jóvenes pero no son tomados en cuenta, hemos asumido un posicionamiento en las dirigencias regionales, nacionales, formamos parte de patronatos comunitarios, juntas de agua, somos jóvenes dispuestos a luchar por nuestro país, por nuestros derechos, somos capaces” aseguro Pérez.

 

Las y los militantes del FRENAJUD no solo han logrado ser reconocidos entre las organizaciones campesinas sino que trascendieron las fronteras y participan en actividades conjuntas con otras organizaciones juveniles campesinas, indígenas y afrodescendientes.

 

La inserción en la dirigencia del campesinado para FRENAJUD fue un proceso difícil, pero a través de formación, talleres y capacitaciones lograron sobresalir, ya que la mayoría de las organizaciones no los reconocían como salidos de las mismas, aunque mucha de la juventud de la FRENAJUD también milita en las diferentes organizaciones campesinas, por ejemplo Pérez pertenece a la Central de Trabajadores del Campo CNTC, considerando que está siempre ha tenido apertura para las y los jóvenes, sostuvo la dirigenta campesina.

 

Uno de los obstáculos a vencer fue el miedo de las antiguas dirigencias que “piensan que nosotros vamos a quitarles sus puestos”, no los ven como una oportunidad de heredar el legado, algunos dirigentes de antaño “piensan de manera inmadura”, adujo Pérez.

 

La joven campesina describe su vida como “bonita” porque está en un periodo de aprendizaje, cuenta que tienen un proyecto de agricultura en el Sur, sus compañeras de más edad que ella le enseñan cómo realizar las técnicas de trabajos de campo, añadió que “el estar organizada es lo mejor que me ha pasado en la vida”.

 

La mayoría de las y los jóvenes campesinos estudian, unos todos los días aunque es complicado combinar el estudio con el trabajo, pero otros van los fines de semana (a distancia) a los centros educativos.

 

Una ventaja de ejercer liderazgo dentro FRENAJUD según Pérez es que las nuevas generaciones organizadas de campesinos son más conscientes del papel de la mujer en la sociedad, el problema surge cuando las jóvenes se casan con campesinos fuera de la organización, ya que lo primero que hacen es sacarlas de ella.

 

En las juntas directivas tanto regionales como nacionales tratan de mantener la equidad de género.

 

“Hasta ahora no tengo conocimiento de acoso o violencia dentro de la organización, siempre nos respetamos el uno con el otro”, concluyo la campesina.