Encuentro Latinoamericano Con la encíclica Laudato si' defendemos los derechos a la tierra, el territorio y los bosques
Laudato si', es el nombre de la Carta Encíclica del Papa Francisco, en donde llama a la unión de toda la familia humana en la búsqueda de un desarrollo sostenible e integral con una postura crítica frente a la crisis ecológica de esta casa común:“hemos crecido pensando que éramos sus propietarios y dominadores, autorizados a expoliarla”.
En nuestra geografía enfrentamos políticas de destrucción impulsadas por gobiernos y empresas que para concretar sus planes requieren el saqueo del agua, la devastación de nuestros bosques, con planes económicos impuestos como la ganadería extensiva, la minería y demás industrias extractivistas, proyectos petroleros, carreteras, grandes represas hidroeléctricas y la pérdidas de la soberanía alimentaria.
Justificadas como progreso, los proyectos de despojo territorial encuentran el respaldo de leyes que intentan legitimar la devastación y generan impunidad que casi siempre va de la mano de la corrupción, también, cada vez es más frecuente el uso de la violencia, el asesinato de cuidadoras y cuidadores indígenas y comunitarios y la criminalización de las acciones que desde nuestros pueblos hacemos para defender nuestros territorios.
La defensa de la tierra y el territorio desde la autonomía y de la libre determinación de los pueblos originarios en este momento histórico es primordial para la vida digna, la justicia y la lucha de nuestra Madre tierra.
No podemos dejar de ver la realidad de nuestros pueblos que migran y de las mujeres, niñas y ancianas que son parte fundamental de esta defensa de la tierra y del territorio. La violencia cotidiana, estructural e histórica, económica, física, sexual, institucional, psicológica, simbólica, familiar, entre otras violencias nos interpela en nuestras luchas como pueblos originarios; no podemos concebir la defensa de la tierra y de la autonomía de nuestros territorios sin la participación activa y sin las luchas de las mujeres.
Que nuestra iglesia y el Papa Francisco se ocuparan de estos asuntos en la Encíclica Laudato si', Nos hace sentir la unión por una misma preocupación, nos hace sentir la reivindicación de estas demandas.
”Toda pretensión de cuidar y mejorar el mundo supone cambios profundos en «los estilos de vida, los modelos de producción y de consumo, las estructuras consolidadas de poder que rigen hoy la sociedad»
La Encíclica papal es un invalorable aporte moral y político en el que encontramos nuevos argumentos, y renovados ánimos para nuestra justa lucha. La encíclica es una luz para que los Pueblos Indígenas que defendemos la tierra- territorio, los bosques, el agua y los recursos naturales para la humanidad.
Por esta razón la Alianza Mesoamericana de Pueblos y Bosques (AMPB), la Coordinadora Indígena de la Cuenca Amazónica (COICA), el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas, AC, la Red Mexicana de Organizaciones Campesinas Forestales (Red MOCAF) y el Encuentro Mundial de Movimientos Populares convocamos al Encuentro Latinoamericano: Con la encíclica Laudato si' defendemos los derechos a la tierra, el territorio y los bosques.
Más de 100 personas, representantes de pueblos indígenas, de procesos sociales y de comunidades campesinas de 17 países, así como invitados especiales, nos reuniremos en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México; los días 13 y 14 de febrero de 2016, en el marco de la visita del Papa Francisco a esa ciudad.
Objetivos:
*Desde la luz de la encíclica Laudato si', nos encontramos para reflexionar nuestras experiencias como pueblos y comunidades para aportar en la reflexión y acción de la agenda de los pueblos indígenas en latinoamérica, en materia de la defensa de la tierra y el territorio.
*Conocer el alcance de la Carta Encíclica del Papa Francisco para una nueva ética ecológica integral.
*Valorar el aporte de la Carta Encíclica del Papa Francisco para la agenda indígena latinoamericana en materia de bosques, derechos de pueblos indígenas y la defensa de la madre tierra y del territorio.
03 de febrero de 2016; Managua, Nicaragua