Reunidos en Caracas durante los días 24 y 25 de marzo, en el marco del Lanzamiento del Decenio de los Pueblos Afrodescendientes en Venezuela (2014-2025), nosotras y nosotros, miembros de la Articulación Regional Afrodescendiente de las Américas y el Caribe (ARAAC), una organización democrática, progresista y revolucionaria, agradecemos las atenciones y la oportunidad que nos brindó el gobierno Bolivariano bajo la dirección del presidente Nicolás Maduro, para realizar nuestras reflexiones sobre el retroceso que han venido sufriendo millones de afrodescendientes en países que han retornado al neoliberalismo salvaje como Honduras, Brasil, Argentina y Paraguay, pero al mismo tiempo la agudización de la exclusión y los asesinatos de líderes y lideresas afrocolombianos/as desde el gobierno Uribe Vélez y continuado por el actual presidente Santos, donde aún después de haberse firmado un proceso de paz, cada día continúa la violencia contra las comunidades negras, indígenas, campesinas y populares y sus dirigentes, lo que revela la complicidad continua entre los intereses de la burguesía nacional, la clase política y las empresas del gran capital transnacional.

 

En ese sentido, nos urge asumir una posición crítica frente a los estancamientos, retrocesos y frenos a las iniciativas que iniciamos como activistas afrodescendientes desde 2001 con nuestro proyecto político colectivo contra el racismo, mejor conocido como la Declaración y Plan de Acción de Durban Sudáfrica,  de Septiembre,  2001.

 

ARAAC, como organización surgida al calor de una discusión en la ciudad de Caracas, en junio del 2011, destaca entre sus principios: 

 

Luchar abiertamente contra el racismo, la discriminación racial y el exterminio racial a que son sometidos miles afrodescendientes desde el norte al sur de las Américas y del mundo.

 

Fomentar en contextos locales, nacionales, regionales y globales, la aplicación de los principios del decenio afrodescendiente: Justicia, Reconocimiento y Reparaciones en sus diferentes matices.

 

Luchar por una sociedad equitativa, que promueva la de inclusión y la justicia social, étnico-racial, de género y sexualidad, contra el cambio climático que está acabando con nuestro planeta y a favor de la armonía ecológica y espiritual.

 

Condenamos cualquier tipo de intervención de Estados Unidos y algunos países europeos contra la República Bolivariana de Venezuela. Debemos conservar nuestra América Latina y el Caribe como zona de paz donde cerca de trescientos millones de afrodescendientes hemos contribuido para una paz, estable y duradera.

 

Apoyamos las propuestas de diálogos del presidente Maduro con la oposición venezolana para realizar unas elecciones libres y transparentes el próximo 20 de mayo del 2018.

 

¡Nos mantenemos en pie de lucha con la esperanza que nuestras acciones colectivas como red de movimientos afroamericanos van a gestar un mundo mejor!

 

 

Caracas 25 de marzo del 2018.