La paz se construye respetando el Derecho a la Vida de las Mujeres

Bogotá 15 de mayo de 2015. Las Mujeres de la Ruta Pacífica repudiamos los últimos casos de  feminicidios ocurridos en el país: Ana Mercedes Ortega el pasado 13 de abril en Mocoa - Putumayo, su cuerpo fue encontrado en un río, desnudo y con múltiples heridas; Diana Marcela Moya asesinada el viernes 24 de abril en Quibdó-Chocó, quien fue violada y abandonada semidesnuda en una zanja del aeroparque; el crimen de una menor de 14 años aproximadamente el 10 de mayo en el municipio de Acandí – barrio los libertadores - Chocó, la niña fue encontrada atada de pies, manos y amordazada, con señales de tortura e indicios de violación, en esta misma fecha en el municipio del Cairo – Valle del Cauca una mujer con 36 semanas de gestación fue violentada a machete por su compañero sentimental, perdiendo su bebé y su brazo derecho.

Desde las diferentes regionales en las que hace presencia la Ruta Pacífica se tiene conocimiento que van más de 20 mujeres asesinadas Chocó,  19 en Antioquia, 11 en Santander,  10 en Quindío, 8 en Cauca, 4 en Risaralda, 4 Putumayo, 3 en Bolívar y otra gran cantidad alarmante en el resto del país.

En Colombia estamos hablando de construir paz, pero con los derechos violados no es posible; es por ello que solicitamos de manera reiterada al Gobierno Nacional y a las autoridades competentes que se investigue y sancione cada uno de los casos de feminicidios, ya que en su mayoría los procesos se están quedando en la impunidad o los están cerrando sin responsable alguno, además de atribuirlos a crímenes pasionales en contravía de la última sentencia que dictó la Corte Suprema, donde se profirió por primera vez en el país que el homicidio de una mujer no fue un crimen pasional, sino un feminicidio por el hecho de ser mujer. Ni por pasiones, ni por ninguna otra razón las mujeres deben ser privadas de su derecho a la vida, ni los perpetradores de hechos como estos pueden seguir libres.

De igual manera, las mujeres de la Ruta Pacífica exigimos el cumplimiento de la ley 1257 del 2008 que trata de la implementación de las medidas de prevención y atención de las violencias contra la mujer en los ámbitos de trabajo, educación, salud y justicia. Asimismo, hacemos un llamado a la Alta Consejería para la Equidad, al Ministerio Público nacional y departamental, para crear mecanismos que puedan dar una respuesta efectiva, rápida y eficaz a este grave contexto de violación a los derechos de las mujeres.

Forjar un país libre de miedos y violencias contra las mujeres y trabajar por el respeto al Derecho a la Vida debe ser una garantía, no una súplica.

¡Ni una mujer más asesinada en Colombia, ni un caso más en la impunidad!

¡Ni guerra que nos mate, ni paz que nos oprima!