Evo Morales en inauguración de Cumbre de los Pueblos sobre Cambio Climático
Se hicieron cargo
“Si los países industrializados hubieran respetado el Protocolo de Kioto y acordado reducir sustancialmente sus emisiones contaminantes dentro de sus fronteras, esta cumbre no hubiera sido necesaria”, dijo este martes el presidente boliviano Evo Morales en la ceremonia inaugural de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra.
En el estadio boliviano de Tiquipaya, próximo a la ciudad de Cochabamba, Morales señaló: “como la mayoría de los jefes de Estado y de gobierno no escucharon a los pueblos (en la conferencia de ONU sobre cambio climático en Copenhague en diciembre pasado), los movimientos sociales se vieron obligados a reunirse aquí”.
Varios miles de personas de todos los continentes se reunieron en el estadio para presenciar la ceremonia de apertura de la Conferencia Mundial sobre Cambio Climático. Allí hicieron uso de la palabra, entre otros, cinco activistas representantes de movimientos sociales y de cada uno de los continentes, para luego dejar el cierre a Evo Morales. La delegación oficial boliviana estuvo además integrada por el vicepresidente, Álvaro García Linera, y el canciller, David Choquehuanca.
En su exposición, Morales dijo que “la causa principal de la destrucción del planeta Tierra es el capitalismo”, y agregó que “como pueblos que habitamos y respetamos esta Madre Tierra, tenemos el derecho, la ética y moral para decir que el enemigo central de la Madre Tierra es el capitalismo”.
El presidente explicó que el sistema capitalista busca la obtención de la máxima ganancia posible, promoviendo un crecimiento sin límites, y que es la fuente de las asimetrías y desequilibrios del mundo: más de 2.800 millones de personas viven con menos de dos dólares al día. “Mientras no cambiemos el sistema capitalista, las medidas que adoptemos tendrán un carácter limitado y precario”, enfatizó.
El mandatario de Bolivia manifestó que la conferencia de Copenhague fue un triunfo de los pueblos y un fracaso de los gobiernos desarrollados, que no se comprometieron con reducciones de emisiones sustanciales.
Según informa la Comisión Europea, aseguró Morales, las ofertas de reducción de gases de efecto invernadero que han hecho los países desarrollados bajo el mal llamado Entendimiento de Copenhague son en realidad de apenas el 2 por ciento, tomando en cuenta los niveles de emisiones de 1990. “Si se estabiliza el incremento de la temperatura en dos grados, como lo plantea el Entendimiento de Copenhague, se reducirá la producción de alimentos en el mundo en un 40 por ciento aproximadamente”, advirtió.
Morales espera que los resultados de la Cumbre de los Pueblos sobre Cambio Climático sean tenidos en cuenta en la conferencia oficial de Naciones Unidas en Cancún, México, en diciembre de este año. Y enfatizó que es necesario “gestar un gran movimiento continental o intercontinental, que lleve ante la justicia internacional a los países que no cumplan con sus obligaciones de reducción de emisiones y sigan arruinando a la Madre Tierra”.