Porto Alegre, Brasil II Foro Social Mundial
Tribunal Internacional de los Pueblos sobre la Deuda
Los días 1 y 2 de febrero, en el marco del II FSM, se
celebró el Tribunal Internacional de los Pueblos sobre la
Deuda. Aquí su Veredicto.
Los integrantes del jurado del Tribunal Popular de la Deuda
deciden, por unanimidad que:
1. La Deuda Externa de los Países del Sur, por haber sido
constituida fuera de los marcos legales nacionales e
internacionales, y sin consulta a la sociedad, por haber
favorecido casi exclusivamente las élites en detrimento de
la mayoría de la población, y por herir la soberanía
nacional, es ilegítima, injusta e insustentable ética,
jurídica y políticamente.
2. Los acusados, Bancos y corporaciones transnacionales,
Gobiernos del Norte, Fondo Monetario Internacional, Banco
Mundial, otras instituciones financieras internacionales y
sus colaboradores en el Sur, son autores, coautores,
cómplices o encubridores de los siguientes delitos y
crímenes cometidos:
a. captar parasitariamente el patrimonio natural y demás
recursos del Sur para satisfacer el pago de la Deuda
Externa, instrumento político, ideológico y económico de
explotación sobre nuestros pueblos;
b. mantener y favorecer el intercambio desigual que
contribuyó al aumento de la Deuda Externa, contribuyendo al
aumento de la extracción y producción de materia prima
vendida a precios muy bajos y a su vez la importación de
productos industrializados comprados a precios sumamente
elevados, intercambio desigual que se vio favorecido por
los subsidios que los países ricos mantienen;
c. cobrar intereses usurarios que hicieron que la Deuda
Externa aumentara de manera exponencial, en lugar de
disminuir, a pesar del flujo de pagos por parte de los
países del Sur;d. realizar operaciones fraudulentas entre
los grandes bancos transnacionales y empresarios de países
del Sur, simulando deudas inexistentes, a través de
mecanismos especulativos que en lugar de favorecer la
producción, sirvieron para el enriqueci-miento de pocos
pues esas deudas simuladas fueron nacionalizadas;
e. aplicar las políticas de ajuste estructural y otras
políticas económicas que obligan a nuestros Estados a
procesos de privatización de los recursos naturales y
servicios esenciales y a destinar el dinero que debe ser
invertido en obras sociales, o reactivación económica, al
pago de la deuda;
f. apoyar a regímenes dictatoriales o criminales a través
de préstamos que los sostienen y enriquecer ilícitamente a
los dictadores, a pesar del rechazo de los pueblos
oprimidos y la sanción por parte de organismos de las
Naciones Unidas o de derechos humanos;
g. aplicar en forma perversa los recursos de las deudas
contraídas, destinándolos a enriquecer a los gobernantes, a
favorecer gastos suntuarios y depositarlos en bancos
extranjeros, en lugar de destinarlos a obras sociales;
h. forzar la imposición de programas de integración
económica que se caracterizan por favorecer únicamente los
intereses de las empresas transnacionales de los países
industrializados del Norte y por violar los derechos
fundamentales y colectivos de los pueblos;
i. imponer condiciones políticas y económicas recesivas
en los países deudores para consentir la renegociación de
la deuda;
j. seguir cobrando una deuda que ya se ha pagado con
creces, es decir cometiendo el delito de estafa;
k. violar el Derecho Internacional y sus normas y cuerpos
legales, como la Declaración Universal de los Derechos
Humanos, el Convenio 169 de la OIT sobre los pueblos
indígenas, la Convención para la eliminación de todas las
formas de discriminación contra las mujeres, el derecho a
la autodeterminación de los Pueblos, entre muchos otros, y
las leyes nacionales;
l. manejar un complot internacional entre los acusados
para saquear y expoliar a los pueblos del Tercer Mundo,
para lo cual han cometido sistemáticamente los crímenes
anteriormente mencionados;
m. cometer el crimen de genocidio y crímenes contra la
humanidad. El jurado solicita al Tribunal que dicte la
sentencia condenando a los acusados por la comisión de
todos o algunos de los delitos y crímenes cometidos y
mencionados en este veredicto. Solicita además que declare
a la DEUDA EXTERNA como inexistente, y por eso extinta, por
ser odiosa, infame, ilegal, usurera, injusta, fraudulenta,
ilegítima y causante la pérdida de soberanía nacional y de
la calidad de vida de la mayoría de la población del Sur.
El Tribunal aceptó las siguientes recomendaciones del
jurado:
- Hacer un llamado a la unión de todos los ciudadanos
presentes en este foro, a los pueblos del Sur y a aquellos
ciudadanos de los países del Norte solidarios con las
causas de los pueblos a realizar campaña para asegurar la
cancelación y el repudio de la Deuda Externa.
- Iniciar procesos soberanos de auditorias
independientes de las deudas externas en nuestros países a
fin de hacer una verificación contable y jurídica y
establecer si existe aún una deuda a pagar, así como a
establecer procedimientos participativos y democráticos de
control sobre el endeudamiento.
- Pedir a los Parlamentos de los países endeudados que
investiguen el manejo que hicieron los responsables por
generar la deuda y hacerlos legalmente responsables ante la
justicia.
- Exigir la restitución de las riquezas extraídas del
Sur así como el pago por los daños causados por la misma.
- Demandar la devolución a los pueblos de las riquezas
ilegítima-mente habidas por las dictaduras, los gobiernos
corruptos y las empresas transnacionales cómplices de estos
hechos.
- Sostener campañas por la dignidad y soberanía a fin de
no permitir acuerdos económicos multilaterales o
bilaterales que atenten contra el bienestar de los pueblos,
incluyendo los acuerdos con el FMI o con Instituciones
Financieras Internacionales.
- Proponer a los gobiernos la unión a favor de esta
causa común y hacer lo necesario al fin de que solicite a
la Corte Internacional de la Haya una opinión consultiva
sobre la ilegitimidad de la deuda externa, y suspender
todos los pagar de intereses de la Deuda.
- Proponer a los gobiernos que esos intereses sean
utilizados exclusivamente en programas para el desarrollo
sustentable para la vida de los pueblos.
- Acompañar los procesos locales y nacionales, que
buscan la creación de sociedades sustentables desde el
punto de vista económico, alimenticio, energético y
ambiental.
- Apoyar la campaña por el reclamo de la Deuda
Ecológica, que es la responsabilidad y obligación que
tienen los estados del Norte, las corporaciones
transnacionales, la banca multilateral y otras
instituciones financieras privadas por la destrucción
ambiental en el Sur.
- Entregar las conclusiones de ese Tribunal a los
principales acusados y pedirles que responden a ellas en un
tiempo determinado.
- Acompañar los procesos legales que sigan a este
veredicto por parte de los demandantes a los acusados
plenamente identificados, declarados culpables por este
tribunal, para evitar que estos crímenes cometidos queden
en la impunidad. Denunciar a los gobiernos corruptos que
han permitido el saqueo de sus pueblos.
- Constituir una comisión global sobre la deuda con el
mandato de investigar e identificar a los responsables de
perpetuar la deuda ilegítima e impulsar iniciativas que los
lleven ante la justicia.
- Notificar a las Naciones Unidas y a los cuerpos
internacionales y regionales exigiendo la consideración de
la elaboración de instrumentos para asegurar la plena
vigencia de los derechos humanos universales por encima de
todo reclamo en materia de servicio de la deuda.