México: Por un frente amplio por la soberanía alimentaria
Hacia la constitución del Consejo Nacional en Defensa de la Soberanía Alimentaria y la Reactivación del Campo Mexicano
-REUNIÓN PREPARATORIA-
A partir de 1982 se impuso en México un modelo de agricultura y alimentación basado en la privatización, la apertura comercial indiscriminada y la desregulación del sector agroalimentario. Con la contrareforma salinista del artículo 27 constitucional en 1992 se pretendió impulsar la privatización de las tierras ejidales y comunales e iniciar, de hecho, un nuevo proceso de \"desamortización\" de los territorios en manos campesinas e indias y un verdadero proceso de deportación de la población rural \"excedente\", \"sobrante\", \"improductiva\".
Dicho modelo de dependencia alimentaria, monopolización del mercado agroalimentario y descampesinización compulsiva fue profundizado y elevado a rango de ley suprema de la nación y política de Estado con la aprobación y puesta en marcha del TLCAN en 1994.
Después de más de 25 años de sufrir una verdadera guerra contra la economía campesina y la población rural, el campo no aguanta más.
En el periodo del TLCAN se han perdido 2 millones de empleos agropecuarios.
Cada año migran a los Estados Unidos 300 mil personas originarias del sector rural.
La producción de alimentos se ha estancado y la dependencia alimentaria aumenta año con año, imponiéndose una lógica perversa, inhumana e irracional de exportar campesinos a los Estados Unidos e importar alimentos producidos en buena parte por dicha mano de obra, pagando por ellos más de 100 mil millones de pesos anuales en divisas.
Los bosques y selvas están en proceso de exterminio por la indolencia gubernamental y la rapacidad de las empresas nacionales y extranjeras, cuando hemos probado que la única forma para su conservación y manejo sustentable es a partir de la organización y gestión comunitaria.
Los territorios campesinos y sus enormes recursos (tierra, agua, playas, biodiversidad, recursos genéticos, bellezas escénicas, centros ceremoniales, riquezas culturales) están bajo asalto de las corporaciones trasnacionales y de los llamados megaproyectos.
La inseguridad alimentaria en la que ha sido sumido el país es una realidad cotidiana y pronto será una verdadera pesadilla: la crisis de los precios de la tortilla y sus impactos negativos en la economía popular así lo comprueban. Y esto es nada más la punta del iceberg. El país se encuentra en una escalada imparable de precios de la canasta básica porqué siguen intocadas las causas que generaron la elevación de los precios de la tortilla. México se encuentra en la más completa vulnerabilidad e inseguridad no solamente en el ámbito alimentario sino también como nación soberana.
Más de un tercio de la población padece desnutrición y anemia y en el sector rural, principalmente en la población indígena, esta proporción se eleva a más del 50 por ciento. El hambre es una realidad inaceptable en México a más un siglo de la revolución mexicana. El hambre no espera.
Entretanto, los oligopolios agroalimentarios nacionales y extranjeros aumentan sus ganancias y siguen creciendo en el mercado nacional y global, a costa de precios de monopolio, el hambre, el desempleo, la migración, el deterioro de los recursos naturales, de los subsidios públicos, de los privilegios fiscales y de la exención ilegal del pago de aranceles a las importaciones. Todo esto en nombre del libre mercado, de la libre competencia, de la libre empresa.
El modelo neoliberal, las corporaciones trasnacionales, la oligarquía mexicana y la élite gobernante han roto el pacto histórico del Estado mexicano con el campesinado, con los trabajadores del campo, con la población rural, que surgió a raíz de la revolución mexicana y de las recurrentes luchas campesinas posteriores.
Hoy se requiere un nuevo pacto histórico del Estado mexicano con los campesinos, con los hombres y mujeres del campo, si es que queremos luchar por un proyecto alternativo de nación. En este sentido es necesario proponerse salvar al campo para salvar a México. Ningún país en el pasado ha podido avanzar hacia estadios superiores de desarrollo y democracia con un campo arrasado y en ruinas. Y ningún país podrá hacerlo tampoco en el futuro.
El sueño neoliberal de un campo sin campesinos ni indios en México no es más que una pesadilla y vana ilusión. O hay México con campesinos y pueblos indios, o no hay México. Por qué sin maíz no hay país.
A efecto de enfrentar la grave crisis alimentaria que vive el país al tiempo que se sientan las bases para una reorientación de fondo de la política agrícola, comercial y alimentaria de conformidad con los derechos de los campesinos y campesinas, la soberanía alimentaria de la nación, la seguridad alimentaria y nutricional de la población, el derecho a la alimentación de los mexicanos y la seguridad nacional así como para enfrentar la amenaza del año 15 del TLCAN, los impactos de la reducción de las reservas mundiales de alimentos por su utilización creciente en la elaboración de biocombustibles en Estados Unidos y la Unión Europea así como los efectos en la agricultura y la disponibilidad de alimentos por causa del cambio climático global.
Del gobierno mexicano no esperamos nada, así lo ha demostrado con sus políticas anti-campesinas, durante más de 15 años. Por ello, hoy, las organizaciones campesinas e indígenas; las organizaciones no gubernamentales, de derechos humanos, ambientalistas, urbanas, de consumidores, sociales y sindicales; artistas, científicos, intelectuales, académicos y sociedad civil en general, tenemos una nueva oportunidad de unirnos y alzar nuestra voz en favor de la Soberanía Alimentaria y por la defensa del campo mexicano.
¡Estamos a unos cuantos meses del 1ero de enero del 2008!
¡EL TIEMPO SE AGOTA!
Ante la necesidad de formar un frente amplio, plural e incluyente, se convoca a una reunión preparatoria para construir la convocatoria para la constitución de EL CONSEJO NACIONAL EN DEFENSA DE LA SOBERANÍA ALIMENTARIA Y LA REACTIVACIÓN DEL CAMPO MEXICANO , cuyos ejes de lucha serán los siguientes:
- Sacar al maíz y al frijol del TLCAN.
- Moratoria a la siembra del maíz transgénico.
- Campaña nacional e internacional para promover que el maíz mexicano y las expresiones culturales que involucra se inscriban tan pronto como sea posible en la Lista de Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.
- Impulsar una campaña (paraguas) nacional de Movilizaciones por la Salvación del Campo, la renegociación del TLCAN y el Presupuesto Rural 2008 en la segunda semana del mes de octubre próximo, incluyendo una Marcha Nacional Por la Salvación del Campo del Ángel de la Independencia al Zócalo de la Ciudad de México.
- Impulsar otras acciones en el marco de esta campaña nacional.
- Generar e impulsar políticas públicas adecuadas para recuperar y defender la autosuficiencia y Soberanía Alimentaria.
- Recuperación del papel y responsabilidad del Estado para el fomento productivo, el desarrollo social y las inversiones estructurales en el campo a fin de reducir la desigualdad social y regional, incluyendo planeación de largo plazo y presupuestos multianuales y considerando la reconstrucción, rentabilidad, competitividad y articulación de las redes de valor agropecuarias, forestales y pesqueras, con prioridad al mercado interno.
La cita es el próximo lunes 11 de junio, a las 16 horas, en el Hotel El Ejecutivo, ubicado en la calle de Viena # 8, Col Juárez,
Atentamente,
CONSEJO NACIONAL DE ORGANIZACIONES CAMPESINAS
(AMUCCS, ANEC, CNOC, CEPCO, FDCCH, MAÍZ, RED MOCAF, UNOFOC)
COORDINADORA NACIONAL PLAN DE AYALA
EL BARZÓN – ALIANZA NACIONAL DE PRODUCTORES AGROPECUARIOS Y PESQUEROS
ASOCIACIÓN MEXICANA POR LA AUTODETERMINACIÓN DE LOS PUEBLOS
INSTITUTO MAYA
ARMANDO BARTRA
CRISTINA BARROS
MARCO BUENROSTRO
ANTONIO TURRENT
BLANCA RUBIO
ADELA SAN VICENTE
Enrique Pérez S. (Coordinador de Prensa y Comunicación
Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de Productores del Campo, A.C. (ANEC)
56-61-59-14,
56-62-92-97,
044-55-16-44-67-08,
prensanec@gmail.com,
anec1@prodigy.net.mx