Contra la barbarie, el estudio <br>¡Contra el individualismo, la solidaridad!
Queridos amigos y amigas del MST:
En nombre de nuestro compromiso en la lucha contra el oscurantismo y el
retraso, dos fuertes instrumentos de dominación de las elites brasileñas, el
MST está buscando garantizar la enseñanza fundamental para miles de niños,
jóvenes y adultos del campo, en más de 1.200 escuelas primarias públicas, y en
decenas de escuelas de segundo grado, instaladas en los asentamientos. Además,
en nombre de esta misma lucha, el MST vio la necesidad de contar con una
Escuela Nacional para los militantes de los movimientos populares, proyecto
que culminó con la inauguración, en enero de 2005, de la Escuela Nacional
Florestan Fernandes (ENFF), en el municipio de Guararema (SP).
Nuestra Escuela Nacional tiene como principal objetivo ser un espacio de
formación superior pluralista en las más diversas áreas del conocimiento no
sólo para los militantes del MST sino también para militantes de otros
movimientos sociales rurales y urbanos, de Brasil y de otros países de América
Latina.
En este primer año de actividades, realizamos diversos cursos de nivel
superior en las áreas de Filosofía Política, Teoría del Conocimiento,
Sociología Rural, Economía Política de la Agricultura, Historia Social de
Brasil, Coyuntura Internacional, Administración y Gestión Social (en sociedad
con la Facultad de Santo André), curso de especialización en Educación del
Campo (en sociedad con la Universidad de Brasilia-UNB) y curso de Estudios
Latinoamericanos (en sociedad con la Universidad Federal de Juiz de Fora-UFJF).
Tenemos otros acuerdos para cursos que están siendo impartidos en los espacios
de las propias universidades brasileñas con las que tenemos convenios. Además
de esto, la Escuela ofreció numerosos seminarios, talleres y conferencias
realizados por profesores de diversas universidades y facultades brasileñas y
por renombrados intelectuales de otros países. Para participar en estas
actividades, la Escuela recibió cerca de 1.500 estudiantes, militantes de
varios movimientos sociales. La Escuela también mantiene actividades de apoyo
a la comunidad del distrito de Parateí, donde tiene su sede, destacándose, en
especial, los cursos de informática y de acceso a la Internet, ofrecidos a la
población juvenil pobre.
Por filosofía de enseñanza, en nombre de la necesidad de preservar su
subordinación prioritaria a los intereses y decisiones de los movimientos
organizadores de los diversos cursos, en especial el MST, la Escuela busca
preservar un máximo de autonomía en relación con las instituciones públicas y
privadas. Por ello mismo, sus actividades son mantenidas gracias a la
contribución financiera de los movimientos que envían sus estudiantes, o de
los propios estudiantes, o gracias a los convenios suscritos con universidades
y otras instituciones de enseñanza. La mayoría de los cursos cuenta con la
docencia voluntaria y no-remunerada de sus profesores. En cuanto a los
estudiantes, éstos asumen todas las tareas y servicios internos de la escuela,
como limpieza, apoyo en la cocina, en la huerta, etc. En otras palabras, la
Escuela es, también, una escuela de solidaridad permanente, involucrando a
toda la comunidad que en ella vive.
Sin embargo, nuestros gastos permanentes son elevados, razón por la cuál
dependemos de la solidaridad de nuestros amigos y amigas. Las contribuciones
de los proyectos que tenemos con entidades de solidaridad ya no son
suficientes y estamos necesitando de su apoyo. Por regla general, nuestros
cursos funcionan en etapas de 3 a 4 semanas de duración cada uno. Al término
de cada etapa, los estudiantes retornan a sus lugares de origen, extendidos
por todo el país, en un sistema de alternancia permanente entre teoría y
práctica. En cada etapa, sólo por concepto de pasajes, gastamos, en promedio,
400 reales por estudiante y aproximadamente 30 reales por día de alimentación,
hospedaje y material didáctico.
Cuando fundamos nuestra Escuela, asumimos que no podíamos continuar esperando,
generación tras generación, que la transformación tan necesaria de la política
de asignación de los subsidios públicos venga, finalmente, a modificar y
mejorar, objetiva y realmente, las condiciones de vida de la amplia mayoría de
nuestro pueblo. Además, para que esa mayoría asuma el control activo y
competente de su propia historia, exigiendo la realización de cambios sociales
indispensables, es necesario que se apropie de los saberes que le son negados
precisamente en nombre de la preservación y perpetuación de este orden social
inicuo y excluyente. Esto fue lo que nos llevó a asumir la tarea de abrir las
vías de acceso a esos saberes para aquellos que habían sido excluidos de los
mismos. Es una tarea tan gigantesca como la miseria dominante en el campo
brasileño. Una tarea que exige de todos nosotros coraje y dedicación para se
hagan realidad los sueños e ideales de una sociedad justa y solidaria.
En nombre de esos sueños e ideales, decidimos pedir su solidaridad y apoyo
para que podamos continuar teniendo en nuestras aulas a los estudiantes pobres,
campesinos o trabajadores urbanos, y a sus hijos e hijas.
La solidaridad es la más bella cualidad del ser humano
São Paulo, mayo de 2006
Adelar Pizetta (Coordinador General de la ENFF)
Alípio Freire (Comité de amigos de la Escuela)
Heloisa Fernandes (Grupo de profesores voluntarios)
Usted puede contribuir a través del:
Banco do Brasil S/A
Rua Sen. Joaquim Miguel Siqueira, 25 –
Centro - Jacareí-SP -
CEP 12327-695
Nº do Banco.: 001
agência.: 0683-1
conta corrente.: 46.927-0
Código SWIFT.: BRASBRRJSBO
Banco Itaú S/A
Rua Dr. Lúcio Malta, 445 –
Centro - Jacareí-SP –
CEP 12327-000
Nº do Banco.: 341
agência.: 0240
conta corrente.: 73.166-1
Código SWIFT.: ITAUBRSP
Letra Viva, Año V. No. 117, 24-05-06.