Necesitamos cambiar la política económica
MST Informa, Año IV - no 77, lunes, 01 de noviembre de 2004
El 16 de octubre, cerca de 30 economistas representantes de
diversas entidades, universidades, estados y corrientes de
pensamiento se reunieron para discutir la situación
económica del país, sus consecuencias y propuestas de
alternativas.
La reunión fue convocada por el MST, Vía Campesina, Corecon
(RJ), y la Campaña Contra el ALCA. Queremos aprovechar este
espacio para compartir con vosotros el resultado de ese
debate.
1. En el diagnóstico general, los economistas concluyeron
que desde la década de 1980 la situación económica del país
no se alteró, manteniéndose una larga crisis de modelo
económico, con momentos de crecimientos intercalados por
momentos de estancamiento.
Según ellos, la actual política económica mantiene las
principales directrices de corte neoliberal caracterizadas
por: altos tipos de interés; manutención do superávit
primario que es utilizado para transferir recursos públicos
en el pago de los intereses de la deuda interna; la
prioridad para exportaciones, vistas únicamente como un
método para conseguir dólares, que equilibran la balanza de
pagos y la remesa de recursos para el exterior. Esas
directrices determinan la especulación financiera interna y
externa; y hacen que, incluso cuando hay crecimiento de la
economía, sea sin distribución de renta ni generación de
empleo.
2. Según su evaluación, este cuadro es el reflejo de la
hegemonía de las fuerzas neoliberales dentro del gobierno
Lula, en el poder económico y en los medios de comunicación.
Y esa política económica solamente será alterada, si se
produjeran crisis que huyan del control del gobierno, como:
crisis en el capital internacional, de carácter
especulativo, de origen cambiario, o de caída de las
exportaciones. O algún acto político internacional que
altere esa dinámica; O incluso, a nivel interno si hubiera
un re-ascenso del movimiento de masas en Brasil, que luche
contra las consecuencias del neoliberalismo, se contraponga
a la hegemonía actual y altere la correlación de fuerzas
sociales.
Si nada de eso sucediera, la actual alianza que eligió al
Presidente Lula débese mantener, consolidando la política
económica neoliberal para los próximos años. Lo que sería
una tragedia histórica para los intereses de la clase
trabajadora.
3. Hay alternativas de corto plazo, para otra política
económica. Como alternativa para la política económica, se
hace necesario defender en la sociedad y en los movimientos
sociales que hay otras opciones de corto plazo a ser
aplicada, incluso en los marcos de regulación del
capitalismo, priorizando la búsqueda de solución de los
problemas básicos del pueblo como el derecho al trabajo,
valorización del salario, acceso a la tierra, educación y
vivienda. Para aplicar esas prioridades sería necesario:
reducir la tasa de interés a los valores usados
internacionalmente; utilizar los recursos del superávit
primario, para las políticas de inversión, generación de
empleo y universalización de los servicios públicos,
renegociación de la deuda pública interna, control del
cambio. Control de la remesa de riqueza hacia el exterior.
Implementación de una reforma agraria masiva. Prioridad
absoluta en la democratización de la educación, creando las
condiciones necesarias para que los jóvenes, en especial
pobres, tengan acceso a escuela en todos los niveles, y
sobretodo de la enseñanza superior.
Ese cambio, sin embargo, no será posible sin el rompimiento
de los acuerdos del FMI y el freno en los acuerdos ALCA -
Unión Europea. O sea, la sociedad necesita debatir
urgentemente un nuevo proyecto de desarrollo nacional, que
oriente la política económica bajo otras directrices.
El grupo de economistas alertó también sobre que esas ideas
solamente tendrán viabilidad si los sectores populares y la
clase trabajadora tuvieron capacidad de construir
instrumentos de organización y movilización social, que
organicen su fuerza, que acumulen orgánicamente, que
estimulen luchas sociales y alteren la actual correlación de
fuerzas en la sociedad.
Como conclusión, los economistas creen que estamos ante la
necesidad de hacer una gran lucha ideológica, una verdadera
batalla de ideas con la clase dominante, a partir de la
necesidad de una nueva política económica, para resolver de
hecho, los problemas del pueblo.
iUn fuerte abrazo a todos y todas!
Secretaría Nacional del MST