Acerca de los transgénicos

2004-06-15 00:00:00

MST Informa, Año III - nº 65 viernes, 28 de mayo de 2004

Queridos amigos y queridas amigas del MST,

Esta semana querríamos debatir con vosotros un poco acerca de
los transgénicos. Sobre este tema se entabla diariamente una
batalla en la que combaten por un lado los intereses de diez
transnacionales productoras de semillas transgénicas,
herbicidas y fungicidas: Monsanto, Cargill, Basf y Bayer,
entre otras. A estas transnacionales se suman algunos
hacendados del estado de Rio Grande do Sul ilusionados con el
espejismo del lucro y también algunos sectores de la prensa
que tienen periodistas pagados por las transnacionales o
movidos por los propios intereses de clase de los dueños de
los medios de comunicación.

Por otro lado estamos nosotros, los ambientalistas, los
movimientos de agricultores familiares, las entidades de
defensa de los consumidores y gran parte de la opinión pública
brasileña. Según la última investigación del IBOPE, en
diciembre de 2003, sólo el 13% de los brasileños están
dispuestos a consumir alimentos transgénicos, el 16% aceptan
que el gobierno libere el cultivo de esas semillas y el 92%
defienden la rotulación de todos los productos con
ingredientes genéticamente modificados.

Los científicos están divididos básicamente en tres grupos:
una parte apoya a las empresas transnacionales, otra aprueba
sólo la investigación sobre las modificaciones genéticas y los
demás ya están convencidos de que las mutaciones genéticas
conllevan un perjuicio para la biodiversidad.

El gobierno también está dividido. Los Ministerios de Medio
Ambiente y de Desarrollo Agrario están en contra. Pero los de
Agricultura e Industria y Comercio están a favor.

Hasta el momento, el gobierno tan sólo liberalizó el plantío
de soja transgénica en las dos últimas cosechas haciendo uso
de una disposición provisional. Las semillas de soja
transgénica están siendo cultivadas, básicamente, en Rio
Grande do Sul. En Paraná la soja transgénica fue prohibida,
así como en Goiás y Santa Catarina. En los demás estados los
hacendados no muestran interés en cultivarla.

El gobierno incluyó en la misma disposición provisional la
obligatoriedad de rotular los derivados de esa soja aunque la
normativa que rige tal rotulado es tan vaga que hasta hoy
ninguna empresa la cumple. Si piensan que los productos
transgénicos son tan seguros, ¿por qué los esconden tanto del
pueblo?

A finales de 2003, el Palacio del Planalto –sede del ejecutivo
brasileño- elaboró un proyecto de Ley de Bioseguridad que
contemplaba los intereses de los agricultores familiares, de
los ambientalistas y del Ministerio de Medio Ambiente. Esa ley
fue debatida en la Cámara y allí la propuesta original fue
modificada por el propio líder del gobierno, el diputado Aldo
Rebelo (del Partido Comunista de Brasil por el estado de São
Paulo), más tarde substituido por Renildo Calheiros (del
Partido Comunista de Brasil por el estado de Alagoas), bajo la
presión de los ruralistas. Los cambios liberalizan totalmente
el cultivo de la soja transgénica, dan mayor poder a la
Comisión de Bioseguridad (CTNbio) -que sería formada tan sólo
por científicos- y mantiene la responsabilidad del IBAMA sobre
la liberación del cultivo comercial de los transgénicos.

Ahora la discusión está en el Senado. Los ruralistas están
presionando a favor de la propuesta del diputado Aldo Rebelo
que liberaliza completamente el plantío de transgénicos a
partir de la próxima cosecha, en septiembre. Los movimientos
sociales del campo, ambientalistas y entidades de consumidores
defienden la propuesta original del gobierno que es más
rigurosa, impone disciplina sobre la investigación y también
muchas limitaciones al cultivo comercial de esas semillas.

Por eso nos gustaría que cada uno de vosotros ejerciese su
derecho de ciudadano y exigiese una profunda investigación
sobre los efectos de los transgénicos en el medio ambiente y
en la salud del agricultor y del consumidor. Escriba al
presidente del Senado, José Sarney
(jose.sarney@senador.gov.br), para que se preserve nuestro
derecho a la precaución y que se cumpla la obligatoriedad del
rotulado.

¡Saludos! Secretaría Nacional del MST